Llegan los becarios

Con el verano llegan los becarios. Las vacaciones vac¨ªan las oficinas y los estudiantes tienen m¨¢s tiempo para intentar poner en pr¨¢ctica lo que les ense?an en la universidad. A pesar de ello, o precisamente por eso, no es una buena ¨¦poca para que las pr¨¢cticas cumplan su funci¨®n: que los becarios aprendan a trabajar con la ayuda de los veteranos . Lo que parece claro es que las pr¨¢cticas allanan el camino hacia el primer contrato de trabajo.

No hay datos oficiales de universitarios que se forman en las empresas. Un experto estima que son entre 200.000 y 300.000 cada a?o

Durante el curso pasado, un mal a?o para el empleo, 2.300 alumnos de la Universidad Complutense de Madrid hicieron pr¨¢cticas. En el actual ya van 1.500. Quitaron tiempo a sus estudios o dedicaron las vacaciones a aprender a trabajar. No es un n¨²mero muy alto si se tiene en cuenta que este centro ronda los 100.000 estudiantes y cuenta con uno de los servicios de orientaci¨®n para el empleo (COIE) m¨¢s veteranos del pa¨ªs.

No existen datos oficiales sobre el n¨²mero de universitarios espa?oles que completan su formaci¨®n de esta manera. Pero s¨ª algunos n¨²meros sueltos. Un estudio de la Fundaci¨®n Universidad-Empresa cifra en 35 las empresas que ofrecen pr¨¢cticas este curso. Y Javier Garc¨ªa Delgado, que coordina este ¨¢rea en la Escuela de Minas de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid e hizo su tesis sobre este asunto, estima que "entre 200.000 y 300.000" universitarios hacen pr¨¢cticas cada a?o, entre los que est¨¢n obligados a hacerlo por su plan de estudios y los que se benefician de convenios por su universidad. Hace tres a?os rondaban los 150.000.

El verano es una ¨¦poca t¨ªpica de becarios. Los estudiantes no se ven obligados a hacer un esfuerzo extra para estudiar y trabajar al mismo tiempo y a las empresas les viene bien cubrir los huecos dejados por las vacaciones. Casi la mitad de las empresas que admiten becarios (47,06%) lo hacen en este periodo de baja actividad, seg¨²n el estudio citado. En el caso de la Complutense, junio fue en el ¨²ltimo curso cerrado el segundo mes de mayor actividad para el COIE, si bien su responsable, Margarita Mateos, afirma que las empresas prefieren que los alumnos trabajen durante periodos m¨¢s largos, "la mayor¨ªa durante el curso completo".

El verano, sin embargo, no es buena ¨¦poca para ser becario. En primer lugar, porque los alumnos "suelen atender a picos de trabajo", seg¨²n Mateos. Aunque la mayor¨ªa de las pr¨¢cticas son remuneradas -la media entre los becarios de la Complutense el a?o pasado fue de 350 euros-, los alumnos no son trabajadores. Hay otras razones para evitar estos meses, como que se trata de un periodo demasiado corto y con pocas referencias. "Los tutores se van de vacaciones", explica de forma gr¨¢fica Garc¨ªa Delgado.

Lo que parece claro es que los alumnos que hacen pr¨¢cticas, sea en verano o no, tienen m¨¢s f¨¢cil firmar su primer contrato laboral. Los m¨¢s demandados en la Complutense son, por este orden, los de Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas, que tambi¨¦n son los que en mayor proporci¨®n fueron contratados despu¨¦s; Periodismo (tercera en proporci¨®n de contratos); Econom¨ªa (segunda); Publicidad; Derecho y Empresariales.

Las ingenier¨ªas son un mundo aparte porque la demanda de profesionales hace que algunos estudiantes no tengan que purgar como becarios. Garc¨ªa Delgado pone como ejemplo a algunas empresas que "captan a los alumnos antes de acabar los estudios". A pesar del potencial que tienen las pr¨¢cticas como v¨ªa hacia el empleo, este experto asegura que la Administraci¨®n no se preocupa demasiado por potenciarlas: "El marco legal no est¨¢ ni desarrollado ni actualizado", asegura.