Espa?a llega al todo o nada

Espa?a no depende de s¨ª misma. Esa es la cruda realidad con la que la selecci¨®n llega a la ¨²ltima jornada de la primera fase. El futuro del equipo est¨¢ en sus manos —necesita ganar o empatar ante Bulgaria—, pero tambi¨¦n en las de Nigeria, que debe conseguir a toda costa que Paraguay haga siempre menos que Espa?a: empatar si los de Clemente vencen, o perder si lo que sucede en Lens es un empate. As¨ª de complicada est¨¢ la situaci¨®n.

Y frente a este oscuro panorama, el seleccionador sigue desenfocado. Persiste en su guerra contra los periodistas —su conferencia de prensa de ayer fue de nuevo una rueda de ataques y amenazas a los medios de comunicaci¨®n—, sin percibir que el adversario est¨¢ en otro lado y se llama Bulgaria.

Aunque las alineaciones de Clemente son siempre un misterio que no se desvela hasta ¨²ltima hora, si se toma como referencia el entrenamiento de ayer, el equipo espa?ol ense?ar¨¢ novedades. La m¨¢s sonada, que Ra¨²l iniciar¨¢ el encuentro sentado en el banquillo. Su lugar lo ocupar¨ªa Alfonso, que no jugar¨ªa de punta sino m¨¢s retrasado. Y Morientes entrar¨ªa en el eje del ataque. Por lo dem¨¢s, Nadal, ya completamente recuperado de sus problemas f¨ªsicos, actuar¨¢ de titular. Y, al fin, de defensa.