Un grupo argentino impacta en Avi?¨®n al describir su pa¨ªs como un gran matadero
'El suicidio', del grupo Perif¨¦rico de Objetos, logra un gran ¨¦xito de cr¨ªtica en el festival
Daniel Veronese, Ana Alvarado y Emilio Garc¨ªa Webhi son los fundadores del grupo Perif¨¦rico de Objetos, una compa?¨ªa argentina que funciona desde 1989 y que hace tres a?os fue protagonista de una retrospectiva de su trabajo en el Festival de Avi?¨®n. Ahora ha regresado a la ciudad de los papas para presentar su ¨²ltimo montaje, El suicidio. Se trata de una obra en la que el grupo muestra a su pa¨ªs como un inmenso matadero con un tono radical, violento y sin concesiones que ha logrado el aplauso un¨¢nime de la cr¨ªtica francesa.
'Hace algo m¨¢s de un a?o que empezamos a trabajar el espect¨¢culo. Quer¨ªa abordar el suicidio desde un prisma que no fuese violento o siniestro, enfocarlo desde la melancol¨ªa', dice Daniel Veronese. 'Se trataba de indagar, nosotros y cada uno de los cuatro actores, sobre un tema que se tiende a silenciar u ocultar, ofrecer un abanico de miradas sobre la muerte voluntaria'.
El montaje ha sido muy bien recibido por la prensa presente en Avi?¨®n. Para Lib¨¦ration, 'la compa?¨ªa explora sin complacencia morbosa todos los rincones de una formidable reserva de im¨¢genes'. Jean-Louis Perrier, en Le Monde, escribe que 'el grupo escala en ropa de trabajo la cara oscura de la risa', y celebra que 'prefiera las im¨¢genes a las palabras'. Es una constataci¨®n que Veronese aprueba: 'Nuestra l¨ªnea de trabajo est¨¢ m¨¢s pr¨®xima a la danza que al teatro narrativo. En el fondo, el problema es que es imposible aprehender el tema. Siempre buscamos una explicaci¨®n que nos tranquilice, preferimos que el suicida sea un loco o un enfermo, no verlo como una persona normal'.
Los cuatro actores cubren a menudo su cabeza con m¨¢scaras de oveja, caballo o vaca. Esta ¨²ltima es tratada como un icono o s¨ªmbolo de la patria argentina. 'La vaca rumia, regurgita, vuelve a masticar lo que ha comido, un poco como la conciencia del suicida'. El montaje incluye un v¨ªdeo sobre una maqueta de un matadero acompa?ado de un texto en el que se afirma que 'las vacas, cuando avanzan en fila hacia el lugar donde la maza ha de matarlas, intuyen que marchan hacia su muerte, pero no por eso dejan de hacerlo'. Para Veronese, 'haber aceptado entrar en la dictadura de los a?os setenta suicid¨® el esp¨ªritu democr¨¢tico del pa¨ªs'. Pero quiere se?alar tambi¨¦n que 'un caso de suicidio colectivo, de pa¨ªs que se autodestruye como Argentina, s¨®lo se explica por la indiferencia de los otros, que le empujan al suicidio. Con las personas pasa lo mismo que con las naciones'. Y la Argentina de hoy se asemeja cada d¨ªa m¨¢s a un gigantesco matadero.
Desde el 'corralito'
El proyecto arranc¨® antes de la gran crisis, antes de que se instituyera el corralito o que la gente se abalanzase sobre camiones de ganado para despedazar vivas vacas u ovejas y saciar hambre y desesperaci¨®n. 'Dejamos que la realidad entre en nuestros montajes, que desti?a sobre ellos, pero lo cierto es que las vacas estaban en El suicidio desde el primer d¨ªa. Que la televisi¨®n haya mostrado personas armadas de cuchillos cortando carne directamente de una vaca robada s¨®lo aporta un significado suplementario al icono vaca. Argentina, hasta principios de los sesenta, era un pa¨ªs desarrollado, el m¨¢s culto y con m¨¢s clase media de Am¨¦rica Latina. Hoy la mitad de la poblaci¨®n es pobre; de un lugar de ganaderos y de cr¨ªa nos convertimos en un gigantesco matadero en el que los animales son sacrificados para paliar la hambruna'.
Veronese reivindica 'el escenario como lugar propicio a la disecci¨®n'. Y el suicidio, asegura, 'es un acto que se desarrolla en un espacio-tiempo determinado, un acto cargado de emoci¨®n, radical, en muchos casos dedicado a otro, destinado a tener sentido para otras personas. Necesita de un m¨ªnimo de preparaci¨®n, de reflexi¨®n, de interiorizaci¨®n, es un acontecimiento social e individual a un tiempo. Y no admite repetici¨®n. Como ve, todo lo que digo sobre el suicidio tambi¨¦n puede aplicarse al teatro'.
El montaje ha sido coproducido por los festivales de Colonia y Berl¨ªn, por el de Avi?¨®n y por el de Amsterdam. En septiembre deber¨ªa estrenarse en Buenos Aires, y luego quiz¨¢ viaje a Espa?a. 'Salir nos ayuda a seguir existiendo, pero es importante no perder contacto con la realidad argentina. Nosotros no buscamos el consenso como los pol¨ªticos, sino el disenso. El teatro permite hacer subir la verdad a escena, una verdad que no es la de la primera p¨¢gina del peri¨®dico, sino de otro orden. La gente quiere creer, y est¨¢ m¨¢s dispuesta a creer lo que se le cuenta en la ficci¨®n'.
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