La ONCE investiga si se utiliz¨® su nombre en el esc¨¢ndalo

La Fundaci¨®n ONCE decidi¨® entrar en el capital de Gescartera durante un consejo celebrado en diciembre de 2000, donde acord¨® adquirir un 10% del capital por un importe de 40 millones de pesetas.

'Nunca hubo comunicaci¨®n oficial previa con la Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en relaci¨®n a que ¨ªbamos a tomar una participaci¨®n en la sociedad gestora de carteras Gescartera. No puedo asegurar que alguien de la ONCE en conversaciones informales pudiera exponer esta posibilidad y, por ello, estamos investigando. Pero lo cierto es que nunca ninguno de nuestros ¨®rganos ejecutivos manifest¨® esta intenci¨®n hasta que se pronunci¨® el consejo de diciembre del pasado a?o', apuntan desde la Fundaci¨®n ONCE.

Y a?aden: 'Jam¨¢s mostramos intenci¨®n de tener m¨¢s de un 10% del capital de Gescartera. Nunca hablamos de adquirir el 25% de la firma'.

Estas manifestaciones desde la Fundaci¨®n ONCE contrastan con los argumentos que ayer ofrec¨ªa Pilar Valiente, presidenta de la CNMV, en relaci¨®n con la transformaci¨®n de la sociedad gestora Gescartera en agencia de valores.

Solvencia y prestigio

El 13 de julio de 2000, el consejo de la CNMV aprobaba por unanimidad la transformaci¨®n, bas¨¢ndose en los siguientes aspectos. 'El hecho de que del conjunto de la documentaci¨®n obtenida en el curso de la supervisi¨®n no se desprend¨ªa la existencia de un descuadre patrimonial. La solvencia y el prestigio de una entidad como la Fundaci¨®n ONCE, as¨ª como el hecho de que un director general de dicha Fundaci¨®n se hiciera cargo, como consejero delegado de la actividad diaria de Gescartera. Por ¨²ltimo, que a la agencias de valores se les exige, no s¨®lo mayores requisitos de capital y solvencia que a las gestoras de cartera, sino adem¨¢s una obligaci¨®n de remisi¨®n de informaci¨®n en base mensual...', dijo ayer la presidenta de la CNMV.

Sin embargo, cuando entra la Fundaci¨®n ONCE en el capital (diciembre de 2000) ya hab¨ªa sido autorizada por la CNMV (julio de 2000) y por el Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda (septiembre de 2000), aunque estas autorizaciones siempre estaban condicionadas a la entrada en el capital de la Fundaci¨®n ONCE, una decisi¨®n que seg¨²n esta instituci¨®n se tom¨® mucho despu¨¦s.

Las hip¨®tesis que se barajan en este trascendente equ¨ªvoco es que el propio Antonio Camacho hubiese utilizado a la Fundaci¨®n ONCE para la transformaci¨®n, apoy¨¢ndose en conversaciones con alg¨²n miembro de la fundaci¨®n.