El dispar trabajo de sus se?or¨ªas

Existen tres clases de diputados, seg¨²n el que ha sido durante ocho a?os presidente del Parlamento andaluz, Javier Torres Vela: "En los grupos grandes hay 10 o 15 diputados que acaparan la actividad parlamentaria. Luego existe una legi¨®n de diputados que se dedican a preguntar y a hablar sobre su provincia. El tercer grupo lo compone gente que no aparece por el Parlamento. Es gente que, o bien ha ca¨ªdo en desgracia en su partido o que realiza otras funciones org¨¢nicas dentro del partido y no trabajan en el Parlamento". Torres Vela encabeza la lista del PSOE al Congreso por Granada.

El ex diputado del PP Andr¨¦s Ollero, uno de los m¨¢s activos en el Congreso, asegura que este tercer grupo lo forman los que ¨¦l llama "liberados sindicales", gente que cobra como diputado para dedicarse a la actividad del partido al que pertenecen. Ollero asegura que la existencia de este grupo es inadmisible y que son los que han conseguido que el ciudadano "sepa lo que hace un juez y un concejal, pero no un diputado".

"Hay diputados de los que desconozco su voz. Trabajan en el partido", afirma Torres Vela

Lo cierto es que un repaso a la actividad parlamentaria de los diputados auton¨®micos y nacionales de la ¨²ltima legislatura deja un balance desigual, que roza lo estramb¨®tico, sobre todo en los grandes grupos parlamentarios. El diputado nacional por M¨¢laga Miguel ?ngel Heredia (PSOE) ha presentado 7.119 iniciativas parlamentarias en cuatro a?os; Alfonso Guerra , cabeza de lista por Sevilla, ninguna. Rafael Hernando, cabeza de la lista del PP al Congreso por Almer¨ªa, ha presentado tres iniciativas e intervenido cinco veces ante la C¨¢mara en cuatro a?os. La media es de dos actuaciones al a?o. Gabino Puche, n¨²mero dos del PP por Ja¨¦n ha presentado cuatro iniciativas y ha intervenido en 10 ocasiones, seg¨²n la p¨¢gina web del Congreso, que recoge la actividad de cada diputado.

En el Parlamento andaluz la situaci¨®n es similar. Torres Vela reconoce que no recuerda el timbre de voz de muchos diputados. "Del alcalde de Huelva, Pedro Rodr¨ªguez, del PP, no recuerdo ninguna intervenci¨®n. Luis Pizarro, del PSOE, creo que ha intervenido dos veces en la legislatura". No es que no trabajen, es que el primero es alcalde de Huelva y el segundo es secretario de Organizaci¨®n del PSOE en Andaluc¨ªa. Hernando es coordinador del ¨¢rea de comunicaci¨®n del PP.

Todos los casos anteriores, hay muchos m¨¢s en PP y PSOE, repiten en las listas en puestos en los que saldr¨¢n elegidos. "Los partidos grandes miran la actividad parlamentaria, pero es verdad que a veces, a la hora de elaborar una lista, pesan m¨¢s los apoyos internos y el trabajo en la organizaci¨®n", explica Manuel Atencia, candidato del PP al Congreso por M¨¢laga y responsable de la campa?a en la provincia.

Torres Vela reconoce que la falta de actividad parlamentaria de muchos diputados es dif¨ªcilmente explicable: "La pol¨ªtica tiene mal resuelta la retribuci¨®n de las tareas en el partido. As¨ª que a veces se le busca un hueco en una c¨¢mara a alguien que trabaja para una organizaci¨®n. ?Responde eso al inter¨¦s del votante? No, pero muchas veces los partidos no encuentran otra forma".

Un ejemplo es Miguel D¨ªaz Mogedas, diputado auton¨®mico del PP desde 1996. Su actividad parlamentaria ha sido muy escasa. D¨ªaz Mogedas es secretario de finanzas de la ejecutiva regional del PP de Andaluc¨ªa.

Los que siempre tienen actividad parlamentaria son los de los grupos peque?os. Es frecuente ver a los diputados de Izquierda Unida pidiendo que se aplace una votaci¨®n en una comisi¨®n porque en ese mismo instante tienen que estar en otras dos comisiones. Los diputados auton¨®micos del PA y del PSA tambi¨¦n acumulan centenares de intervenciones e iniciativas.

En los grupos grandes hay diputados que se quejan de que no encuentran suficiente trabajo. Un ex diputado del PP que actualmente va en la lista al Senado y que prefiere no dar su nombre asegura que ser diputado del partido que apoya al Gobierno es muy aburrido. "Lo que tiene delito es estar en la oposici¨®n y no trabajar, porque no hay l¨ªmite para hacer preguntas", a?ade.

Atencia (185 intervenciones y 24 iniciativas en la ¨²ltima legislatura) niega que falte trabajo. "El diputado que se mueve encuentra trabajo siempre. Depende del peso pol¨ªtico que uno tenga. Atencia s¨ª critica el exceso de celo de algunos diputados al preguntar: "Es cierto que Miguel ?ngel Heredia ha preguntado mucho pero el peso pol¨ªtico no se mide porque alguien pregunte por todos y cada uno de los kil¨®metros de una autopista, sino por las veces que se interviene en pleno". Heredia ha intervenido 97 veces entre plenos y comisiones. Las m¨¢s de 7.000 preguntas son un r¨¦cord brutal seguido muy de lejos por la diputada del PSOE Mar¨ªa del Carmen S¨¢nchez D¨ªaz, que ha presentado 2.250 iniciativas en el Congreso, y Salvador de la Encina, 1.163 iniciativas. Ning¨²n diputado del PP supera las 150 iniciativas.

Torres Vela coincide en que algunos diputados abusan de las preguntas: "En la ¨²ltima legislatura hemos vivido un aumento espectacular de las preguntas. Hay diputados que se levantan se leen la prensa y preguntan sobre lo que han le¨ªdo ese d¨ªa. El gonierno se ha quejado no sin raz¨®n". Entre los m¨¢s activos en el Parlamento andaluz est¨¢n Carolina Gonz¨¢lez Vigo, Mar¨ªa del Carmen Crespo y Antonio Sanz, del PP. Del PSOE les siguen, a gran distancia, Clara Aguilera o Aurora Atoche.

Pese al reconocimiento oficial de que la labor de los diputados es importante, siempre hay quien opina que es una filfa. Es el caso del ex alcalde de Granada y ex senador del PP Gabriel D¨ªaz Berbel. ?ste, molesto por no repetir en la lista tras dos preguntas en cuatro a?os, asegura que el verdadero trabajo parlamentario se hace en los despachos de subsecretarios y ministros. Si no va en la lista no es porque s¨®lo haya realizado dos preguntas, sino por falta de apoyo en el PP.