Putin estrecha el cerco a la petrolera Yukos
La empresa, que produce el 20% del crudo nacional, emple¨® argucias fiscales frecuentes en el sector
El Estado ruso representado por Vlad¨ªmir Putin sigue acorralando a la petrolera Yukos, productora de 1,7 millones de barriles de crudo diarios (el 20% del pa¨ªs), tras ignorar las voces de alarma, procedentes del mismo Gobierno, sobre el impacto que la interrupci¨®n de esos suministros tendr¨ªa sobre el mercado mundial. Los escenarios del acoso han sido esta semana dos juzgados de Mosc¨², de los que depende, respectivamente, el destino de Yukos y de Mija¨ªl Jodorkovski, de 41 a?os, que convirti¨® en un imperio la compa?¨ªa adquirida a precio de saldo en una subasta de privatizaci¨®n en 1995.
En el tribunal de arbitraje de Mosc¨², Yukos trataba de liberar recursos para pagar parte de los impuestos atrasados y penalizaciones (2.800 millones de euros) que el fisco ruso le atribuye para 2000 y evitar as¨ª la quiebra. Los jueces, sin embargo, le rechazaron un paquete de acciones en Sibneft, la petrolera controlada por el oligarca Rom¨¢n Abram¨®vich, que dio marcha atr¨¢s en su proyectada fusi¨®n con Yukos.
Los esquemas fiscales son clave para entender el origen de algunas grandes fortunas
Una de las dudas es si se perseguir¨¢ a otros oligarcas que usaron el mismo marco impositivo
En el proceso penal en un juzgado de barrio de Mosc¨² han seguido compareciendo Mija¨ªl Jodorkovski y su socio Plat¨®n L¨¦bedev, acusados de estafar, evadir impuestos y organizar una banda delictiva para controlar la f¨¢brica de fosfatos Apatit en 1994. Entre los primeros testigos del fiscal ha estado un antiguo director de la firma, Anatoli Pozdniakov, que declar¨® a favor de Jodorkovski.
Formalmente, los dos procesos son independientes, pero ambos parecen discurrir conforme a un mismo gui¨®n y en ambos hay la misma voluntad de resistencia de los acusados. Durante la vista, el hombre m¨¢s rico de Rusia (15.200 millones de d¨®lares, seg¨²n la revista Forbes), encarcelado en octubre pasado, sonre¨ªa desafiante tras los barrotes de la jaula donde est¨¢ encerrado. Yukos logr¨® pagar algo de su deuda reba?ando sus propiedades, como una participaci¨®n del 56% en la empresa Rospan, due?a de licencias de gas en Siberia. Yukos ha vendido esta parte al consorcio TNK-BP por 357 millones de d¨®lares, pero tiene congeladas las cuentas de sus principales filiales, entre ellas Yugansneftegaz, responsable del 60% de la producci¨®n. China ha mostrado deseo de comprar esta empresa, que medios gubernamentales rusos valoran en 12.000 millones de d¨®lares como m¨ªnimo.
El desaf¨ªo de Jodorkovski en su jaula y la compra de tiempo al fisco son triunfos ef¨ªmeros en una batalla con el Estado que tiene dimensiones pol¨ªticas y personales, adem¨¢s de econ¨®micas. Para ganarla no basta con haber producido 80,8 millones de toneladas de crudo en 2003 y planear 90 millones de toneladas este a?o, o emplear a m¨¢s de 100.000 personas y haber hecho transparentes las cuentas de la empresa y las participaciones de sus ejecutivos a partir de 2002, obligando a otras firmas rusas a hacer lo mismo. Tampoco basta que el presidente estadounidense, George Bush, haya intercedido ante Putin, con intermediarios, o que el ministro de energ¨ªa ruso, V¨ªctor Jristenko, haya pedido al jefe del Gobierno, Mija¨ªl Fradkov, que act¨²e para levantar el embargo sobre las cuentas de Yukos y que el jefe de la Agencia Federal de Energ¨ªa, Sergu¨¦i Oganesi¨¢n, se expresara a favor de evitar el paro de la producci¨®n.
Las inc¨®gnitas sobre el futuro de Yukos no contribuyen a la buena imagen del Kremlin, pero hacen subir los precios y llover las divisas. "El presupuesto ruso recibir¨¢ este a?o un m¨ªnimo de 10.000 millones de d¨®lares extra gracias a los ingresos suplementarios de la venta de petr¨®leo y gas", dice Mija¨ªl Zad¨®rnov, ex ministro de Finanzas y diputado parlamentario. El gas y el petr¨®leo pueden suponer hasta el 45% de los ingresos del presupuesto ruso este a?o, se?ala.
Una de las inc¨®gnitas es si, tras el acoso a Yukos, el presidente Putin arremeter¨¢ contra otros oligarcas beneficiados de los esquemas de "evasi¨®n" u "optimizaci¨®n" de impuestos (seg¨²n las diversas terminolog¨ªas) utilizados ampliamente por las petroleras rusas, pero practicados, seg¨²n Zad¨®rnov, "con distinto grado de agresividad". Yukos, Sibneft, controlada por Abram¨®vich, y TNK, por el oligarca V¨ªktor Vekselberg, figuran entre las m¨¢s "agresivas".
