Greenspan discrepa con Bush por el proteccionismo con el acero

El presidente de la Reserva Federal de EE UU, Alan Greenspan, enmend¨® ayer la plana al presidente Bush y se manifest¨® en desacuerdo con su pretensi¨®n de subir los aranceles de importaci¨®n del acero. La opini¨®n de Greenspan es un respaldo a la posici¨®n de la Uni¨®n Europea, que ayer formaliz¨® su amenaza contra la medida proteccionista de EE UU, con la que pretende defender a su industria sider¨²rgica contra la competencia internacional. Bruselas present¨® una doble denuncia ante la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC).

Por un lado, la Comisi¨®n solicita la apertura de un periodo de consultas con la Administraci¨®n Bush para solucionar el contencioso y, por otro, pide que se determine si la medida de salvaguarda estadounidense se ajusta a las reglas internacionales del comercio y, de no ser el caso, se fijen las compensaciones y medidas de reclamo por los da?os ocasionados.

La batalla legal en la OMC se ha hecho efectiva apenas 24 horas despu¨¦s de que el representante de Comercio de EE UU, Robert Zoellick, anunciara las medidas estadounidenses. Ser¨¢ sin duda una de las m¨¢s duras en la historia de este organismo internacional multilateral. China, Jap¨®n y Brasil amenazan tambi¨¦n con reaccionar en su seno.

'Nuestra estrategia es ir por la v¨ªa legal', declar¨® el comisario europeo de Comercio, Pascal Lamy. Est¨¢ convencido de que esta vez tambi¨¦n tendr¨¢ la raz¨®n, como en casos anteriores. 'El proceso ser¨¢ largo pero ser¨¢n condenados y deber¨¢n revisar sus medidas. Han perdido cinco veces en menos de 18 meses contenciosos en el acero', a?adi¨® Lamy. Las dos partes en conflicto tienen ahora 60 d¨ªas para desarrollar consultas bilaterales e intentar solucionar sus diferencias, una etapa obligada.

Si no se encuentra una salida, la OMC tendr¨¢ que establecer formalmente un panel que juzgue el caso. La UE tendr¨¢ adem¨¢s derecho a pedir en un plazo de 90 d¨ªas la aplicaci¨®n de medidas de contraataque contra Estados Unidos para defenderse mientras dura el proceso, ya que hasta mediados de 2003 no habr¨¢ una decisi¨®n definitiva. Bruselas est¨¢ plenamente convencida de que la imposici¨®n de George W. Bush es ilegal porque no es conforme con las reglas de la OMC sobre las cl¨¢usulas de salvaguardia y pide tambi¨¦n compensaciones. Los expertos aseguran que 'la posici¨®n europea es s¨®lida'.

Duisenberg y Greenspan

La indignaci¨®n por la medida proteccionista norteamericana indign¨® tambi¨¦n al presidente del Banco Central Europeo, Wim Duisenberg, quien calific¨® la decisi¨®n de 'deplorable'. Duisenberg considera que esta acci¨®n de Washington puede estar vinculada al nivel actual del cambio del d¨®lar en los mercados y se mostr¨® 'completamente solidario' con los esfuerzos que se hagan por evitar 'que el mundo entre en una nueva era de proteccionismo'. Tambi¨¦n advirti¨® de que los consumidores norteamericanos 'se ver¨¢n penalizados', sobre todo la industria del autom¨®vil, porque tendr¨¢n que pagar 'las desventajas' de la falta de abastecimiento.

Curiosamente, Alan Greenspan, hom¨®logo de Duisemberg a cargo de la Reserva Federal de EE UU (banco central) se mostr¨® ayer en desacuerdo con la decisi¨®n del presidente de Bush de imponer tasas aduaneras de hasta el 30% en las importaciones de acero. Greenspan, que realiz¨® estas declaraciones durante la presentaci¨®n en el Senado de un informe sobre la econom¨ªa y la pol¨ªtica monetaria, explic¨® que comprend¨ªa 'las dificultades que todo presidente tiene para asimilar la complejidad de las leyes comerciales y m¨¢s una situaci¨®n como la que atraviesa nuestra industria sider¨²rgica'.

'Bush sabe que yo no estoy de acuerdo con esta decisi¨®n, pero reconozco que es una elecci¨®n muy dif¨ªcil para ¨¦l', se?al¨® el presidente de la Fed que, no obstante, a?adi¨® que EE UU se benefici¨® 'm¨¢s que nadie' de la liberalizaci¨®n de los intercambios comerciales. Greenspan advirti¨® la semana pasada de que los riesgos tomados por EE UU en el plan de las relaciones comerciales internacionales en caso de medidas proteccionistas sobre el acero ser¨ªan 'muy importantes'.

El malestar por la decisi¨®n de Bush, desde luego, va en permanente aumento. Ayer, la patronal de las empresas sider¨²rgicas espa?olas, Unesid, solicit¨® a la UE que cierre sus fronteras a las importaciones de acero de EE UU en caso de que el pa¨ªs decida finalmente elevar sus aranceles a las importaciones de acero europeas. Seg¨²n Unesid, Espa?a export¨® a Estados Unidos un total de 185.556 toneladas de acero durante el pasado a?o, lo que supuso un 28% respecto a 2000 y unos ingresos de 60 millones de euros (unos 10.000 millones de pesetas). Si EE UU aplica el arancel que ha anunciado, el coste adicional oscilar¨ªa entre 6 y 18 millones de euros, lo que perjudicar¨ªa gravemente al sector.

La ministra de Ciencia y Tecnolog¨ªa, Ana Birul¨¦s, presidenta de turno del consejo de ministros de Industria asegur¨® ayer en Madrid que la UE adoptar¨¢ las medidas necesarias para salvaguardar la industria sider¨²rgica europea de la decisi¨®n del Gobierno de Bush.