Condena sindical del pacto Iglesia-Estado por el despido de una profesora de religi¨®n

Resurrecci¨®n Galera acudi¨® ayer a clase como en un d¨ªa cualquiera para completar la treintena de horas lectivas semanales que estipula su contrato laboral como ¨²nica profesora de religi¨®n del colegio p¨²blico Ferrer Guardia, que la Junta de Andaluc¨ªa tiene en Los Llanos de la Calzada, a 12 kil¨®metros de Almer¨ªa. El colegio vivi¨® toda la jornada en medio de una gran agitaci¨®n, reconoci¨® su director, Jos¨¦ Ferre Romera. La avalancha de llamadas interes¨¢ndose por la situaci¨®n de la profesora Galera y el desfile de periodistas fue tan constante que Jos¨¦ Ferre tuvo que adoptar medidas 'para que nada perturbase la tranquilidad de los colegiales, ni a los profesores'.

Por la tarde, el claustro -27 profesores, de los que 17 son mujeres- se reuni¨® para redactar un comunicado de apoyo a la ¨²nica profesora de religi¨®n del centro. 'Los abajo firmante manifiestan la gran competencia profesional de la profesora mencionada al impartir las clases de religi¨®n en nuestro centro; [y] su talante y comportamiento, en todo momento, con alumnos y compa?eros', afirma el claustro.

Contrato laboral

El contrato laboral que vincula este a?o a la profesora Galera con el colegio Ferrer Guardia, lo mismo que otros anteriores en los ¨²ltimos siete a?os, lo emiti¨® el Jefe de Personal de la Subdelegaci¨®n del Gobierno en Almer¨ªa en nombre del Ministerio de Educaci¨®n y Cultura, pero lo gestiona el obispado de Almer¨ªa por un acuerdo firmado el 26 de febrero de 1999 entre el Gobierno del PP y la Conferencia Episcopal Espa?ola, que lleva la r¨²brica de la entonces ministra de Justicia, Margarita Mariscal de Gante, del ministro de Educaci¨®n, el hoy vicepresidente primero y ministro del Interior, Mariano Rajoy, y la del entonces presidente de los obispos espa?oles, el arzobispo de Zaragoza, El¨ªas Yanes, sustituido un mes m¨¢s tarde por el cardenal Antonio Mar¨ªa Rouco.

Dicho acuerdo estipula que, aunque el empleador y pagador de los profesores de religi¨®n -unos 13.000 en toda Espa?a- es la Administraci¨®n del Estado, quien los propone es la Iglesia cat¨®lica, a trav¨¦s del obispo ordinario de cada una de las 67 di¨®cesis en que la Santa Sede ha dividido el territorio espa?ol.

Cat¨®lico como la profesora Galera, Johannes Romes, su marido, se cas¨® en su pa¨ªs en 1968 y se divorci¨® siete a?os m¨¢s tarde. Ahora est¨¢ a la espera de que su di¨®cesis concluya el proceso de nulidad para celebrar el matrimonio can¨®nico con su actual esposa. Reside desde hace 12 a?os en Almer¨ªa, es traductor y, antes, trabaj¨® en el gabinete de Prensa del Parlamento de la Rep¨²blica Federal de Alemania, en la ex capital Bonn. Su decisi¨®n de apoyar a la esposa 'hasta las ¨²ltimas instancias judiciales' la concret¨®, anoche, con este dato: ya ha entrado en contacto con la UGT para que les gu¨ªe y ayude en el pleito, que sospecha 'muy largo', y hoy mismo lo har¨¢ con Comisones Obreras, con igual finalidad.

A esa misma hora, sin embargo, los sindicatos, desde Madrid, ya habian decidido tomar 'el toro por los cuernos', en palabras de un dirigente de CC OO. La Federaci¨®n de Ense?anza de este sindicato calific¨® el caso de 'absolutamente inaceptable'. El despido, 'atenta contra derechos fundamentales de la persona -a la intimidad, a la propia imagen y al trabajo, sin que ¨¦ste pueda ser cuestionado por las relaciones personales de ¨ªndole privada de la trabajadora-, en virtud de un acuerdo entre el Estado Espa?ol y el Estado Vaticano, que impone unas relaciones de car¨¢cter casi feudal a unos trabajadores a los que se deja al margen de la regulaci¨®n laboral ordinaria que tiene el resto', declar¨® Matilde Llorente, de la comisi¨®n ejecutiva de la citada federaci¨®n.

Jes¨²s Ram¨®n Copa, secretario general de la Federaci¨®n de Ense?anza de UGT, fue m¨¢s all¨¢ en la denuncia de ilegalidad. Dijo: 'La Conferencia Episcopal Espa?ola es la mayor empresa de trabajo temporal de Espa?a', en alusi¨®n a los 13.000 profesores que cada a?o son escogidos y despedidos por la Iglesia para atender en cada curso a las clases de religi¨®n. Copa considera ese proceso 'completamente al margen de la legislaci¨®n'.

UGT ha ganado ya varios pleitos a la Iglesia por este motivo, pero cree que el conflicto de los profesores de religi¨®n no se solucionar¨¢ hasta que el Estado revise los acuerdos firmados con la Santa Sede, que a juicio de Jes¨²s Ram¨®n Copa son 'escandalosamente anti o preconsticionales'. 'Apoyaremos a esta profesora de Almer¨ªa hasta el ¨²ltimo extremo, pero no lograremos una soluci¨®n definitiva hasta que el Estado espa?ol revise ese concordato. En el a?o 2001 resulta intolerable que una persona pierda su trabajo por los motivos que aducen esos se?ores', concluy¨®.

El colegio Ferrer Guardia, que lleva este nombre en homenaje al pedagogo Francisco Ferrer i Guardia, ejecutado en Barcelona acusado de haber sido el instigador de las revueltas que desembocaron en la Semana Tr¨¢gica de 1909, tiene 480 alumnos, de los que 461 han elegido acudir a clase de religi¨®n cat¨®lica. Los otros 19 son, la mayor¨ªa, hijos de musulmanes y no disponen de profesor para esa creencia. Como alternativa, se les ofrece una clase para reforzar su aprendizaje del castellano.

Opini¨®n del obispado

El obispado de Almer¨ªa reaccion¨® ayer a la noticia publicada el jueves por EL PA?S. En una nota se?al¨®, en referencia a la profesora Galera, que 'ni nombra ni cesa a nadie, solamente propone a los profesores id¨®neos para cada curso escolar'. 'Es cierto que esta profesora fue llamada por el Delegado Diocesano de Ense?anza y le hizo saber las noticias llegadas a la delegaci¨®n por su situaci¨®n irregular dentro de la Iglesia, situaci¨®n que fue aceptada por ella', a?ade la nota. El citado delegado, el sacerdote Antonio Rueda, hab¨ªa negado el martes a este peri¨®dico ese extremo.

El obispado afirma tambi¨¦n en su nota que la vida de los profesores de religi¨®n ha de ser 'coherente con las normas y el esp¨ªritu de la Iglesia'. [A la profesora] 'le asiste el derecho de casarse con quien quiera y como quiera, pero sin olvidar las obligaciones de los ni?os, padres y doctrina de la Iglesia. Los derechos y deberes siempre van de la mano y no deben separarse', agrega.