Occidente concede un plazo de otro mes a Belgrado para cambiar de politica en Kosovo
ENVIADO ESPECIAL, El Grupo de Contacto (EE UU, Rusia, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia) ha preferido preservar su unidad antes de lanzar otro ¨®rdago al presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, por su pol¨ªtica en Kosovo. No hay nuevas amenazas ni sanciones tras la maratoniana reuni¨®n de ayer en Bonn. Y de las ya aprobadas en Londres el pasado d¨ªa 9 s¨®lo una entrar¨¢ en vigor: el embargo de armas. Pero esta medida deber¨¢ pasar por un nuevo y arduo proceso de debate, pues el texto de la resoluci¨®n de este embargo tiene que ser negociado antes de final de mes en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU.
Once horas de discusi¨®n no sirvieron de mucho. Ni los directores generales en la madrugada del mi¨¦rcoles, ni los seis ministros de Exteriores del Grupo de Contacto lograron consensuar un texto que penara a Milosevic por el aparente incumplimiento de lo exigido por ellos mismos hace 14 d¨ªas: retirada de Kosovo de la polic¨ªa especial serbia, aceptaci¨®n de la mediaci¨®n internacional de Felipe Gonz¨¢lez, apertura de un di¨¢logo sin condiciones y la admisi¨®n en Kosovo de todas las misiones humanitarias.El ministro ruso de Exteriores, Yevgueni Primakov, apoyado por su hom¨®logo italiano, Lamberto Dini, prefirieron ver la mitad llena de la botella: Milosevie ya hab¨ªa alcanzado un acuerdo sobre la educaci¨®n en alban¨¦s y tolerado las elecciones convocadas por los l¨ªderes kosovares. Esto demostraba, a su Juicio, la buena disposici¨®n del presidente yugoslavo. Los ministros de Exteriores de Alemania, Klaus Kinkel, y el del Reino Unido, Robin Cook, admitieron ciertos progresos, pero no del todo suficientes. Hab¨ªa, pues, que mantener la presi¨®n, pero sin cargar la mano. La secretaria de Estado de EE UU, Madeleine Albright, fue la m¨¢s intransigente. Milosevic ha incumplido. Es necesario poner en marcha las medidas de castigo adoptadas en Londres y estudiar otras nuevas.
El resultado de esta amalgama de sensibilidades, reflejado en el comunicado final, es decepcionante. Se le da a Milosevic otras cuatro semanas de plazo para cumplir con lo ya exigido el 9 de marzo cuando se le lanz¨® un ultim¨¢tum de 10 d¨ªas; se suspende la congelaci¨®n de las cuentas bancarias y la suspensi¨®n de visados. S¨®lo entrar¨¢ en vigor (el 31 de marzo) el embargo de armas, pendiente a¨²n de negociaci¨®n en la ONU.
"Esta reuni¨®n estaba menos amarrada por los estadounidenses", dijo una fuente occidental. "Se ha preferido rebajar el tono y no romper la sensaci¨®n de unidad ( ... ) para que Milosevic no descubra el truco", a?adi¨®. La posici¨®n de Primakov sorprendi¨® desde el primer instante. Por la ma?ana, dinamit¨® el trabajo de los directores generales realizado la noche anterior (estuvieron hasta las tres de la madrugada negociando el texto) con tres propuestas inesperadas: que se incluyera en el texto la frase "la soluci¨®n del problema de Kosovo dentro de Serbia", en vez de la Rep¨²blica Federal Yugoslava, lo que podr¨ªa cerrar el paso a una futura autonom¨ªa; oposici¨®n frontal a nuevas sanciones y negativa a que el texto definitivo recogiese como condici¨®n la aceptaci¨®n de Gonz¨¢lez como mediador. "Los rusos empiezan pidiendo lo imposible y despu¨¦s ceden", dijo un diplom¨¢tico. Ayer fue la excepci¨®n.
La cumbre, que hab¨ªa comenzado a las 10.20 de la ma?ana, se suspendi¨® a las 12. Hora y media de intensas negociaciones, silla con silla, entre Primakov, Kinkel y Albright, por un lado, y Cook y Dini por otro, no lograron resultados. Fuera de la sala de conferencias del Ministerio alem¨¢n de Exteriores, un runr¨²n de funcionarios de seis pa¨ªses corr¨ªa con decenas de borradores en la mano prestos a enmendar una frase o cambiar una coma.
Sin alegr¨ªa
Primakov le¨ªa, al filo de la una, una en¨¦sima propuesta de borrador a la puerta de los servicios. Al final, con los ministros de Exteriores de los seis pa¨ªses de la zona del conflicto (Albania, Bulgaria, Macedonia, Grecia, Rumania y Turqu¨ªa) esperando resignados un plant¨®n de casi dos horas, los ministros del grupo salieron al patio, a la intemperie, y se hicieron la foto de familia. Pero no hab¨ªa alegr¨ªa en sus rostros.En la rueda de prensa, Albright dijo que por el momento se sent¨ªa satisfecha con lo logrado ayer, pues con ello se "manten¨ªa la credibilidad y la unidad del Grupo de Contacto". Incluso en el ¨²ltimo punto del comunicado, por si hubiera alguna duda, tambi¨¦n se hizo hincapi¨¦ en este asunto: "La posici¨®n fundamental del Grupo de Contacto sigue siendo la misma". Albright a?adi¨® despu¨¦s que Milosevic cometer¨ªa un grave error si entendiera que esta reuni¨®n ha sido un fracaso o un triunfo de su posici¨®n intransigente. Una fuente diplom¨¢tica lo resumi¨® mejor: "Hay que evitar que Milosevic siga con el juego de crear un problema para medio resolverlo despu¨¦s y obtener una medalla por ello". La pregunta clave es: ?logr¨® ayer este objetivo? La respuesta se aplaza otras cuatro semanas.
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