Las granadas defectuosas mataron a otros dos soldados en 1990
Al menos cuatro muertos por una munici¨®n 'extremadamente peligrosa'
Sonia Ruiz Navas, de 26 a?os, y Miguel ?ngel Garc¨ªa Garrido, de 25, los dos sargentos fallecidos el 7 de mayo del a?o pasado durante unas maniobras en el campo de tiro de Chinchilla (Albacete), no son las primeras v¨ªctimas mortales de la granada rompedora del modelo 51, calificada de 'extremadamente peligrosa' por los peritos militares. Otros dos soldados murieron en enero de 1990 en un accidente pr¨¢cticamente id¨¦ntico.
Rub¨¦n G¨®mez Garc¨ªa, de 18 a?os, y Mario S¨¢nchez Lobo, de 19, que cumpl¨ªan el servicio militar obligatorio en la Brigada Paracaidista, murieron el 16 de enero de 1990 al hacer explosi¨®n una granada en el interior de un mortero de 81 mil¨ªmetros con el que realizaban pr¨¢cticas de tiro en el campo de maniobras de El Palancar (Hoyo de Manzanares).
La investigaci¨®n realizada por el juez militar no consigui¨® determinar las causas del accidente, pero s¨ª descart¨® el fallo humano, y s¨®lo apunt¨® que la explosi¨®n pudo deberse al mal estado de la munici¨®n, de la espoleta o del mortero. Se trataba, seg¨²n las diligencias judiciales, de una granada rompedora modelo 51, del mismo tipo que la que 11 a?os despu¨¦s, el 7 de mayo de 2001, explot¨® dentro del tubo y caus¨® la muerte de dos sargentos alumnos de la Academia de Infanter¨ªa de Toledo durante unas pr¨¢cticas en el campo de tiro de Chinchilla (Albacete).
El informe pericial de este ¨²ltimo siniestro, realizado por el Centro de Ensayos del Ej¨¦rcito en Torregorda (C¨¢diz), calific¨® la espoleta ECIA-55, que activa este tipo de granadas, de 'extremadamente peligrosa' y pidi¨® su retirada 'de todos los lotes de munici¨®n de mortero de cualquier calibre'. Dicha espoleta, seg¨²n los peritos, est¨¢ dise?ada para funcionar a partir de los cuatro metros, 'distancia muy inferior al radio de acci¨®n de la granada' y a lo previsto en las normas de la OTAN, ratificadas por Espa?a, que obligan a un radio de seguridad de 40 metros.
El teniente coronel Jos¨¦ Garc¨ªa Larriba, tambi¨¦n perito, aludi¨® en su informe al juez a 'otros accidentes recientes igualmente mortales con el mismo tipo de mortero y munici¨®n'. Sin embargo, el encargado de suministrar la munici¨®n a las unidades que realizan maniobras en el campo de tiro de Chinchilla ha declarado que s¨®lo 'por comentarios', y no de forma oficial, ten¨ªa conocimiento de otros accidentes causados por fallo de las granadas.
Los muertes accidentales en ejercicios con granadas han sido numerosas en los ¨²ltimos a?os, pero resulta dif¨ªcil, salvo en casos como el de El Palancar, en que las familias de las v¨ªctimas guardan toda la documentaci¨®n, saber si coinciden los modelos de armamento implicados.
Por otra parte, fuentes de Defensa indicaron ayer que el ministro Federico Trillo-Figueroa firm¨® el pasado d¨ªa 8 la resoluci¨®n que reconoce como fallecida en acto de servicio a la sargento Sonia Ruiz y en breve har¨¢ lo mismo con Miguel ?ngel Garc¨ªa.
La Oficina del Defensar del Soldado denunci¨® el martes que la pensi¨®n ordinaria atribuida al viudo de Sonia (662 euros, 110.000 pesetas mensuales) no correspond¨ªa a la de muerte en acto de servicio, a pesar de que el fallecimiento se produjo durante unas maniobras. Fuentes de Defensa alegaron que el expediente se hab¨ªa retrasado mucho y que, precisamente por ello, se decidi¨® adelantar el reconocimiento de una pensi¨®n ordinaria mientras se tramitaba la extraordinaria.
No se deduc¨ªa as¨ª de la notificaci¨®n remitida el pasado 22 de febrero por el jefe de la unidad de pensiones de Defensa. El escrito no alud¨ªa a una futura pensi¨®n extraordinaria: comunicaba la ordinaria y advert¨ªa de que, si no se estaba conforme con ella, hab¨ªa un mes de plazo para recurrir.
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