"El ballet es universal porque selecciona lo mejor de las artes"
El Universal Ballet de Se¨²l, la compa?¨ªa de danza cl¨¢sica m¨¢s importante de Asia, se presenta a partir de hoy, y s¨®lo tres d¨ªas, en el patio central del Cuartel del Conde Duque de Madrid, abriendo la temporada de ballet de los Veranos de la Villa. Oleg Vinogradov (Leningrado, 1937), director art¨ªstico del conjunto, fue durante 20 a?os el jefe supremo del legendario Kirov de San Petersburgo, al que supo devolver los esplendores de anta?o. Artista polifac¨¦tico, pintor, escritor y core¨®grafo, Vinogradov est¨¢ empe?ado en la fabulosa tarea del traslado del gran repertorio cl¨¢sico hasta Asia. Tras cinco a?os de labor, la cr¨ªtica internacional se ha rendido a la disciplina y sensibilidad de los artistas coreanos a la hora de ser cisnes o willis. Vinogradov reconstruy¨® a su imagen y semejanza la compa?¨ªa coreana. "Al principio era dif¨ªcil alternar el trabajo entre Se¨²l y San Petersburgo. Introduje el gran repertorio en sus versiones m¨¢s cl¨¢sicas, desde La bella durmiente hasta Arlequinade, de El lago de los cisnes a Giselle. Cuando en Rusia no era ya posible vivir claramente y las cosas en el Kirov empezaron a oscurecerse, cuando casi pierdo la vida dos veces, decid¨ª no perder m¨¢s tiempo all¨ª y me he dedicado por completo a esta gente, a hacer de ellos la mejor compa?¨ªa de Asia".Todo eso los acerca al Kirov. "El ballet es universal en su est¨¦tica, porque selecciona lo mejor de todas las artes. El ballet cl¨¢sico posee esos valores eternos y su verdad esencial puede considerarse un misterio. El caso es que se entiende en todas partes, se le ama en todas partes".
Pero ahora Vinogradov se vuelca a partes iguales con las escuelas: "Los bailarines con que contamos hoy no tienen a¨²n toda la unidad ideal, eso llegar¨¢. Les escogemos minuciosamente, largas piernas, largos brazos, manos expresivas, todo eso. Pero hay que trabajar la cantera, el futuro".
En principio parecer¨ªa que el ballet de tut¨² es algo lejano a los asi¨¢ticos: "Pues no. La tradici¨®n de ballet en estos pa¨ªses tiene menos de 15 a?os, pero el p¨²blico llena cada vez m¨¢s los teatros. Al principio se hac¨ªan s¨®lo 12 o 15 espect¨¢culos al a?o. Hoy d¨ªa hacemos all¨ª m¨¢s de 80. Pero esto es solamente el comienzo. Persigo implantar temporadas estables, y la verdad es que los cl¨¢sicos es lo que m¨¢s gusta. Hay algo de adivinanza indescifrable en esas piezas del gran repertorio que encantan por igual a todos en todas partes, y es quiz¨¢ porque hay algo de lenguaje abstracto, de lenguaje perfectamente puro dentro de estas obras".
Pero, a las puertas del sigloXXI, ?c¨®mo se plantea representar el repertorio decimon¨®nico?: "Lo principal ahora es que al ballet cl¨¢sico hay que limpiarlo de toda la idiotez que han vertido sobre ¨¦l. Demasiados diletantes contaminando las obras. Hay tantas compa?¨ªas por ah¨ª alterando las cosas que no tendr¨ªan derecho a estropear esas obras eternas. No hay tantos estudiosos de la verdadera cultura del ballet, y eso es necesario. Por eso, mi filosof¨ªa, mi postulado principal, es que hay que respetar las leyes del ballet, sus principios, algo que va desde la pose m¨¢s b¨¢sica hasta las articulaciones m¨¢s complejas. Es, en el fondo, un idioma, con todas sus reglas".
Esto anim¨® a Vinogradov durante sus m¨¢s de 20 a?os en el Kirov: "All¨ª lo hice todo con el coraz¨®n: limpiar todo el repertorio. Hasta el a?o 1995 recuerdo mi vida en el Kirov como una canci¨®n maravillosa y constante, que no ces¨® jam¨¢s de sonar. Fue una felicidad hacer, mantener la mejor compa?¨ªa del mundo. Despu¨¦s, todo se oscureci¨®".
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