Ra¨²l: "Cuando Hierro juega, todos estamos m¨¢s tranquilos"
Comienza el entrenamiento de la selecci¨®n y algunos jugadores se lanzan al campo y organizan un rondo con el entusiasmo de los ni?os. Se r¨ªen, se gastan bromas. Ra¨²l es distinto. A un costado, contempla todo eso con la distancia de un general de brigada. Habla con el segundo entrenador, Jos¨¦ Carcel¨¦n. Habla con Hierro, el capit¨¢n. Habla con Guardiola. Con el seleccionador Camacho. Todo el mundo le se?ala su ausencia en los ¨²ltimos partidos como la m¨¢xima causa de la falta de acierto goleador en la selecci¨®n. ?l responde entren¨¢ndose como un poseso: metiendo goles a pu?ados. A un toque, a dos, a tres. De cabeza, con la zurda, con la derecha. Es el goleador por antonomasia, y la presi¨®n le viene de perlas. Encaja en su car¨¢cter altivo. Se tiene una fe enorme, y eso lo eleva a la condici¨®n de l¨ªder en un equipo que a medida que Hierro gana a?os, va necesitando de comandantes. Ra¨²l dice que el bast¨®n de mando le corresponde a Hierro. El central es su compa?ero de habitaci¨®n en la selecci¨®n y Ra¨²l parece su lugarteniente. El aprendiz adelantado, que le defiende cada vez que puede. ?Merece jugar Hierro como titular en la selecci¨®n a pesar de que lleva tres meses pr¨¢cticamente sin competir?"Fernando Hierro lleva muchos a?os siendo el n¨²mero uno y estoy cansado de repetirlo desde hace tiempo", comenta Ra¨²l. "La decisi¨®n de que juegue o no contra Noruega debe tomarla el entrenador, pero yo creo que est¨¢ m¨¢s fresco f¨ªsicamente que los dem¨¢s. Y su presencia, aunque sea en el banquillo, es un factor importante para la selecci¨®n. Cuando ¨¦l est¨¢ en el terreno de juego todos nos sentimos m¨¢s tranquilos".
Crisis goleadora
Espa?a sufre una peque?a crisis goleadora. Ha marcado dos goles en dos partidos: uno de penalti ante Suecia y otro de falta directa ante Luxemburgo. En ninguno de los dos partidos jug¨® Ra¨²l, y en su ausencia qued¨® patente la necesidad que el equipo tiene de ¨¦l. "Todos los problemas se resolver¨¢n cuando la pelota entre", sintetiza.
Ra¨²l mide sus palabras al mil¨ªmetro. No se pronuncia cuando le preguntan si prefiere jugar con un media punta, como con Valer¨®n en la selecci¨®n, o sin ¨¦l, como en el Real Madrid, donde ¨¦l mismo ha tenido que cubrir puestos vacantes a falta de otro especialista. "No s¨¦ si me sacrifico m¨¢s en el Madrid que aqu¨ª, s¨®lo que aqu¨ª voy a jugar como segunda punta, donde mejor me siento", explica. ?Eso significa que le apetece jugar por detr¨¢s de un delantero centro de referencia, como Urzaiz? Nuevamente, Ra¨²l prefiere no pronunciarse con rotundidad, y opta por la prudencia. "Todas las posiciones me han venido muy bien, y en la selecci¨®n todos tenemos muy claro el lugar y la forma en que debemos jugar", dice.
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