La resoluci¨®n de EE UU sobre Irak recibe una buena acogida en la ONU

Estados Unidos, el Reino Unido y Espa?a fracasaron hace casi dos meses en su intento de obtener el respaldo del Consejo de Seguridad para la guerra. Los tres pa¨ªses presentaron ayer al ¨®rgano decisorio de Naciones Unidas un proyecto de resoluci¨®n destinado a legitimar la autoridad de las fuerzas ocupantes en Irak y a iniciar el proceso de reconstrucci¨®n del pa¨ªs, bajo el control de Washington. A la espera de unas negociaciones que se adivinaban muy t¨¦cnicas y mucho menos crispadas que en la anterior ocasi¨®n, el texto fue acogido positivamente, pero con cautela.

Madrid y Londres, pese a su condici¨®n de copatrocinadores, indicaron que el proyecto resultaba duro y pod¨ªa mejorarse. El documento fue distribuido a los 15 miembros del Consejo en una atm¨®sfera que todos calificaron de "constructiva" e incluso "positiva". Incapaz de frenar la guerra, la ONU no quer¨ªa quedarse al margen de la paz. Nadie esperaba que se repitieran los graves enfrentamientos previos al conflicto. El objetivo colectivo consist¨ªa en preservar, pese a las diferencias, la unidad y la relevancia del Consejo. La acogida inicial fue prudente. "Hubo muchas preguntas, esencialmente t¨¦cnicas", resumi¨® el embajador estadounidense, John Negroponte.

Fue una primera toma de contacto. Los embajadores volver¨¢n a reunirse el pr¨®ximo mi¨¦rcoles con las respuestas de sus gobiernos, para empezar realmente la negociaci¨®n. Disponen de un margen relativamente corto: el programa Petr¨®leo por Alimentos, que sostiene la actividad econ¨®mica iraqu¨ª, finaliza el 3 de junio. Incluso Francia baj¨® considerablemente el tono. "Seguimos estudiando el texto", dijo su representante, Jean Marc de la Sabli¨¨re, "hay algunos elementos positivos en el terreno humanitario y econ¨®mico, pero tambi¨¦n algunas dificultades y algunas preguntas. (...) Nos gustar¨ªa aclarar ciertos puntos sobre el proceso pol¨ªtico y ver ampliado el papel del coordinador especial de la ONU".

En Polonia, el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, asegur¨® que Francia adoptar¨ªa una postura "constructiva". Entre bastidores, sin embargo, los diplom¨¢ticos franceses expresaron mayores reservas, pese a desconocer todav¨ªa si la propuesta estadounidense era definitiva o pod¨ªa negociarse. Ante el Consejo de Seguridad, De la Sabli¨¨re fue m¨¢s tajante. "?C¨®mo podemos pedir al Consejo que apoye un proceso cuyo calendario se desconoce y que tampoco define el papel de la ONU?". Los rusos, que hab¨ªan abogado por el retorno de los inspectores de armamento, prefirieron no hacer comentarios. "Tengo una larga lista de preguntas", se limit¨® a decir el representante ruso, Serguei Lavrov.

Control del petr¨®leo

Chile, uno de los seis miembros no permanentes que se negaron a aprobar la guerra, acogi¨® la propuesta tripartita de "forma positiva". "Siempre hemos estado a favor del levantamiento de las sanciones", dijo el embajador chileno, Gabriel Vald¨¦s. La resoluci¨®n, un texto complejo y muy t¨¦cnico, pide el levantamiento inmediato de las sanciones, concede un papel relativamente marginal a la ONU, representada por un coordinador especial, y deja en manos de las potencias ocupantes el control de los ingresos del petr¨®leo, centralizados en un Fondo de Asistencia auditado por organismos internacionales pero administrado por Washington.

Incluso Espa?a y el Reino Unido consideran que el borrador, redactado por el sector m¨¢s conservador del Gobierno estadounidense, es demasiado duro y que ser¨¢n necesarias algunas concesiones. "?sta no es una resoluci¨®n ¨²nica", empez¨® diciendo el embajador brit¨¢nico, Jeremy Greenstock, sugiriendo que podr¨ªa haber nuevas propuestas sobre el papel de los inspectores de Unmovic (la agencia de desarme) que no se mencionan en el actual proyecto de resoluci¨®n. "Este texto s¨®lo aborda algunos aspectos, en el momento presente", declar¨® la ministra espa?ola de Exteriores, Ana Palacio, que se entrevist¨® ayer con el secretario general de la ONU, Kofi Annan. "Es un punto de partida", a?adi¨®, "todas las cosas son susceptibles de mejorar". Espa?a estima que ser¨¢ dif¨ªcil convencer al Consejo de que respalde y legitime la Autoridad establecida por la coalici¨®n ocupante por un periodo de un a?o, como establece la resoluci¨®n. Tambi¨¦n considera que deber¨ªa mantenerse el mecanismo de control de las exportaciones de armas a Irak fijado por la ONU. Durante el debate, el embajador mexicano, Adolfo Aguilar Zinser, pregunt¨® a Espa?a si, en su calidad de copatrocinadora de la resoluci¨®n, pod¨ªa ser incluida entre las potencias ocupantes. No hubo respuesta.