Investigada por presunta estafa una empresa en la que invirti¨® la Comunidad

La planta industrial de Hormimeco, en Meco, fue inaugurada en febrero de 2001 a bombo y platillo. Pero esta empresa, en la que el Gobierno regional invirti¨® 1,5 millones de euros a trav¨¦s de la Sociedad de Capital Riesgo, ha cerrado y ha dejado en la calle a 108 trabajadores. La juez de instrucci¨®n n¨²mero 5 de Alcal¨¢ ha abierto diligencias por presunta estafa, ya que la empresa debe dinero a 14 empleados por supuesto impago de las indemnizaciones. Jaime Arturo del Burgo, m¨¢ximo accionista de Hormimeco, vendi¨® la empresa en octubre a Puentes y Calzadas por un euro.

Hormimeco fue inaugurada el 5 de febrero de 2001 con una inversi¨®n de m¨¢s de 30 millones de euros (5.000 millones de pesetas). El accionariado estaba compuesto por Gadeinsa (con el 35%, y cuyo presidente es Jaime Arturo del Burgo, hijo del diputado de UPN Jaime Ignacio del Burgo); Capital Riesgo (con el 25% y participada, entre otros, por el Gobierno regional y Caja Madrid), y otras financieras como Prima Inmobiliaria (25%). Hormimeco fue promocionada por sus responsables como "la mayor productora de Europa de prefabricados en hormig¨®n".

A la inauguraci¨®n asistieron el presidente del Gobierno regional, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, y el ministro de Fomento, Francisco ?lvarez-Cascos, junto al delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Javier Ansu¨¢tegui, y el vicepresidente regional, Luis Eduardo Cort¨¦s. Ruiz-Gallard¨®n resalt¨® que la empresa ya contaba con una cartera de pedidos de m¨¢s de 9 millones de euros (1.500 millones de pesetas). "Ese ¨¦xito en su andadura inicial no hubiera sido posible sin una estructura accionarial s¨®lida, diversificada y complementaria", resalt¨®. El Gobierno regional, a trav¨¦s de Capital Riesgo, invirti¨® en Hormimeco 1,5 millones de euros (250 millones de pesetas).

Veinti¨²n meses despu¨¦s, Hormimeco est¨¢ en suspensi¨®n de pagos y con 108 trabajadores en la calle. La juez Mar¨ªa Isabel Ferrer-Sama P¨¦rez ha abierto diligencias por presunta estafa contra el administrador, Albert Henri Defacio. "Defacio enga?¨® a 14 trabajadores prometi¨¦ndoles las indemnizaciones a cambio de que firmasen el expediente de regulaci¨®n de empleo. Ellos firmaron, pero Hormimeco no cumpli¨®", explica el abogado de los demandantes, Luis Fernando Luj¨¢n de Fr¨ªas.

Los problemas en Hormimeco empezaron en febrero pasado, despu¨¦s de que Caja Madrid -encargada del dise?o financiero de la empresa y con parte del accionariado- retirase su apoyo a Jaime Arturo del Burgo, gestor de Hormimeco y presidente de Gadeinsa, accionista mayoritaria. "Hemos tenido dificultades financieras importantes por la mala gesti¨®n que hizo Caja Madrid, que no nos dejaba tener cr¨¦ditos de tesorer¨ªa", justifica Del Burgo. "Necesit¨¢bamos esos cr¨¦ditos porque Hormimeco fabricaba piezas para edificios y los clientes no nos pagaban hasta pasado un tiempo", a?ade. Del Burgo asegura que Gadeinsa (empresa de la que ¨¦l es presidente) tuvo que hacer una ampliaci¨®n de capital de tres millones de euros (500 millones de pesetas) y que en total ha perdido 6,6 millones de euros (1.110 millones de pesetas) en Hormimeco.

Supensi¨®n de pagos

Adem¨¢s, Caja Madrid puso como requisito para intentar reflotar Hormimeco que Del Burgo abandonase su cargo de gestor, aunque ¨¦ste continu¨® como accionista mayoritario a trav¨¦s de su empresa Gadeinsa.

El administrador que se hizo cargo de la empresa, Albert Henri Defacio, la declar¨® en suspensi¨®n de pagos en mayo pasado. Fue despidiendo a los trabajadores hasta que qued¨® un grupo de 24 empleados, 14 de los cuales acordaron con Defacio el compromiso de pagarles una indemnizaci¨®n (54.376 euros en total) si firmaban el expediente de regulaci¨®n de empleo. Los trabajadores firmaron, pero Defacio, seg¨²n denuncia el abogado Luis Fernando Luj¨¢n de Fr¨ªas, incumpli¨® su promesa.

Los 14 trabajadores afectados presentaron una querella contra Defacio por presunta estafa. La juez Mar¨ªa Isabel Ferrer-Sama la ha rechazado por un defecto formal. Pero ha apreciado "hechos que pudieran ser constitutivos de delito, para cuya persecuci¨®n no es necesaria la presentaci¨®n de la querella, como es el de estafa, raz¨®n por la que [al escrito de la querella] debe atribu¨ªrsele el valor de denuncia". Es decir, Ferrer-Sama ha decidido actuar de oficio.

El pasado 30 de octubre, Gadeinsa (accionista mayoritaria de Hormimeco) vendi¨® la empresa a la constructora compostelana Puentes y Calzadas por un euro. "Hemos vendido todas las acciones al precio simb¨®lico de un euro para que la empresa saliese adelante y que alguien la retomara", dice Del Burgo.

Del Burgo es accionista mayoritario de la f¨¢brica de hormig¨®n Hispano Lusa, situada en O Carballi?o (Ourense), que est¨¢ participada por XesGalicia (capital riesgo de la Xunta de Galicia). Del Burgo tambi¨¦n ha vendido sus acciones de Hispano Lusa a Puentes y Calzadas, que es ahora la nueva propietaria de Hormimeco.

Hispano Lusa, respaldada por la Xunta, tiene el compromiso -a¨²n no lo ha hecho- de iniciar este a?o su actividad y dar empleo a 200 operarios.

El caso de Hormimeco ha llegado ya a la Asamblea de Madrid, donde el portavoz de Econom¨ªa del PSOE, Antonio Carmona, pregunt¨® recientemente a la Consejer¨ªa de Econom¨ªa si ten¨ªa conocimeinto de una "presunta operaci¨®n especulativa" de compraventa de la planta industrial. Econom¨ªa respondi¨® que la decisi¨®n de efectuar una inversi¨®n "con car¨¢cter de acompa?amiento" en Hormimeco se tom¨® como consecuencia de que consideraba el proyecto "perfectamente viable, innovador y generador de empleo a la vista de los informes t¨¦cnicos (...) que garantizaban la rentabilidad de la inversi¨®n para Capital Riesgo".

La Consejer¨ªa de Econom¨ªa aclara que "no particip¨® de forma directa" en la gesti¨®n de la empresa y que, pese a la suspensi¨®n de pagos, Capital Riesgo considera que el proyecto empresarial es "viable" y que la empresa cuenta con unas instalaciones nuevas con una tecnolog¨ªa de ¨²ltima generaci¨®n.

Econom¨ªa cree que la causa de la suspensi¨®n de pagos de Hormimeco puede deberse, entre otras circunstancias, a las diferencias entre los accionistas y las dificultades de financiaci¨®n a corto plazo.