"Las mujeres no somos unas sentimentales"

Es f¨¢cil imaginar a Sigourney Weaver caminando por la Quinta Avenida de Nueva York, la ciudad donde naci¨® hace 49 a?os y donde hoy vive con su marido y con su ¨²nica hija. Quiera o no, mira por encima del hombro. Es alt¨ªsima y elegante, pero su frialdad es tan perfecta que resulta extra?amente acogedora. Todo el mundo la ve como a una mujer dura (algo debe quedar tras ser durante una d¨¦cada la teniente Ripley), pero ella asegura que no lo es, aunque cuando habla de los papeles que se escriben para las actrices afirma: "Se abusa de los personajes sentimentales para las mujeres; una mujer tambi¨¦n es una persona con iron¨ªa, humor, malhumor y defectos. Las mujeres no somos s¨®lo unas sentimentales".La actriz present¨® ayer en la secci¨®n oficial de San Sebasti¨¢n su pel¨ªcula Un mapa del mundo. Hace 15 a?os, Weaver present¨® en el mismo festival Alien, la pel¨ªcula de Ridley Scott que la convirti¨® en una estrella y en una de las actrices mejor pagadas de Hollywood. "Entonces vine aqu¨ª con mis padres, era la primera vez que estaba en un festival. Fue aqu¨ª donde vi por primera vez Alien, fue muy excitante. Hoy, l¨®gicamente, todo es muy diferente, esta pel¨ªcula es m¨¢s personal y el papel es quiz¨¢ el m¨¢s complicado de mi carrera. Estoy profundamente satisfecha de este trabajo, es la verdad".

Hija del que fuera presidente de la NBC y de una actriz brit¨¢nica, Sigourney Weaver decidi¨® que quer¨ªa ser actriz a los 15 a?os, se cambi¨® su nombre de pila (Susan Alexandra) por el de uno de los personajes de El Gran Gatsby y se empe?¨® en estudiar teatro cl¨¢sico. Es ahora cuando la actriz cree que se acerca su mejor momento como int¨¦rprete. "No s¨¦ si es porque con la edad soy mejor actriz o porque existen m¨¢s personajes interesantes para las mujeres maduras, pero la realidad es que los papeles que me ofrecen son cada vez mejores".

Drama

En Un mapa del mundo Sigourney Weaver interpreta a una madre, enfermera de un colegio, que es acusada de maltrato y abuso de menores. Un drama que se desencadena tras la muerte en el estanque de su casa de la hija de su vecina y amiga. La dura relaci¨®n entre ambas mujeres (que se quieren pero que saben que jam¨¢s podr¨¢n volver a estar juntas), la relaci¨®n con su marido y con sus dos hijas y el viaje cat¨¢rtico a la c¨¢rcel ("aunque es inocente de los abusos que le atribuyen, ella quiere ir a la c¨¢rcel porque se siente culpable de la muerte de la hija de su amiga") centran el filme. "Es un retrato ajustado de lo que es el matrimonio y de lo que es una mujer, de lo que es una familia de clase media americana", explica la actriz.

Un drama que, seg¨²n la actriz, "tiene mucho humor". "Ella es una mujer torpe, una bocazas que mete la pata y que no cae muy bien. Es un personaje que podr¨ªa estar entre Bergman y Woody Allen. Nunca resulta totalmente inocente porque no cae bien, pero es que las personas son as¨ª, tienen defectos".

Sigourney Weaver viaja con su marido, el director de teatro Jim Thompson, con su maquilladora y con su estilista. Entre la conferencia de prensa y las entrevistas personales se cambia de ropa, firma los aut¨®grafos que le piden los adolescentes que se amontonan en las puertas del hotel Mar¨ªa Cristina con una sonrisa encantadora. Es muy simp¨¢tica, pero si no le gusta el traductor pide que lo cambien por otro que hable "m¨¢s despacio". Cuentan que cuando Al Pacino la conoci¨® no se incorpor¨® para saludarla, y es que todo el mundo hace comentarios sobre su metro ochenta de estatura, una medida que la distancia de los dem¨¢s y que, seg¨²n ella, ha marcado su carrera. "Quiz¨¢ por esto he interpretado a tantas mujeres solitarias".