"El PP de ahora no es el de la regeneraci¨®n centrista, ni el PSOE el de Filesa y los GAL"
Luis Carlos Rej¨®n (1951) dejar¨¢ de ser en septiembre portavoz de IU en el Parlamento andaluz, cargo que ha desempe?ado durante nueve de los 14 a?os que lleva como diputado. Llevar¨¢ ahora el ¨¢rea Electoral federal, desde donde quiere sacar a la federaci¨®n de "las p¨¢ginas de sucesos a las de pol¨ªtica".Pregunta. ?Por qu¨¦ deja la portavoc¨ªa a s¨®lo unos meses del final de la legislatura? Respuesta. No me parec¨ªa conveniente huir y cuando se inicia un ciclo electoral muy vertiginoso, con catalanas, andaluzas y generales, aunque no s¨¦ en qu¨¦ orden ni en qu¨¦ tiempo, mi dedicaci¨®n va a ser plena a la secretar¨ªa electoral. No me parec¨ªa serio mantener el t¨ªtulo de portavoz. No me gusta la titulitis ni la acumulaci¨®n de cargos. Inform¨¦ al grupo parlamentario de mi decisi¨®n y de que me gustar¨ªa seguir siendo diputado y formar parte de la direcci¨®n del grupo. P. En 1998 tambi¨¦n fue nombrado responsable federal de IU del ¨¢rea del Estado. Podr¨ªa habr¨ªa hecho entonces esa transici¨®n de poder. R. Se ha hecho una transici¨®n durante la legislatura. He procurado que cada diputado fuera portavoz en virtud de la tem¨¢tica que lleva. He procurado no ser un portavoz absorbente, aunque el que lo haya conseguido o no, ya lo analizar¨¢n. A m¨ª no me gustaba la idea de que los diputados del PSOE pudieran subir a la tribuna y recordaran que Julio Anguita, Felipe Alcaraz, Gabino Puche o Javier Arenas se fueron. Eso duele y pens¨¦ que a mi grupo no se lo iban a decir. No he querido dejar abierto ese argumento al adversario pol¨ªtico. P. ?Cu¨¢l es su candidato para sustituirle? R. Tengo una idea y cuando se re¨²na el grupo har¨¦ mi propuesta personal, pero de las monarqu¨ªas me gustan los elementos decorativos y la estabilidad, pero no los hereditarios. No me parece que tenga que se?alar al heredero o heredera, porque alguien puede plantear que hay elementos de amistad. P. Pues su coordinador regional, Antonio Romero, ha lanzado el nombre de Concha Caballero. R. Cada uno es cada uno. Aprend¨ª de Julio Anguita que cuando uno se va de un sitio nunca se?ala al sucesor ni se inmiscuye en temas que se dejan, porque ni es elegante ni honesto. P. El acuerdo municipal de IU con el PSOE ?ha influido en su decisi¨®n? R. Para nada. Yo negoci¨¦ en 1987 y 1991 acuerdos con el PSOE en los ayuntameintos. No fue posible en 1995 y s¨ª ahora, en 1999. As¨ª que porque uno mata una vez un gato, no se le puede llamar matagatos. Tuve una postura muy clara en 1995, y ah¨ª est¨¢n las grabaciones para contrauso de desmemoriados, en contra de lo que aprob¨® el consejo federal de no llegar a acuerdos municipales con el PSOE, pero luego respet¨¦ la decisi¨®n de la mayor¨ªa y me convert¨ª en uno de sus m¨¢s fieles defensores. Pero no nos enga?emos: la causa fundamental por la que no hubo acuerdo en los ayuntamientos en 1995 es porque al PSOE no le interesaba: ellos consegu¨ªan Huelva y nosotros las alcald¨ªas de M¨¢laga y C¨®rdoba. Y ahora ha habido m¨¢s posibilidades de acuerdo porque el PSOE se lleva la Diputaci¨®n de M¨¢laga y las alcald¨ªas de Granada y Almer¨ªa. El trato s¨ª le convence. ?sa es la realidad. A m¨ª me gusta desacralizar los pactos y el acuerdo de 1999 es razonable, de seguridad, de intentar poner en un nivel institucional unas primeras piedras que, bien trabajadas, pueden llevar a la unidad de acci¨®n de la izquierda en ese nivel. P. Si estuvi¨¦ramos en el a?o 1994 ?volver¨ªa a repetir paso a paso el proceso de la pinza? R. Es que no estamos en el a?o 1994. La percepci¨®n de la gente ahora es totalmente distinta. El PP no es el partido que apuntaba una regeneraci¨®n centrista en 1994, sino que est¨¢ sacando los peores vicios de la derecha econ¨®mica, social y pol¨ªtica. Y el PSOE de ahora no es el de los Filesa, los GAL y Rold¨¢n. Las percepciones son distintas. Si en este momento