"Despu¨¦s de lo sucedido, nadie puede pedirnos que dejemos las armas"
ENVIADO ESPECIALAunque los vientos del G-8 le arrinconan, el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo (ELK) ha decidido no rendirse. "Seguiremos luchando, porque despu¨¦s de lo sucedido en nuestro pa¨ªs, nadie puede pedirnos que dejemos las armas", manifest¨® en una entrevista a EL PA?S su m¨¢s cualificado representante civil, Jakup Krasniqi, quien ofreci¨® su colaboraci¨®n militar a la OTAN. Ministro portavoz del autodenominado Gobierno Provisional de Kosovo en el Exilio -el traje pol¨ªtico de los guerrilleros-, Krasniqi pidi¨® al l¨ªder moderado Ibrahim Rugova que apoye "sin equ¨ªvocos" los ataques a¨¦reos aliados.
Krasniqi es un pausado profesor de historia de instituto que dice so?ar "¨²nicamente con la libertad". Sufri¨® prisi¨®n pol¨ªtica en Belgrado durante diez a?os, particip¨® en la fundaci¨®n del ELK y es desde entonces miembro permanente de su secretariado, encargado desde 1998 de representarle p¨²blicamente. Particip¨® en las negociaciones de Rambouillet. Suave en las formas, se muestra muy firme en los contenidos.
Desconfianza ante Rusia
"Habr¨¢ que analizar en detalle los resultados del G-8", manifest¨® a este diario en la tarde de ayer. Pero ya mostr¨® su "desconfianza" hacia una "soluci¨®n diplom¨¢tica en la que participe Rusia, porque es la gran abogada de los serbios". "Espero que la OTAN, Estados Unidos y la Uni¨®n Europea no se equivoquen, eviten caer en esa trampa". En caso contrario, su prop¨®sito es "seguir luchando", aunque sea en solitario, por la independencia de Kosovo. "Tampoco ahora ning¨²n pa¨ªs nos ayuda, s¨®lo lo hace la comunidad albanesa en la di¨¢spora", reconoci¨®.Krasniqi enarbola las recientes refriegas del ELK con el Ej¨¦rcito serbio, sobre todo en la zona fronteriza del norte, como prueba de que el cuerpo guerrillero "est¨¢ vivo", e incluso, "pese a las agresiones de los serbios, m¨¢s efectivo y fuerte que nunca". Cuando se le recuerda que perdi¨® las siete ciudades desde donde ejerc¨ªa su influencia, responde que "sigue habiendo un mando central, que ejerce un perfecto control sobre los regionales". Asegura que sus soldados ascienden a una cifra astron¨®mica, 60.000, y que desde ahora "apuntar¨¢n mejor contra los objetivos serbios".
El ELK para nada ha cambiado. "Nuestra estrategia pol¨ªtica es la independencia". Y para lograrla ofrece su colaboraci¨®n militar a la Alianza Atl¨¢ntica. "Estamos dispuestos a participar con ella en una intervenci¨®n terrestre, podemos hacer cosas que ella no puede hacer, porque conocemos el terreno palmo a palmo y ya tenemos experiencia de lucha terrestre", indica el ministro portavoz.
Independencia para Kosovo
A la objeci¨®n de que la comunidad internacional se reafirma en contra de la independencia y a favor de la autonom¨ªa, Krasniqi replica que despu¨¦s de Rambouillet y de la "limpieza ¨¦tnica" practicada por Milosevic, "la comunidad internacional est¨¢ moralmente obligada a castigarlo, y el mejor castigo a Serbia es la independencia de Kosovo". Pero un Estado de nuevo cu?o contagiar¨ªa a otras ¨¢reas vecinas y desestabilizar¨ªa los Balcanes, un principio que ¨¦l niega tajantemente: "No es verdad, s¨®lo nuestra independencia traer¨¢ una paz duradera a la regi¨®n, porque s¨®lo puede sac¨¢rsela de la barbarie destruyendo al Ej¨¦rcito serbio". La hip¨®tesis de una partici¨®n de Kosovo, para crear un Estado independiente y mantener el resto federado a Yugoslavia, le resulta "simplemente inaceptable".Adem¨¢s, durante una comparecencia p¨²blica en Tirana, Krasniqi exigi¨® al moderado Rugova que "apoye sin equ¨ªvocos" los ataques de la OTAN y la entrada en Kosovo de una fuerza militar internacional "dirigida" por la Alianza, as¨ª como su acatamiento del compromiso de crear un Gobierno provisional, adoptado, seg¨²n ¨¦l, en Rambouillet.
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