Los "esquemas fiscales" son claves para entender el origen de algunas grandes fortunas en Rusia. Para empezar, las petroleras privatizadas contrajeron su base impositiva. En lugar de pagar por la venta a precios de mercado del crudo preparado para el transporte por oleoducto, tributaban sobre la mezcla de petr¨®leo bruto tal como sal¨ªa del subsuelo, valor¨¢ndola -en operaciones ficticias con empresas creadas ex profeso- a precios muy por debajo del mercado, afirma un peque?o empresario del sector que quiere guardar el anonimato. El Estado gravaba as¨ª la primera transacci¨®n en una larga cadena de compra-venta entre diversas empresas, que se remataba en alg¨²n para¨ªso fiscal internacional o en alguna zona de r¨¦gimen privilegiado en Rusia. Yukos, cuyo primer accionista, Menatep, est¨¢ registrado en Gibraltar, vend¨ªa su petr¨®leo siberiano mediante una empresa domiciliada en Mordovia, una regi¨®n de Rusia con r¨¦gimen fiscal especial. Lo importante para ahorrar impuestos, se?ala el peque?o empresario, era tener eslabones suficientes para embarullar las operaciones y dinero para influir en jueces e inspectores fiscales.
Para reducir el impuesto de sociedades (24% en Rusia), las petroleras crearon empresas comerciales, que domiciliaban en zonas rusas con fiscalidad privilegiada, autorizadas a rebajar hasta cero su parte en ese impuesto compartido con el Estado. Tambi¨¦n utilizaban territorios cerrados por razones militares, como el cosm¨®dromo de Baikanur, en Kazajst¨¢n, y registraban firmas que contrataban a inv¨¢lidos para desgravar.
Desde 2001 esos agujeros fiscales legales de la era de Yeltsin han ido cerr¨¢ndose, seg¨²n Zad¨®rnov. En 2002 se introdujo un impuesto sobre las materias primas que grava la tonelada de crudo extra¨ªda con una suma fija orientada hacia los precios del mercado mundial. En enero pasado dejaron de funcionar las zonas de r¨¦gimen fiscal privilegiado, como Mordovia o Chukotka, la regi¨®n de la que es gobernador el oligarca petrolero Rom¨¢n Abram¨®vich, due?o del club de f¨²tbol brit¨¢nico Chelsea.
Un doble rasero legal
El peque?o pueblo de pescadores y cazadores que habita en Chukotka (los chukchis) est¨¢ hoy agradecido a Rom¨¢n Abram¨®vich, su gobernador, por haber llevado cierto bienestar a aquella regi¨®n depauperada del Lejano Oriente ruso. Abram¨®vich deber¨ªa tambi¨¦n estar agradecido a los chukchis, porque ¨¦stos le han permitido beneficiarse del r¨¦gimen fiscal privilegiado en el que han medrado firmas comerciales vinculadas a sus intereses petroleros.
A diferencia de lo ocurrido con Jodorkovski, Abram¨®vich est¨¢ en libertad y exhibiendo su riqueza, pese a las inspecciones que el Tribunal de Cuentas ha llevado a cabo en Chukotka. Sergu¨¦i Stepashin, el presidente de esta instituci¨®n, afirm¨® en abril que Abram¨®vich hab¨ªa escamoteado 10.000 millones de rublos (285 millones de euros) en impuestos al fisco, usando para ello las ventajas fiscales de la regi¨®n y subray¨® que esta suma coincide de forma aproximada con la cantidad pagada por el club de f¨²tbol Chelsea. Sin embargo, las autoridades rusas no parecen haber sacado conclusiones de las afirmaciones de Stepashin. Es m¨¢s, incluso han premiado al oligarca, que en diciembre de 2002 se benefici¨® de la truculenta subasta de privatizaci¨®n de Slavneft, realizada de acuerdo las peores tradiciones de la ¨¦poca de Yeltsin.
Recientemente, la compa?¨ªa sueca Vostok Nafta, accionista minoritaria en una filial de Slavneft (controlada en un 75% por Rom¨¢n Abram¨®vich), ha demandado a esta empresa por una suma de 950 millones de d¨®lares por supuestas operaciones a precio inferior al del mercado en detrimento de los intereses de los peque?os accionistas.
La opaca privatizaci¨®n de Slavneft sembr¨® dudas sobre las intenciones de Putin de crear un mercado transparente cuando de las grandes empresas de Rusia se trata, y estas dudas se mantienen. Tras ocupar su cargo en marzo, el ministro de Recursos Naturales, Yuri Tr¨²tnev, prometi¨® que las subastas abiertas ser¨ªan el ¨²nico medio de adjudicar la explotaci¨®n de recursos, cuando hubiera m¨¢s de un contendiente. Sin embargo, seg¨²n el diario V¨¦domosti, un proyecto de nueva ley del subsuelo preparado en su departamento da al Estado la posibilidad de adjudicar concesiones para explotar los recursos, sin fijar los criterios de selecci¨®n.
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