Los ciudadanos reciben el euro con euforia
Rotundo ¨¦xito de la nueva moneda en los 12 pa¨ªses de la UE en los que entra en circulaci¨®n
Entre la curiosidad y el nerviosismo, los ciudadanos europeos fueron ayer los protagonistas del mayor paso dado en la construcci¨®n de Europa en el ¨²ltimo medio siglo. Desde Helsinki a Las Palmas o desde Atenas a Dubl¨ªn, centenares de miles de personas se abalanzaron sobre los cajeros nada m¨¢s comenzar el nuevo a?o para hacerse con billetes de euros que por la ma?ana usaron ya en cafeter¨ªas, estaciones y panader¨ªas. La magna operaci¨®n log¨ªstica de distribuci¨®n de euros fue todo un ¨¦xito. 'El euro es ya un trozo de historia en nuestras manos', resumi¨® el acontecimiento Romano Prodi, presidente de la Comisi¨®n Europea.
'No hay noticias, as¨ª que es una excelente noticia', sentenci¨® a primera hora de la tarde Gerassimos Thomas, portavoz de Econom¨ªa de la Comisi¨®n Europea, al se?alar que en Bruselas no se hab¨ªa recibido a la una de tarde informe alguno sobre posibles anomal¨ªas en ninguno de los 12 pa¨ªses (todos los de la UE, menos Reino Unido, Dinamarca y Suecia). Para esa hora, en Francia ya hab¨ªan sido retirados 126 millones de euros ('meuros' en la jerga comunitaria) en 1,5 millones de operaciones (180 millones cuatro horas despu¨¦s); en B¨¦lgica, 14 millones; en Italia, m¨¢s de 70; en Portugal, 17,9 millones, y Holanda m¨¢s de un mill¨®n. Los billetes de 50 y 20 euros eran los m¨¢s servidos.
Eran algunos de los escasos datos que manejaba la Comisi¨®n en un d¨ªa en el que los altos cargos del Ejecutivo comunitario estaban de vacaciones. Los ciudadanos, por el contrario, se movilizaron desde el comienzo del nuevo a?o, hasta el punto de que la retirada de dinero de los cajeros, ya habitualmente elevada en la Nochevieja, rompi¨® todos los r¨¦cords en la zona euro.
Cajeros a tope
En Francia, se registraron durante la noche 450.000 operaciones en cajeros; en Italia, se retiraron hasta 50 millones de euros; en B¨¦lgica, nueve; en Austria, m¨¢s de 25 antes de la diez de la ma?ana; en Portugal, m¨¢s de cinco en 106.000 operaciones; y en B¨¦lgica, 7,6 millones. S¨®lo en Berl¨ªn, hubo m¨¢s 200.000 operaciones en cajeros en la primera media hora del nuevo d¨ªa. Para entonces, seg¨²n la Comisi¨®n, m¨¢s de la mitad de los cajeros de la eurozona estaban listos para entregar la divisa europea, un porcentaje que hoy mismo se aproximar¨¢ ya al 90%. Ayer, tan s¨®lo un 5% de los millones de operaciones hechas sufrieron problemas t¨¦cnicos.
La primera llegada de billetes de euro se produjo en la isla francesa de Reuni¨®n (en el Oc¨¦ano ?ndico), a las 20.00 horas GMT. Dos horas m¨¢s tarde (las once de la noche en Espa?a) hac¨ªa su entrada en los primeros pa¨ªses continentales: Finlandia y Grecia. Una hora despu¨¦s, en todo el resto de la eurozona, salvo Irlanda, Portugal y las Islas Canarias, donde hizo su aparici¨®n a las 00.00 horas GMT.
'El puente simb¨®lico' tendido con el euro ya en los bolsillos de los ciudadanos, como lo defini¨® el presidente del BCE, Wim Duisenberg, se escenific¨® al m¨¢s alto nivel con la llamada telef¨®nica del presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, al canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, y al ex canciller Helmut Kohl. 'El euro', dijo con solemnidad, 'es tambi¨¦n el s¨ªmbolo del entendimiento entre Francia y Alemania y un logro para las generaciones futuras'. Schr?der y Chirac quisieron homenajear a los padres del euro: Robert Schuman, Giscard d'Estaing, Fran?ois Mitterrand, Helmut Schmidt y Helmut Kohl.
Aceler¨®n europeo
'Esto en un golpe de acelerador para Europa', comentaba emocionado Hans Eichel, el ministro de Finanzas de Alemania, el pa¨ªs al que m¨¢s le ha costado decir adi¨®s al potente marco. Es lo que piensan los dirigentes m¨¢s integracionistas porque el efecto tangible del euro potenciar¨¢ la uni¨®n pol¨ªtica. Por eso, Prodi -'Europa es m¨¢s fuerte y mucho m¨¢s importante a partir de hoy', enfatiz¨®- se lanz¨® al augurar la existencia de un Gobierno econ¨®mico europeo o la creaci¨®n de un impuesto com¨²n.
Incluso los m¨¢s lanzados, como Duisenberg, el propio Prodi, o el comisario de Asuntos Monetarios, Pedro Solbes, animaron ayer a Reino Unido, Dinamarca y Suecia a participar en la mayor revoluci¨®n monetaria de la reciente historia mundial. En estos dos ¨²ltimos pa¨ªses, la proximidad del acontecimiento ha hecho que m¨¢s del 50% de sus ciudadanos se declaren a favor del euro. En Londres, el viceministro para Asuntos Europeos, Peter Hain, comentaba a la BBC que los brit¨¢nicos deben meditar ahora si realmente quieren seguir 'marginados' y pesar menos en la Uni¨®n.
El ¨¦xito de la jornada ha sido s¨®lo el primer paso de la gran operaci¨®n. 'La verdadera prueba de fuego', como insisti¨® Gerassimos Thomas, ser¨¢ hoy, cuando los europeos acudan a las tiendas y supermercados, cerrados ayer. 'Ma?ana es el d¨ªa crucial, pero el entusiasmo detectado lo har¨¢ todo m¨¢s f¨¢cil', afirm¨®. A la vista de lo ocurrido ayer, lo m¨¢s seguro es que los consumidores se deshagan cuanto antes de las viejas monedas y billetes. Es lo que buscan los responsables de la operaci¨®n. 'Los euromonederos son para usarlos, para gastarlos, y no para guardarlos como colecci¨®n', recomienda Thomas.
En la zona euro se hab¨ªan vendido 150 millones de euromonederos por un valor de 1.600 millones de euros: 14 monedas por cada uno de los 305 millones de habitantes de la zona euro. Sumados los billetes, ya est¨¢n distribuidos entre bancos y consumidores 144.000 millones. Si el comportamiento ciudadano contin¨²a en la l¨ªnea de lo vivido ayer, la Comisi¨®n cree que en 10 d¨ªas los europeos de la zona euro tendr¨¢n en sus bolsillos s¨®lo la nueva divisa. Nadie lo habr¨ªa so?ado hace s¨®lo una d¨¦cada.
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