La ventaja de ser peque?o

Tras 15 a?os al frente de la oficina espa?ola de Clifford Chance, Peter Cornell se ha convertido en el socio-director de este despacho de abogados con presencia en m¨¢s de 30 pa¨ªses y casi 7.500 profesionales. Clifford Chance, que es el resultado de la fusi¨®n, primero, de dos grandes despachos brit¨¢nicos con 100 a?os de historia, y luego de ¨¦stos con sendos despachos de Estados Unidos, no es inmune a la crisis que viven los servicios de asesor¨ªa empresarial, pero espera mantener sus ingresos en este ejercicio. "Los despachos globales estamos mejor cubiertos", asegura Cornell, "y la crisis nos afecta menos que a un banco de inversi¨®n". La raz¨®n est¨¢ en la diversificaci¨®n de su negocio.

"Si hubi¨¦ramos crecido m¨¢s, hubi¨¦ramos sufrido m¨¢s", resume Peter Cornell, el nuevo socio-director de este despacho de abogados

La situaci¨®n econ¨®mica ha afectado sobre todo al ¨¢rea de fusiones y adquisiciones, que se ha resentido de la escasez de este tipo de operaciones desde que la situaci¨®n econ¨®mica empezara a empeorar. En Clifford Chance, que el pasado ejercicio ingres¨® 1.000 millones de libras, el negocio mercantil supone el 23% de los honorarios totales. Esta situaci¨®n se ha compensado con el auge de otros negocios, como el de litigios, que genera el 21% de los ingresos del despacho. "Este a?o no vamos a crecer mucho, pero esperamos mantenernos", resume Cornell.

La estrategia de la firma para crecer los ¨²ltimos a?os ha seguido una doble direcci¨®n: incorporar nuevos despachos y diversificar su negocio. "Nuestros principales clientes son los bancos de inversi¨®n. Lo que hemos intentado los ¨²ltimos a?os es crecer m¨¢s en otros sectores, precisamente en los dos que ahora van mal: fusiones y adquisiciones y mercados financieros. Cuando nos fusionamos

entendimos que en esas ¨¢reas deb¨ªamos ser m¨¢s fuertes. En un sentido tuvimos suerte porque si hubi¨¦ramos crecido m¨¢s hubi¨¦ramos sufrido m¨¢s", reconoce el directivo, quien descarta la integraci¨®n de nuevos despachos en el futuro inmediato para seguir creciendo. La ¨²ltima operaci¨®n de este tipo ha sido este mismo a?o, con la incorporaci¨®n de una red de despachos de California (EE UU). La asignatura pendiente de la firma es Am¨¦rica Latina, donde s¨®lo tiene presencia en Brasil.

El car¨¢cter internacional del bufete tambi¨¦n le ha ayudado a compensar la mala situaci¨®n que atraviesa la econom¨ªa de algunos pa¨ªses, como Alemania, asegura su socio director. M¨¢s de la mitad del del negocio de Clifford Chance se genera en Europa (42% en el Reino Unido y 28% en el continente).

Para Cornell, "el objetivo es mantener lo que tenemos, no crecer por crecer". Para ello, el directivo considera que es necesario "mejorar las relaciones con los clientes. Ser no s¨®lo un abogado sino un asesor".

La rentabilidad por socio tambi¨¦n se ha mantenido y "ahora est¨¢ creciendo", asegura Cornell, que lleg¨® a la oficina londinense de Clifford Chance en 1975 y fue responsable de la de Madrid desde 1989 hasta julio del a?o pasado.

El objetivo de Clifford Chance es dar servicios globales con abogados locales. Para ello ha adoptado una forma de organizaci¨®n peculiar. Sin sede central, su estructura se asemeja a la de las grandes firmas de servicios profesionales, como Deloitte & Touche o PricewaterhouseCoopers, pero con una jerarqu¨ªa menos pronunciada, explica Cornell, quien mantiene su residencia legal en Madrid, donde vive su familia, pero trabaja la mayor parte del tiempo en Londres. El despacho tiene seis ¨¢reas de negocio distintas -mercantil, litigios, finanzas, mercados de capitales, fiscal e inmobiliario-, cada una con un responsable mundial y cuatro ¨¢reas regionales -Am¨¦rica, Asia, Londres y Alemania- y se gestiona a trav¨¦s de un comit¨¦ directivo en el que adem¨¢s se sienta un representante para Europa Continental. Cornell es el ¨²nico directivo que se dedica a tiempo completo a la gesti¨®n de la firma.

El despacho desembarc¨® en Madrid en 1980 y en la actualidad tiene m¨¢s de 120 abogados en Espa?a, entre esta sede y la de Barcelona.