El colapso de los ambulatorios crea listas de espera de hasta un a?o
Algunos centros conciertan visitas de especialista para marzo de 2003
Once meses para una visita al oftalm¨®logo y un a?o para una revisi¨®n ginecol¨®gica. Concertar d¨ªa y hora para una visita de m¨¦dico especialista se ha convertido en una epopeya en varias ciudades del entorno de Barcelona, donde la saturaci¨®n de algunos centros de atenci¨®n primaria ha llegado a l¨ªmites insospechados. 'No le puedo dar hora hasta febrero de 2003, estamos colapsados', responde la telefonista de un ambulatorio del Baix Llobregat al solicitarle una visita para el oculista. 'Si cree que es grave vaya a urgencias'.
?Cu¨¢nto tiempo se tarda de media para conseguir visita con un m¨¦dico especialista? ?Qu¨¦ poblaciones tienen m¨¢s problemas? ?Es normal esperar un a?o? Ninguna de estas preguntas tiene respuesta oficial. El Departamento de Sanidad y el Instituto Catal¨¢n de la Salud todav¨ªa no tienen ning¨²n registro centralizado que permita conocer estos tiempos de espera. Pero los colapsos est¨¢n ah¨ª. Este diario ha realizado durante la ¨²ltima semana llamadas a unos 40 centros de primaria con el fin de pedir hora para varias especialidades m¨¦dicas. El resultado hace buenas las previsiones m¨¢s pesimistas de los sindicatos del sector, que desde hace meses denuncian el aumento de las listas de espera y la falta de voluntad para solucionar el problema.
Las esperas de tres meses para especialidades como traumatolog¨ªa u oftalmolog¨ªa son frecuentes en muchos ambulatorios de la zona del Baix Llobregat, Barcelona y el Vall¨¨s Occidental (v¨¦ase el cuadro de la p¨¢gina 5). Pero el tiempo de espera se dispara en determinados ambulatorios donde, por falta de m¨¦dicos especialistas o por problemas de organizaci¨®n, obligan a los pacientes a esperar entre 6 y 11 meses para una primera visita. Uno de los centros consultados, el Mol¨ª Nou de Sant Boi de Llobregat, est¨¢ concertando visitas para febrero de 2003 tanto en oftalmolog¨ªa como para revisiones ginecol¨®gicas convencionales. En Gav¨¤ una primera visita al oftalm¨®logo tiene siete meses de demora. Y ello crea todos los problemas imaginables.
Pacientes sobremedicados
Seg¨²n Patricio Mart¨ªnez, secretario general del Sindicato de M¨¦dicos de Catalu?a, 'la primera v¨ªctima de las listas de espera es el paciente; la segunda, el m¨¦dico'. Lo confirma el vicepresidente de la Sociedad Catalana de M¨¦dicos de Familia, Antoni P¨¦rez, quien considera que a causa de las demoras 'los pacientes acaban m¨¢s medicados de lo que deber¨ªan', ya que quieren eliminar el dolor como sea. Los m¨¦dicos de cabecera, adem¨¢s, cargan con la frustraci¨®n de saber que derivar¨¢n un enfermo a un especialista que tardar¨¢ meses en visitarlo. P¨¦rez denuncia, por ejemplo, que los ¨²ltimos meses ha habido 'un aumento sensible' de las listas de espera para las primeras visitas de oftalmolog¨ªa. En ocasiones, el problema todav¨ªa es superior en las sucesivas visitas.
Seg¨²n Patricio Mart¨ªnez, el problema es que en 'los ¨²ltimos dos a?os se ha dedicado mucho dinero a reducir las listas de espera de cirug¨ªa y se han abandonado otras ¨¢reas'. De hecho, el esc¨¢ndalo originado cuando el jefe de cirug¨ªa cardiaca del hospital de Sant Pau de Barcelona, Alejandro Ar¨ªs, denunci¨® la muerte de siete pacientes en lista de espera para ser operados, oblig¨® a dise?ar varios planes de choque para agilizar las operaciones. Desde entonces, todas las referencias de Sanidad a listas de espera han sido relativas a cirug¨ªa y no a medicina primaria o de especialidades, lo que ha derivado en nuevos problemas.
Desde finales del a?o 2000 una comisi¨®n formada por el Departamento de Sanidad, representantes de todos los grupos parlamentarios y gestores sanitarios velan para reducir las listas de espera de cirug¨ªa. En esta comisi¨®n, el Departamento de Sanidad tambi¨¦n se comprometi¨® a elaborar un registro centralizado de las listas de espera para visitas a m¨¦dicos especialistas antes del primer trimestre de 2002. Dicho registro todav¨ªa no existe.
Una portavoz de Sanidad afirm¨® el pasado viernes que actualmente 'se est¨¢n informatizando los registros' y que est¨¢ 'en proyecto' centralizar todas las listas de espera, aunque todav¨ªa no se conoce cu¨¢ndo estar¨¢ a punto ni si ser¨¢ durante este a?o.
La diputada del PSC Carme Figueras considera que las largas listas de espera en ambulatorios y hospitales para las visitas de m¨¦dico especialista responden a la voluntad del Departamento de Sanidad de reducir las listas de espera de cirug¨ªa. 'El departamento prefiere hacer esperar a los pacientes en el m¨¦dico especialista en lugar de tenerlos en las listas de espera de cirug¨ªa', denuncia Figueras. 'Es una t¨¦cnica m¨¢s para maquillar la supuesta reducci¨®n de estas listas de espera', afirm¨® ayer.
Pero las esperas para ser visitado por un m¨¦dico especialista son tan variadas como dispersas por el territorio. As¨ª, es frecuente que mientras que los usuarios adscritos a un determinado centro de atenci¨®n primaria tardan cinco meses en ser visitados, los del ambulatorio de otro barrio o poblaci¨®n cercana tardan tres semanas. 'Hay que saber a qu¨¦ se deben estas diferencias y solucionarlas', aboga Figueras.
El responsable de pol¨ªtica sanitaria de Comisiones Obreras (CC OO), Antoni Tu¨¤, denuncia que las listas de espera no s¨®lo afectan a las especialidades m¨¢s solicitadas, como oftalmolog¨ªa y traumatolog¨ªa. 'Tenemos constancia de que algunos usuarios de Rub¨ª han tenido que esperar un a?o para iniciar una rehabilitaci¨®n tras un accidente. ?Qu¨¦ sentido tiene acudir al fisioterapeuta despu¨¦s de tanto tiempo?'.
Otras especialidades en las que CC OO y los socialistas han detectado largas esperas son endocrinolog¨ªa (entre tres y seis meses), dermatolog¨ªa (entre tres y cuatro meses) y urolog¨ªa (dos meses). Cap¨ªtulo aparte merecen las pruebas diagn¨®sticas, como las radiograf¨ªas, las ecograf¨ªas y algunos an¨¢lisis. Aqu¨ª las demoras se prolongan m¨¢s de seis meses en algunas ocasiones, por lo que el registro de Sanidad tambi¨¦n deber¨¢ incluir el tiempo que tardan los pacientes en ser sometidos a estas pruebas desde que lo pide el m¨¦dico.
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