El economista De Soto cree que la propiedad y el derecho permiten "levantarse a los pobres"

El economista Hernando de Soto pronunci¨® ayer una conferencia en el Colegio Notarial de Madrid en la que expuso que la pobreza de 4.000 millones de personas en el mundo se explica por la falta de seguridad jur¨ªdica sobre la propiedad. "La defensa de la propiedad es poder darle a los pobres el instrumento para levantarse", argument¨®. "A estas personas les falta el derecho de que sus cosas tengan valor", dijo. De Soto, presidente del Instituto peruano Libertad y Democracia, argument¨® que Occidente ya no es consciente de esta revoluci¨®n de la seguridad en la propiedad que adem¨¢s es la gran generadora de riqueza. "Para tener una econom¨ªa de mercado se necesita confianza entre unos y otros, y ¨¦sta s¨®lo se produce en los pa¨ªses del Norte", dijo. "En el Tercer Mundo s¨®lo el 3% de las personas creen en sus compatriotas", a?adi¨®. En su alocuci¨®n apunt¨® que en las dos terceras partes del mundo no hay t¨ªtulos cre¨ªbles de propiedad y ellos son la base de la riqueza y abren la posibilidad del desarrollo a trav¨¦s de los cr¨¦ditos.

Hernando de Soto puso el ejemplo de la compa?¨ªa de tel¨¦fonos de Per¨² que cotizaba en bolsa a un valor de 53 millones de d¨®lares. Despu¨¦s de gastarse 30 millones de d¨®lares en darle seguridad jur¨ªdica internacional a la compa?¨ªa, la empresa se vendi¨® por 2.000 millones a Telef¨®nica.

En su conferencia explic¨® tambi¨¦n que las pymes estadounidenses, como grandes generadoras de empleo, crecen gracias al cr¨¦dito hipotecario solicitado por sus propietarios sobre sus casas. Algo impensable en cualquier pa¨ªs del Tercer Mundo. Hernando de Soto consider¨® que son los pobres los que tienen la fuerza y valor¨® en 10 billones de d¨®lares sus propiedades y herramientas si gozasen de seguridad jur¨ªdica. En su defensa de la propiedad, indic¨® que adem¨¢s es el primer ladrillo para crear el mundo del Derecho e incluso la democracia. "No se trata s¨®lo de egoismo", indic¨®. Por ¨²ltimo tambi¨¦n puso el ejemplo de Jap¨®n, ya que de ser un pa¨ªs m¨¢s pobre que Brasil o Per¨² antes de la II Guerra Mundial vivi¨® una revoluci¨®n desde 1946 a 1951 por la creaci¨®n de las leyes que dieron seguridad a la propiedad de sus habitantes.