Una fidelidad traicionada tras a?os de esfuerzo

La mitad de los estadounidenses tienen inversiones en Wall Street, por lo que la espectacular implosi¨®n de Enron provoc¨® escalofr¨ªos. De los 90 d¨®lares de hace a?o y medio a los 66 centavos con que el viernes cerr¨® la cotizaci¨®n hay un abismo. Un abismo en el que cayeron los 4.500 empleados despedidos en diciembre, de un total de 20.000 en todo el pa¨ªs, y todos los que ten¨ªan sus planes de pensiones vinculados a las acciones de Enron.

Charles Prestwood, jubilado como abogado de Enron, se tragaba las l¨¢grimas al ofrecer su testimonio ante el Comit¨¦ de Comercio del Senado: 'Yo he perdido 1,3 millones de d¨®lares. Ten¨ªa todos mis ahorros, todo, en Enron. No ten¨ªa idea de que la compa?¨ªa estuviera al borde del colapso'.

'Esto es absurdo, triste y creo que criminal', escribe en el diario Houston Chronicle Kathleen Salerno, una de las despedidas tras siete a?os en lo que cre¨ªa era una empresa modelo, donde pensaba seguir hasta jubilarse. Despu¨¦s de este tiempo, su fondo de pensiones 'sumaba 46,01 d¨®lares'.

'Estoy muy preocupado por los ciudadanos de Houston que trabajaban en Enron y han perdido todos sus ahorros', manifest¨® hace unos d¨ªas George Bush. 'Es preocupante leer las historias de los que ten¨ªan acciones de Enron en sus planes 401(k)'. El 401(k) es un plan de pensiones introducido en los a?os ochenta basado en las inversiones de los trabajadores. A cambio de esa fidelidad, las empresas contribuyen al plan de jubilaci¨®n de sus empleados con fondos propios, generalmente acciones, cuya venta someten a condiciones. Los empleados de Enron no pod¨ªan venderlas hasta tener 50 a?os, prohibici¨®n que se les record¨® mientras ve¨ªan impotentes caer la cotizaci¨®n a partir de octubre. S¨®lo los m¨¢s altos ejecutivos estaban libres de esa limitaci¨®n.

El 70% de las grandes compa?¨ªas de EE UU participan en el 401(k) y el 29% de los ahorros de sus trabajadores van a ese plan. El promedio nacional es la mitad del que se daba en Enron, donde el 57,7% de las inversiones de jubilaci¨®n de los empleados estaba en la casa. El desastre se ha llevado casi mil millones de d¨®lares en futuras pensiones.

Los empleados han presentado diversas querellas contra Enron, algunas de ellas relacionadas con el hecho de que sus directivos alentaran las inversiones en la compa?¨ªas a pesar de los problemas financieros existentes, de los que deb¨ªan tener noticia. En el Congreso hay ya propuestas para modificar la legislaci¨®n sobre el 401(k), entre ellas la de limitar al 20% la inversi¨®n del plan de jubilaci¨®n en acciones de la propia empresa.