Todos aceptan que Catalu?a debe pagar por su riqueza y recibir por su poblaci¨®n

La parte del debate centrada en infraestructuras y pol¨ªtica econ¨®mica estuvo protagonizada por una encendida discusi¨®n de n¨²meros entre los cinco candidatos. Mientras Josep Llu¨ªs Carod Rovira (ERC) hablaba de que la sociedad catalana est¨¢ siendo "esquilmada" porque "manda dinero a Madrid que no vuelve", Pasqual Maragall (PSC) lanz¨® la idea fuerza de c¨®mo deber¨ªa organizarse esta compleja relaci¨®n: "Debemos pagar por lo que tenemos y recibir por lo que somos". Eso es lo que ¨¦l llama "federalismo fiscal"; esto es, que una comunidad rica como Catalu?a tiene que pagar de acuerdo con su riqueza y recibir seg¨²n su poblaci¨®n, y por tanto sus necesidades. S¨®lo Carod discuti¨® relativamente esta idea, aunque sin descartarla como una base de consenso.

Carod acusa a Mas de entregarse al PP y ¨¦ste responde que prefiere "los hechos a la est¨¦tica"

Para lograr que funcione el sistema, explic¨® Maragall, se necesitan unos datos claros que el Gobierno central niega. "[Rodrigo] Rato [ministro de Econom¨ªa] niega los datos porque dice que se enconar¨ªan los ¨¢nimos", ironiz¨®.

Josep Piqu¨¦ se enzarz¨® con Maragall para tratar de demostrar, con gr¨¢ficos, que el Gobierno central invierte mucho m¨¢s en Catalu?a ahora que cuando gobernaban los socialistas. Maragall se ri¨®: "Ese gr¨¢fico empieza de debajo de cero". Piqu¨¦ insisti¨® en que esa inversi¨®n ha pasado de una media del 9% cuando gobernaban los socialistas al 17% actual, fuertemente condicionado por el enorme proyecto del AVE Madrid-Barcelona, que distorsiona completamente esta estad¨ªstica. Maragall insisti¨® en que despu¨¦s de 1991, punto m¨¢ximo de inversiones del Estado por los Juegos Ol¨ªmpicos, esa cifra ha ido bajando, y mucho m¨¢s desde que gobierna el PP.

Esta discusi¨®n fue aprovechada por Artur Mas (CiU) para apuntarse el tanto. Sostuvo que ni el AVE, ni la ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona, ni la depuradora del Bes¨°s se habr¨ªan hecho sin la presi¨®n de CiU sobre el Gobierno central. "?Pero si se est¨¢ haciendo todo con la mayor¨ªa absoluta del PP!", le corrigi¨® Piqu¨¦. "Pero lo pactamos antes", insisiti¨® Mas.

Carod aprovech¨® el momento para acusar a CiU de haberse entregado sin m¨¢s al PP. "Les votaron dos veces cuando no hac¨ªa falta [por la mayor¨ªa absoluta]. Ni siquiera han conseguido traer a Catalu?a los papeles del archivo de la Guerra Civil en Salamanca -"los hemos pedido, le corrigi¨® Mas"; "pero no los han conseguido", replic¨® Carod.

Precisamente en este momento del debate se produjo un enfrentamiento personal entre Carod y Mas. El conseller en cap hab¨ªa acusado a los republicanos de apostar por "las pancartas, los discursos brillantes, mientras CiU opta por lo hechos, renunciando a veces a la est¨¦tica", una clara referencia al pacto con el PP. Carod le ret¨®: "Yo siempre he estado detr¨¢s de las pancartas, desde hace muchos a?os, ?y usted?". Mas, visiblemente contrariado, le respondi¨® lac¨®nicamente: "Tambi¨¦n".

Joan Saura (ICV-EUiA), que tuvo varios encontronazos con Piqu¨¦ durante el debate porque este ¨²ltimo ridiculizaba sus propuestas de contenido ecologista, expuso una de sus ideas centrales: la excesiva precariedad laboral. Varias veces intent¨® que Mas respondiera a un dato: "La Generalitat se gasta m¨¢s en publicidad insitucional en un a?o que en todo el programa de salud laboral". Pero no logr¨® en ning¨²n momento que el conseller en cap entrara a discutir esas cifras. Tambi¨¦n apost¨® claramente por el transporte p¨²blico, mientras que Piqu¨¦ le acusaba de "tener miedo del cemento". Saura sostuvo adem¨¢s, sin que nadie entrara en ese debate, que la falta de recursos p¨²blicos no se debe tanto al sistema de financiaci¨®n auton¨®mica como a varias contrarreformas fiscales que han bajado los impuestos en toda Espa?a.

Piqu¨¦ trat¨® de negar con otro gr¨¢fico las acusaciones de centralismo del PP que le hac¨ªan todos los dem¨¢s y acus¨® a la Generalitat de centralista. Maragall le respondi¨® que todos los proyectos en marcha de AVE salen de Madrid, y "eso s¨ª es centralista".