dijera que har¨ªa lo mismo, alguien podr¨ªa pensar que soy un soberbio est¨²pido y si dijera que no lo repetir¨ªa, tambi¨¦n estar¨ªa mintiendo, porque no busco el perd¨®n ni la benevolencia. Creo que lo que se hizo en el 94 fue un intento honesto por parte de IU de controlar al Gobierno, de ensayar nuevas f¨®rmulas, de regeneraci¨®n, y que s¨®lamente coincidi¨® con el PP en los elementos de control parlamentario y donde el PP y el PSOE coincid¨ªan en las votaciones pol¨ªticas. ?Que hicimos pol¨ªtica de laboratorio? Sin duda. P. Los socialistas le acusan a usted con frecuencia de dificultar el entendimiento entre las dos fuerzas. R. Soy una percha para colgar los muertos. Reconozco que tengo una especial habilidad para meterme en todos los charcos, pero llevo tiempo quit¨¢ndome la pasi¨®n morbosa que me produc¨ªa muchas veces ir de malo. P. O sea, que le gustaba ese papel. R. En parte s¨ª, pero en parte me tocaba. P. El PP dice que tras los pactos municipales entre IU, PSOE y PA s¨®lo ellos ejercen la oposici¨®n. R. Si por oposici¨®n se entiende el pegar gritos y decir tonter¨ªas, yo se la regalo; pero si lo que hablamos es de propuestas distintas pues... Como no he sacralizado los pactos y los he dejado en su sitio, en el Parlamento andaluz s¨¦ que hay un Gobierno del PSOE y PA, que tiene una pol¨ªtica con la que, en parte, no coincido, planteando alternativas y dando le?a. P. ?Te¨®fila Mart¨ªnez tiene posibilidades de ganar a Manuel Chaves? R. Hay que relativizar, pero creo que no. El PP ten¨ªa unos determinados m¨¢rgenes y los ha desaprovechado. No ha girado al centro, ni gestual ni visualmente, sino hacia la derecha. No es lo mismo una apuesta por Amalia G¨®mez o Celia Villalobos que por Te¨®fila Mart¨ªnez. En la sociedad visual que estamos, Te¨®fila es una persona que recuerda a una derecha, cosa que no le ocurre a Amalia. O ya rozar el esperpento de poner al ex alcalde de C¨®rdoba, Rafael Merino, de portavoz parlamentario en la pr¨®xima legislatura, sin ser diputado todav¨ªa. ?Dimito de portavoz porque esta profesi¨®n se est¨¢ devaluando mucho! P. Para IU el repetir resultados en las futuras elecciones auton¨®micas ?ser¨ªa un ¨¦xito? R. Creo que IU, a todos los niveles, ha entendido el mensaje del electorado. Hemos tomado nota del coscorr¨®n y con paciencia, tranquilidad y sin soberbia estamos actuando. Eso nos va a permitir frenar la bajada y poner las piedras para recuperarnos. Mi objetivo es sacar a IU de las p¨¢ginas de sucesos y meterla en las de pol¨ªtica. Quiero que el debate sea el proponer pol¨ªticas. Yo creo que la gente no ha castigado a Izquierda Unida porque haya debate, sino porque las peleas no conclu¨ªan en pol¨ªticas y la pluralidad ha aparecido como un problema y no como una riqueza. Cuando eso se saca, ?claro que la gente te castiga y se queda en su casa! Ah¨ª hay esa zona. Mi trabajo al frente de una comisi¨®n electoral es motivar a la gente para que vuelvan a votar a IU. P. ?Deja m¨¢s amigos que enemigos en el Parlamento? R. No me llevo ninguna enemistad. Al contrario, muy buenos amigos [Rej¨®n cita a las diputadas socialistas Elena V¨ªboras y Maribel Flores, al popular Salvador Fuentes y al andalucista Antonio Moreno] y ahora me he encontrado con detalles humanos admirables. Me voy con dolor, pero sin ninguna herida. P. A la hora de negociar ?prefiere a un Javier Arenas o a un Manuel Chaves? R. A un Enrique Linde. Era dur¨ªsimo en la negociaci¨®n, un marmolillo, pero cuando lleg¨¢bamos a un acuerdo, aunque no estuviera firmado, iba a misa y aquello se cumpl¨ªa. De los otros dos ha habido cumplimientos e incumplimientos. Y el acuerdo menos edificante fue el de Canal Sur. Me negu¨¦ a hacer una pirula contra uno de los dos y ellos lo hicieron contra IU. Y en pol¨ªtica no est¨¢ todo permitido.
"Llevo tiempo quit¨¢ndome la pasi¨®n morbosa que me produc¨ªa muchas veces ir de malo"
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