El fot¨®grafo Yann Arthus-Bertrand muestra su exploraci¨®n a¨¦rea del planeta en San Sebasti¨¢n
La exposici¨®n re¨²ne en la Sala Kubo 150 im¨¢genes sobre la belleza y la fragilidad de la Tierra
El fot¨®grafo Yann Arthus-Bertrand (Par¨ªs, 1946) viaj¨® con treinta a?os a Kenia para estudiar el comportamiento de una familia de leones. Invirti¨® en ello tres a?os y todos los medios posibles y as¨ª, mientras volaba en globo, descubri¨® la grandeza de la fotograf¨ªa a¨¦rea y se plante¨® nuevos proyectos. El m¨¢s ambicioso, La tierra vista desde el cielo, que ahora presenta en forma de exposici¨®n la Sala Kubo de Kutxa en San Sebasti¨¢n. Son 150 im¨¢genes a¨¦reas que muestran la belleza de distintos parajes del mundo y su fragilidad frente a la acci¨®n del hombre.
Yann Arthus-Bertrand, fot¨®grafo con especial debilidad por la naturaleza -en su juventud gestion¨® una reserva natural en el centro de Francia-, ha dedicado quince a?os de su vida a documentar el estado del planeta. En parte, por hambre art¨ªstico pero, sobre todo, por conciencia medioambiental. "Cuanto mayor sea el conocimiento que se tenga de la Tierra, mejor se contribuir¨¢ a su desarrollo", se plante¨® antes de emprender el viaje.
Arthus Bertrand, considerado uno de los mayores especialistas mundiales en fotograf¨ªa a¨¦rea, ha sobrevolado en helic¨®ptero 76 pa¨ªses durante 15 a?os. O dicho de otra forma, ha trabajado, por el momento, m¨¢s de 3.000 horas desde el aire para retratar el mundo desde una perspectiva accesible s¨®lo a unos pocos. El resultado de este trabajo son 10.000 im¨¢genes. El fot¨®grafo ha hecho una criba y se reserva muchas para s¨ª. Pero muestra otras, las m¨¢s espectaculares, en La Tierra vista desde el cielo, una exposici¨®n auspiciada por la Unesco que ha rotado por salas de todo el mundo desde su primera exhibici¨®n en 1999, en los Jardines de Luxemburgo de Par¨ªs, y ha sido ya vista por m¨¢s de ocho millones de personas.
El fot¨®grafo franc¨¦s muestra estas im¨¢genes hasta el pr¨®ximo 9 de mayo en el Kursaal donostiarra. Se trata de fotograf¨ªas a color de gran formato que dejan al descubierto la naturaleza en su estado m¨¢s puro: su belleza, su fuerza y, al mismo tiempo, su debilidad frente a la acci¨®n de los hombres. "Bertrand nos demuestra que el lugar m¨¢s bonito del mundo puede ser cualquiera, pero que al mismo tiempo es siempre fr¨¢gil", explic¨® ayer la directora de la sala, Mar¨ªa Victoria Arcaya. Al espectador le deslumbra la belleza del glaciar Perito Moreno de Argentina. O los cuadros abstractos que pintan los campesinos al arar sus tierras. O una aglomeraci¨®n de flamencos rosas en el lago Nakuru (Kenia). O la imagen del coraz¨®n que la vegetaci¨®n ha dibujado por capricho en Nueva Caledonia. Y le sobrecogen las im¨¢genes de las favelas de R¨ªo de Janeiro y las que muestran la devastaci¨®n que han causado un terremoto en Turqu¨ªa y un tornado en Florida.
Reflexi¨®n medioambiental
Pero, sobre todo, al espectador se le ofrece abundante material gr¨¢fico para la reflexi¨®n sobre la conservaci¨®n de la naturaleza, sobre la necesidad de ser respetuoso con el medio ambiente. Se ve en la controvertida fotograf¨ªa que el artista franc¨¦s tom¨® de un vertedero mexicano -se prohibi¨® su exhibici¨®n en el pa¨ªs-. En todo caso, para ¨¦l la m¨¢s impactante, seg¨²n confiesa en un v¨ªdeo en el que da las claves de su trabajo, es la de una ciudad abandonada junto a la central nuclear de Chernobil.
"Hacer fotograf¨ªa a¨¦rea es hacer geograf¨ªa", explica en esta proyecci¨®n. "Tengo la impresi¨®n de volar sobre un gran mapa del mundo". Lo ha hecho. Arthus- Bertrand analiza primero con su equipo los relieves y los deltas sobre los mapas, para despu¨¦s volar sobre el terreno y disparar su c¨¢mara desde el aire. "No se trata ¨²nicamente", afirma, "de hacer fotograf¨ªa hacer una foto bella, sino de contar algo" y "hablar del hombre". Ha retratado los canales de Venecia, el Museo Guggenheim de Bilbao, los rascacielos de Tokio, la bah¨ªa de R¨ªo de Janeiro, las caravanas de dromedarios en Mauritania y otros motivos si se quiere m¨¢s f¨¢ciles y previsibles. Pero "el 80% de las fotograf¨ªas de la exposici¨®n" las descubri¨® "sobre la marcha", seg¨²n confiesa: desde los supervivientes de unas inundaciones en Bangladesh a la geometr¨ªa de un cultivo de algas en Bali (Indonesia).
Las im¨¢genes de la exposici¨®n, estructuradas en diez ¨¢reas tem¨¢ticas -desde El Estado del mundo a comienzos del siglo XXI a Las heridas del Medio Ambiente o La poblaci¨®n de la tierra y el futuro del g¨¦nero humano-, van acompa?adas de textos escritos por especialistas con informaci¨®n demogr¨¢fica, econ¨®mica y social y datos sobre los problemas que determinadas actividades humanas ocasionan a la biodiversidad del planeta.
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