Dos sospechosos en el fraude de las entradas

Japoneses que compran su sue?o de Mundial y acaban viendo a su equipo en pantalla gigante y desde Barcelona; alemanes que protestan en¨¦rgicamente porque siguen en D¨¹sseldorf cuando hab¨ªan pagado por pasar sus vacaciones en alg¨²n estadio de Francia; belgas, holandeses y suramericanos que ven, desde sus casas, c¨®mo sus equipos evolucionan en Francia sin su prometido y pagado apoyo... La bola de nieve levantada por el fraude de las entradas del Mundial amenaza con convertirse en temible avalancha para el comit¨¦ organizador de Francia 98 y para la FIFA. Los numerosos episodios de estafa en la billeter¨ªa conocidos durante los ¨²ltimos d¨ªas comienzan a ser destapados. Los jueces han tomado cartas en el asunto y apuntan con el dedo de la ley a las cabezas visibles de este gran timo.Por el momento, son ya dos las personas que est¨¢n siendo investigadas por los jueces Paul Albert y Xavi¨¨re Simeont, acusadas de falsedad, abuso de bienes sociales, de confianza y de poderes p¨²blicos. Ambas est¨¢n relacionadas con ISL France, filial del grupo suizo ISL Worldwide, prestatario comercial de la Federaci¨®n Internacional de F¨²tbol. Marc Loison, director general de la filial, es sospechoso de haber organizado o cubierto operaciones de reserva ilegal de entradas hechas en nombre de ISL France o en sus locales. Sobre Gilles Favard, consultor exterior contratado por ISL France, pesa la acusaci¨®n de la propia empresa de utilizar fraudulentamente papel con membrete de la sociedad para similares fines.

De hecho, Favard es se?alado como responsable del fraude a diferentes compa?¨ªas belgas que hab¨ªan encargado 15.600 entradas. Fue precisamente el abogado de estas empresas el que, v¨ªa misiva al responsable jur¨ªdico de la FIFA, Flavio Bataini, amenaz¨® con desvelar el asunto a la prensa si no recib¨ªan, al menos, los 1.500 abonos encargados para el partido que el 13 de junio enfrent¨® a los Pa¨ªses Bajos con B¨¦lgica. Baitini puso en manos de la FIFA el asunto y ¨¦sta exige ahora responsabilidades a ISL Worldwide. El presidente de esta empresa, Didier Forterre, se escuda en que han sido v¨ªctimas de la confianza depositada en Favard.

El hecho es que los investigadores no s¨®lo han encontrado en la casa del sospechoso documentos de reservas de billetes, 20.000 francos en especies y un centenar de entradas aut¨¦nticas -en parte procedentes de la Federaci¨®n Marroqu¨ª de F¨²tbol- sino tambi¨¦n las pistas que pueden conducir a un fraude de 2.000 entradas.

La bola toma forma con otra denuncia, la del abogado que representa a cuatro agencias de viaje japonesas que hab¨ªan comprado 15.000 entradas y a Passeport International, responsable de gestionar el encargo de los 15.600 abonos con destino belga. Este abogado sostiene que Favard se encuentra en el origen de la estafa de las 30.000 plazas. Junto a ¨¦l, Continental Contract, empresa irlandesa representada en Par¨ªs por pr¨®ximos a Favard.

De las entradas incautadas, algunas provienen de la Federaci¨®n Colombiana, otras de ISL Marketing AG, y otras constan a¨²n como invitaci¨®n. ISL se defiende atribuyendo toda la responsabilidad a Favard y contraataca acusando a las agencias "de hipocres¨ªa" por recurrir a intermediarios no oficiales sin verificar su fiabilidad. Por encima de todo ello, est¨¢ un hecho m¨¢s grave si cabe: algunas de las entradas vendidas en el mercado negro han sido proporcionadas por diversas federaciones nacionales, lo que toca en propia carne a la FIFA que, por su parte, hab¨ªa emprendido una investigaci¨®n contra las federaciones de Colombia y Camer¨²n. Joseph Blatter, su nuevo presidente, reconoc¨ªa que "el sistema de entradas est¨¢ lejos de ser perfecto". "Hay que sacar consecuencias para evitar que se repita en el futuro, especialmente en lo que concierne al mercado negro", abundaba Blatter.