Richard Pells analiza los estereotipos de amor y odio entre Europa y EE UU
El historiador describe en un libro una "relaci¨®n hip¨®crita"
Historiador en la Universidad de Tejas y articulista en el International Herald Tribune, el tejano Richard Pells defiende sin ambages el matrimonio comercio/ cultura. Pero ese resabio liberal que se aprecia en alg¨²n pasaje de su libro Not like us (No como nosotros) es s¨®lo parte de una mentalidad m¨¢s compleja. Desde la iron¨ªa y la capacidad autocr¨ªtica que reconoce parte de su amplia experiencia como extranjero: ha ense?ado en Amsterdam, Bonn, Par¨ªs...-, el tejano Pells desmenuza los malentendidos, t¨®picos y estereotipos que han marcado los ¨²ltimos 50 a?os de v¨ªnculos culturales y pol¨ªticos entre Estados Unidos y Europa. "Es una relaci¨®n nada er¨®tica, muy parad¨®jica e hip¨®crita. Se parece mucho a una pelea familiar".
Los primeros refugiados europeos, el Macharthysmo, las becas Fulbright, el Plan Marshall, Disney y la Coca Cola; el estereotipo yanqui de la Europa decadente y obsesionada por el pasado; el clich¨¦ europeo antiimperialista y antid¨®lar... Los cap¨ªtulos del libro de Pells (a¨²n no traducido en Espa?a) repasan los mitos que han convertido esta vieja relaci¨®n transoce¨¢nica en un parad¨®jico (y muchas veces hist¨¦rico) espejo de las respectivas identidades colectivas. Pells subraya el ego¨ªsmo como factor de mayor peso en una relaci¨®n "fascinante, nada er¨®tica, compleja, muy dif¨ªcil de explicar sin recurrir al lenguaje psicoanal¨ªtico", y empieza la entrevista disparando sin piedad, sin cortarse por la presencia de una empleada de la Embajada de su pa¨ªs, que graba y toma notas. "Europa se las ha arreglado siempre para utilizar la presunta dominaci¨®n americana en su favor. El enorme poder militar, econ¨®mico y cultural de Estados Unidos en este siglo, plasmado en la cultura de masas, ha fortalecido esa relaci¨®n. Pero no hay superioridad, porque los europeos interact¨²an con la cultura que reciben de Am¨¦rica, nunca la admiten pasivamente. Es como si en su viaje por el oce¨¢no la cultura americana fuera perdiendo gas".
Equilibrio
En el siglo XIX y a principios del XX era a¨²n peor, recuerda Pells. "Europa era considerada la ateniense, los americanos a¨²n cre¨ªan en el mito de Par¨ªs". Los fascismos cambiaron eso, y en 1945 Nueva York era el nuevo centro del universo. Aunque ahora tampoco es as¨ª del todo. "La cultura, sobre todo el cine y las teor¨ªas pol¨ªticas europeas siguen influyendo en Norteam¨¦rica, especialmente en el campo acad¨¦mico e institucional. Y a pesar de los prejuicios europeos, Hollywood sigue siendo, m¨¢s que el demonio, la gran exportadora de entretenimiento y felicidad a Europa. Eso habla de equilibrio, de reciprocidad".Pero ese aparente empate no deja de ser parad¨®jico, porque parte de una variada incomprensi¨®n. "Estados Unidos se ve a s¨ª mismo como el pa¨ªs de la libertad, la tolerancia y la intocabilidad respecto al Gobierno, pero hist¨®ricamente es el pa¨ªs de la prohibici¨®n (alcohol, lenguaje, tabaco...). Europa es menos moralizante, y, seg¨²n Am¨¦rica, menos pr¨¢ctica, lo cual no impide que cuando las cosas se ponen duras, como en Irak, Am¨¦rica recurra a Europa".
Los nombres que Pells considera claves en la relaci¨®n de influencia son poco novedosos. Sartre, Camus, Truffaut y Godard "bebieron en la novela y el cine americanos". El flujo regresa luego con Woody Allen, Altman o Scorsese, "herederos de Bergman o Fellini". ?Y en pol¨ªtica? "Tony Blair imita a Clinton, si no en la vida privada, al menos en el comportamiento p¨²blico". Pero no fue elegido por ser un clon de Clinton ("le votaron porque hablaba de problemas espec¨ªficamente brit¨¢nicos"), aunque es verdad "que Thatcher cre¨® escuela en EE UU".
Y en cuanto a la vieja cr¨ªtica expresada por muchos europeos de que Am¨¦rica no tiene otro coraz¨®n que el d¨®lar, Pells lo tiene claro. "Otro gran estereotipo. Europa cree que Am¨¦rica es un sitio dedicado a hacer dinero. Y que el gran arte es incompatible con el beneficio y el p¨²blico masivo. ?Acaso era indiferente Picasso respecto al precio de sus obras?".
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