La Cumbre de Biodiversidad pretende el liderazgo de la protecci¨®n de los bosques
La reuni¨®n en La Haya esta semana quiere evitar el pillaje de recursos
La Cumbre de Biodiversidad, de Naciones Unidas, afronta esta semana en La Haya uno de sus retos m¨¢s importantes: asumir el liderazgo de la defensa de los bosques primarios a¨²n no invadidos por el hombre, pero amenazados por el comercio internacional y por el cambio clim¨¢tico. La Uni¨®n Mundial para la Naturaleza prev¨¦ la desaparici¨®n de la mitad de las especies arb¨®reas en menos de 50 a?os de no frenarse la deforestaci¨®n.
En la recta final de sus dos semanas de reuni¨®n, la VI Conferencia de las Partes de la Convenci¨®n de Biodiversidad, surgida de la cumbre de R¨ªo de 1992 y que no incluy¨® entonces un tratado sobre las zonas forestales, prepara un 'programa de trabajo' que deber¨ªa ser el documento clave para contener la deforestaci¨®n mundial.
Convertida en los ¨²ltimos a?os el punto de referencia en cuestiones medioambientales, la diversidad biol¨®gica, o biodiversidad, comprende todas las formas de vida, desde los microorganismos a los animales m¨¢s grandes y las plantas, as¨ª como sus diferencias gen¨¦ticas y los ecosistemas que han generado tras miles de millones de a?os de evoluci¨®n. Vista as¨ª la Tierra, las selvas amaz¨®nicas constituyen sus zonas m¨¢s biodiversas, con ¨¢reas habitadas hasta por 400 especies de ¨¢rboles por kil¨®metro cuadrado. La Ant¨¢rtida, el desierto del S¨¢hara y el norte de Siberia figurar¨ªan, por el contrario, en el extremo menos variado. La salud de ambos tipos de entornos, marcada por sus posibilidades de supervivencia, ha dado en llamarse biodiversidad gen¨¦tica.
Pensada como marco de referencia para la protecci¨®n de la biodiversidad, la Convenci¨®n, que entr¨® en vigor en 1993, trata de conservar todas las formas de vida de la Tierra, evitando la destrucci¨®n de las especies y promoviendo su uso 'sostenido y durable' para permitir su regeneraci¨®n. El reparto equitativo entre el Norte y el Sur de los beneficios derivados de la explotaci¨®n de los recursos gen¨¦ticos configura el otro objetivo primordial de la Convenci¨®n.
La primera medida seria
Como los bosques no figuraron en el texto original salido de R¨ªo, el acuerdo alcanzado en Holanda supondr¨ªa la primera medida seria para proteger las principales reservas de diversidad biol¨®gica del mundo. Incluidas por razones clim¨¢ticas en zonas en desarrollo y amenazadas tanto por la tala ilegal como por el cambio clim¨¢tico, este ¨²ltimo es uno de los factores que m¨¢s retos impone hoy a la propia Convenci¨®n.
La Uni¨®n Mundial para la Naturaleza prev¨¦ la desaparici¨®n de la mitad de las especies arb¨®reas que llenan los bosques en menos de 50 a?os de no frenarse la deforestaci¨®n. Datos de la propia ONU se?alan que un 1% de los bosques tropicales (unos 15 millones de hect¨¢reas) se ha perdido anualmente desde 1980. Por su parte, el conjunto de las organizaciones no gubernamentales del ramo presentes en La Haya aseguran que un ¨¢rea de bosque mayor que Francia y Bolivia juntas ha sido destruido desde 1992. Si bien talar ¨¢rboles sin pensar en la reforestaci¨®n parece m¨¢s barato a corto plazo, 'su enajenaci¨®n puede evitarse si los gobiernos fuerzan a las empresas a que tengan en cuenta el valor de la biodiversidad y las consecuencias de la p¨¦rdida de zonas vitales para controlar los cambios clim¨¢ticos', ha asegurado Hamdallah Zedan, secretario ejecutivo de la Convenci¨®n.
Su aplicaci¨®n debe servir tambi¨¦n para evitar el pillaje de los recursos gen¨¦ticos de las zonas estrella de la biodiversidad, que albergan la mayor¨ªa de las especies de animales y plantas necesarios para la obtenci¨®n de medicinas, productos biotecnol¨®gicos o bien cosm¨¦ticos. El reparto de beneficios que promueve entre las empresas que explotan estos recursos y los pa¨ªses de origen en su mayor¨ªa pobres, est¨¢ bien definido en la Convenci¨®n, pero s¨®lo la adjudicaci¨®n de patentes de las nuevas sustancias obtenidas mueve millones y tiene dif¨ªcil arreglo.
Portavoces de la cumbre de La Haya admiten que los pa¨ªses del Sur quieren un acuerdo 'm¨¢s duro' y de momento lo m¨¢s que se ha logrado es 'seguir trabajando en su busca'.
La lucha contra las especies ex¨®ticas, desde plagas que atacan los ¨¢rboles a gusanos que destrozan cosechas de ma¨ªz, es la tercera gran ¨¢rea de discusi¨®n del encuentro. La introducci¨®n, ya sea natural o intencionada, de especies invasoras que acaban con las aut¨®ctonas est¨¢ considerada como la segunda causa de merma de diversidad biol¨®gica despu¨¦s de la destrucci¨®n misma del entorno a manos del hombre. 'Se trabaja en la estrategia para afrontar este problema en la pr¨®xima d¨¦cada, y esperamos una declaraci¨®n sobre ello al final de la cumbre', seg¨²n sus portavoces.
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