Cl¨¦ment narra la historia de las religiones a trav¨¦s de un ni?o
La autora francesa juega en 'El viaje de Teo' con el modelo de 'El mundo de Sof¨ªa'
Catherine Cl¨¦ment lo admite sin tapujos: El mundo de Sof¨ªa, la novela de Jostein Gaarder que narra la historia de la filosof¨ªa a trav¨¦s de la mirada de una ni?a, fue el origen de El viaje de Teo, repaso literario de la historia de las religiones vista por un adolescente enfermo, que publica tambi¨¦n Siruela. "Eleg¨ª un adolescente masculino porque son ellos y no ellas los que se plantean los problemas metaf¨ªsicos. Y quise que estuviera enfermo para poder contar las t¨¦cnicas curativas que surgen al margen de cada religi¨®n", dijo ayer en Madrid la autora francesa.
Teo Fournay es un joven franc¨¦s de clase media-alta y origen griego, nacido en un parto dif¨ªcil: gemelo ¨²nico, "bello como el diablo". Hipersensible y superdotado, Teo acaba de cumplir 14 a?os en su familia feliz. Es hijo de una profesora de Ciencias Naturales y de un pianista que adem¨¢s es director de las investigaciones del Instituto Pasteur. Teo ha sido educado sin religi¨®n, pero est¨¢ en la edad de las preguntas clave. Busca las respuestas de noche: lee, hasta muy tarde, El Diccionario de mitolog¨ªa, El libro de los muertos tibetano... Hasta que la madre se alarma por su aspecto melanc¨®lico. El ni?o est¨¢ enfermo de un virus desconocido. Y cuando los m¨¦dicos lo desahucian, su exc¨¦ntrica t¨ªa Marthe decide llevarle a dar la vuelta al mundo para que el joven cumpla en directo su sue?o: saciar su inmensa curiosidad por las religiones.Este planteamiento inicial, a caballo entre cierta ingenuidad y una ambici¨®n desmedida, sirve a Catherine Cl¨¦ment para iniciar un viaje de 600 p¨¢ginas que abarca todas, o casi todas, las religiones del mundo. Residente en Senegal desde hace tres a?os, fil¨®sofa y ensayista de antropolog¨ªa y psicoan¨¢lisis, novelista prol¨ªfica (una docena de obras), viajera y pol¨ªglota, aficionada a los toros (escribi¨® un libro sobre el asunto y fue amiga de Antonio Ord¨®?ez) y amante de otros ritos de sangre no s¨®lo animal (seg¨²n se advierte en El viaje de Teo), Catherine Cl¨¦ment es una conversadora apasionada y una escritora minuciosa y muy accesible. Cuenta que la idea de la novela, que ha obtenido ya en Francia y Alemania ¨¦xitos similares a los de El mundo de Sof¨ªa, surgi¨® una noche de tertulia con sus amigos. "La conversaci¨®n parti¨® de la enorme difusi¨®n que hab¨ªa logrado la novela de Gaarder. Hablamos de lo sorprendente de ese fen¨®meno literario nuevo, que guarda relaci¨®n con la mundializaci¨®n, y alguien plante¨® la necesidad de insistir en ese tipo de libros. Pensamos qu¨¦ temas podr¨ªan merecer una novela semejante. Hab¨ªa muy pocos, pero entre los m¨¢s evidentes sali¨® la religi¨®n (luego, alguien public¨® un libro as¨ª con las matem¨¢ticas). Yo les dej¨¦ hablar y hablar, y cuando acabaron, dije: "Lo har¨¦ yo".
Divertida
Cl¨¦ment daba bien el perfil. "Llevaba 14 a?os estudiando las religiones comparadas. Ten¨ªa toda la documentaci¨®n que necesitaba y hab¨ªa viajado todo lo que hac¨ªa falta. Me fue muy f¨¢cil escribir el libro, muy agradable. La idea era contar la religi¨®n in situ, desde los lugares donde se fund¨® cada una. Era m¨¢s complicado, pero la ¨²nica manera realista de contarlo, y la m¨¢s divertida".El periplo de Teo va desde Par¨ªs a Jerusal¨¦n, El Cairo, Roma, Delhi, Benar¨¦s, Yakarta, Tokio, Kioto, Mosc¨², Estambul, Dakar, Lisboa, R¨ªo de Janeiro, Nueva York, Praga y Atenas. Cl¨¦ment busca ofrecer una explicaci¨®n sencilla, imparcial y equilibrada de las distintas expresiones religiosas y divinidades que existen en el mundo a trav¨¦s de una mezcla de juego de enigmas y ritual inici¨¢tico: Teo pregunta y su t¨ªa Marthe le va explicando cosas, d¨¢ndole claves de lectura o pistas de sabios a los que visitar.
?Pero hubo alguna ¨¦poca o alguna religi¨®n m¨¢s complicada de explicar? "Lo m¨¢s dif¨ªcil fue sin duda contar la primera etapa del cristianismo", dice Cl¨¦ment. "Es un caos total. Si uno va al Santo Sepulcro de Jerusal¨¦n, necesita mucho coraje para entender algo. Es el sitio donde conviven todas las religiones cristianas, menos la protestante. Aclarar eso explicando bien cada peque?a diferencia o particularidad fue muy dif¨ªcil".
Tal vez lo m¨¢s curioso del libro es que la autora no se limita a explicar la historia y reunir los datos actuales de las religiones institucionales. Se ocupa con la misma (o mayor) pasi¨®n de las peque?as o grandes brujer¨ªas y subreligiones que surgen a la sombra, al margen o incluso en contra del esp¨ªritu de los libros sagrados. "Hay ritos inveros¨ªmiles, alucinantes, en el mundo. T¨¦cnicas muy antiguas que han conseguido sobrevivir a la religi¨®n. Debajo del Islam y del cristianismo hay miles de trucos, viejos chamanes que han penetrado en las fisuras de los libros y cuyos saberes han llegado m¨¢s o menos intactos hasta hoy. Sin duda ?frica es el lugar donde m¨¢s imaginaci¨®n le ponen al animismo: aquello es como el Folies Berg¨¨re del sacrificio".
La escritora destaca uno de ahora mismo en Senegal. "Dura once d¨ªas y requiere la muerte de dos toros, seis carneros, doce gallos y cuatro sesiones de trance de dos horas diarias. No se sabe cu¨¢ndo empez¨®, pero s¨ª que estaba, solapado, en el Cor¨¢n. Y se intuye que no hace mucho tiempo que los animales han sustituido a los hombres".
Cl¨¦ment se resiste a dar una lectura cerrada de su viaje. "Cada cual que entienda lo que le parezca". Pero lanza un aviso para navegantes inform¨¢ticos: "La mundializaci¨®n no existe. El mundo es demasiado plural y rico. Nadie adora el dinero, sino lo que hacen con ¨¦l. Y me parece que la cat¨¢strofe inform¨¢tica total est¨¢ muy cerca".
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