La SEPI ha invertido m¨¢s de 300.000 millones en la compa?¨ªa

En el a?o 1991 el Gobierno espa?ol decidi¨® entrar en el capital de Aerol¨ªneas Argentinas a trav¨¦s de Iberia, entonces compa?¨ªa p¨²blica integrada en el Instituto Nacional de Industria (INI), que m¨¢s tarde se transform¨® en la actual Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

Desde 1991 a 1996 se aument¨® de forma escalonada la participaci¨®n desde el 20% inicial hasta el 84%. Posteriormente, la participaci¨®n espa?ola ha seguido ampli¨¢ndose hasta el actual 91,2% que posee la SEPI. El aumento de la presencia accionarial espa?ola se produjo, seg¨²n la SEPI, en contra de sus planes y fue debido a que varios accionistas argentinos y de otras nacionalidades renunciaron y siguen renunciando a mantener acciones en la empresa.

Espa?a mantuvo la apuesta por Aerol¨ªneas despu¨¦s de 1995, aunque por imperativo de la Uni¨®n Europea tuvo que desvincular la compa?¨ªa del Grupo Iberia y pasarlo a la SEPI, con lo que se debilit¨® el sentido industrial que pod¨ªa tener hasta ese momento.

Desde un lado u otro, el Gobierno espa?ol destin¨® entre 1991 y 1996 un total de 216.000 millones de pesetas y, desde entonces, otros 114.000 millones (los acordados el pasado a?o en el Plan Director al que se opone el sindicato de mec¨¢nicos APTA).

La SEPI ha intentado encontrar un socio que le relevara en el accionariado pero ninguna empresa ha aceptado el traspaso. En el a?o 1998 se lleg¨® a firmar un acuerdo para que American Airlines tomara el 10% del capital. La gesti¨®n de American se reflej¨® en un aumento importante de las p¨¦rdidas que se elevaron a casi 40.000 millones en el a?o 1999. La SEPI tuvo que hacerse cargo de la gesti¨®n y asumir los compromisos de pagos para evitar la suspensi¨®n de pagos.

Entonces, algunos sindicatos presentaron un grupo inversor que estaba interesado en entrar en el capital, pero finalmente no dispon¨ªa de los recursos necesarios para reflotar la empresa, que desde 1991 hasta 2000 tan s¨®lo ha logrado unos modestos beneficios de 300 millones de pesetas en 1997. En el a?o 2000, a¨²n por conocer las cifras oficiales, las p¨¦rdidas pueden llegar a los 45.000 millones de pesetas.

La SEPI dise?¨® en 1999 un Plan Director, semejante al que aplic¨® en Iberia, que pretende sanear la empresa y darle viabilidad. La aportaci¨®n de capital del plan por la SEPI ha sido de 114.000 millones de pesetas. El plan exige sacrificios laborales como la reducci¨®n de los salarios en un m¨¢ximo del 20%, un programa de prejubilaciones de 1.300 personas sobre 7.000 trabajadores y la contenci¨®n en gastos generales.