La vuelta del mayor Zeman
"?Han vuelto, los comunistas han vuelto!". Con alarma debi¨® de reaccionar m¨¢s de un checo asustadizo cuando, hace unas noches, al poner la televisi¨®n, se encontr¨®, ni m¨¢s ni menos que con el Mayor Zeman. Este intr¨¦pido investigador que ir¨®nicamente comparte apellido con el actual primer ministro, el socialdem¨®crata Milos Zeman fue protagonista en los a?os setenta, durante la implacable "normalizaci¨®n" -es decir represi¨®n- que sigui¨® al aplastamiento de la Primavera de Praga, de uno de los programas estrella de la televisi¨®n checoslovaca. El mayor Zeman era el James Bond rojo. Su perspicacia, firmeza ideol¨®gica y rectitud de conducta deb¨ªan servir de ejemplo a todos los habitantes del socialismo real y sobre todo a la juventud y a los miembros del partido. A Zeman no se le escapaba un esp¨ªa brit¨¢nico, ni un disidente saboteador de los logros de los obreros y campesinos, ni ning¨²n traficante de m¨²sica occidental desclasada, viciosa y degenerada.A muchos checos no les ha hecho ninguna gracia esta reaparici¨®n del h¨¦roe, mitad Sherlock Holmes, mitad chekista. La asociaci¨®n de antiguos presos pol¨ªticos ha protestado contra "esta promoci¨®n del comunismo" de la televisi¨®n estatal.
M¨¢s preocupante que el hecho de que el mayor Zeman vuelva en las pantallas es que las ¨²ltimas encuestas indiquen que el Partido Comunista de Bohemia y Moravia ser¨ªa hoy el m¨¢s votado con un 23% muy por delante de los socialdem¨®cratas que gobiernan en minor¨ªa, que s¨®lo alcanzar¨ªan el 17% y del partido Civico Democr¨¢tico de Vaclav Klaus, que lograr¨ªa un 21%. Y los comunistas checos no son excomunistas como los surgidos de los "partidos hermanos" en los otros pa¨ªses de europa central sino comunistas irredentos. Todos los analistas en Praga conf¨ªan en que se trate simplemente de una actitud de protesta pasajera de los ciudadanos encuestados ante el lamentable espect¨¢culo que los dos partidos mayoritarios, el del primer ministro Zeman y el de Klaus y de los continuos esc¨¢ndalos por fraudes en las privatizaciones y por la desastrosa evoluci¨®n econ¨®mica checa a partir de 1997. La encuesta ha conmocionado a los c¨ªrculos pol¨ªticos.
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