Interrogando al futuro
El a?o de los mercados, que hab¨ªa tenido un comienzo m¨¢s que optimista, empieza a tornarse sombr¨ªo, en coincidencia con los atentados de Madrid. En la semana que termina se hab¨ªan cumplido, curiosamente, dos aniversarios a la vez: el del comienzo de la crisis burs¨¢til, que se prolong¨® durante tres a?os (10 de marzo de 2000) y el del inicio de su recuperaci¨®n (11 de marzo de 2003).
El impacto de ¨¦sta en los fondos de renta variable, en general, y en los que invierten en acciones espa?olas, en particular, ha sido muy fuerte: en los 365 ¨²ltimos d¨ªas la rentabilidad media de los 113 fondos de este tipo ha sido del 48%: casi la mitad de ellos han acumulado rentabilidades superiores al 50% en ese periodo. Si se observa el cuadro adjunto, se puede apreciar que, a pesar de eso, s¨®lo hay nueve fondos que no acumulan p¨¦rdidas para los tres ¨²ltimos a?os, tal fue la magnitud de la crisis.
?Qu¨¦ va a suceder en el futuro? La crisis de las bolsas se inici¨® por causa de un exceso de capacidad en las econom¨ªas occidentales, en especial en el sector tecnol¨®gico y de telecomunicaciones. La forma de iniciarse fue muy diferente a la de otras crisis posteriores a la Segunda Guerra Mundial. En ¨¦stas, cuando una econom¨ªa se sobrecalentaba y empezaba a generar inflaci¨®n, el banco central correspondiente proced¨ªa a elevar los tipos de inter¨¦s de intervenci¨®n, frenando con ello el ritmo de expansi¨®n o provocando una recesi¨®n. En el a?o 2000, lo que desat¨® la crisis fue la pura evidencia de que exist¨ªa un exceso de oferta que no iba a encontrar, en un plazo razonable, una demanda solvente.
La econom¨ªa norteamericana, tambi¨¦n en estos tres a?os, entr¨® y sali¨® de la recesi¨®n, de modo que, en este momento, el periodo expansivo dura ya casi dos a?os y medio y, en ellos, los grandes desequilibrios de la econom¨ªa norteamericana no han hecho m¨¢s que acentuarse: el d¨¦ficit presupuestario y el de la balanza comercial han alcanzado niveles r¨¦cords, y el dato de esta ¨²ltima en el mes de enero no ha hecho m¨¢s que empeorar la situaci¨®n.
Sin embargo, es razonable pensar que la recuperaci¨®n del d¨®lar de las ¨²ltimas semanas pudiera estar anunciando la correcci¨®n de ese d¨¦ficit: la ¨²ltima vez que algo as¨ª sucedi¨® (1988), el d¨¦ficit comercial empez¨® a reducirse dos a?os y medio despu¨¦s de iniciarse la ca¨ªda del d¨®lar, y coincidi¨® con una recuperaci¨®n transitoria de ¨¦ste que lo habr¨ªa llevado desde 1,30 a 1,05 d¨®lares por euro, si hubiera existido el euro entonces.
Y ?con los fondos de renta variable espa?ola? Seguir¨¢n la estela de la Bolsa, que a su vez seguir¨¢ la que marque la de Estados Unidos. Una Bolsa que est¨¢ en una trayectoria alcista, y que puede seguir as¨ª durante un a?o m¨¢s, hasta alcanzar sus m¨¢ximos hist¨®ricos, sin que a partir de ah¨ª se pueda pensar en que vaya a sostenerse. Nunca en situaciones hist¨®ricas comparables (1905 o 1972) lo ha hecho.
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