El 'gratis total' ya es una industria
Las redes de intercambio conectan a 150 millones de personas y crean nuevos negocios en la electr¨®nica o la telefon¨ªa
Los tribunales han confirmado lo que ya sab¨ªan los internautas: los sistemas de intercambio gratuito de archivos, como el que cre¨® Napster, configuran un nuevo y poderoso ecosistema imposible de condenar y frenar. Liberadas del estigma de 'piratas', estas redes est¨¢n explotando el enorme potencial que tiene el hecho de que 150 millones de personas intercambien todo tipo de informaci¨®n. Las operadoras venden banda ancha, las electr¨®nicas se benefician del 'boom' de la m¨²sica digital o el cine en casa y las inform¨¢ticas tratan de vender 'software' para la protecci¨®n de los derechos de autor. Es el mundo de los negocios entre pares (P2P), el mercado que hay detr¨¢s el 'gratis total.' Y va siendo hora de explotarlo. Estas redes mueven ya el 60% de todo el tr¨¢fico de Internet, seg¨²n un an¨¢lisis de la consultora inglesa Ovum.
Las operadoras no quieren dar datos del tr¨¢fico que genera el intercambio de ficheros, pero reconocen que supone un "porcentaje apreciable"
Unos 30 millones de personas hablan de forma gratuita por Internet gracias a Skype, el ¨²ltimo lanzamiento de los creadores de Kazaa
En el siglo pasado, es decir, hace cinco a?os, se sol¨ªa decir "te hago una copia" cuando alguien quer¨ªa compartir sus canciones o pel¨ªculas con sus amigos. Esa expresi¨®n, ahora, carece de sentido porque ya se puede compartir el original, sin degradarlo, con 500 millones de personas de todo el mundo. Se han roto las reglas de una manera brusca, brutal, a velocidad de v¨¦rtigo, a escala planetaria y para siempre. La adopci¨®n masiva de Internet y la digitalizaci¨®n de archivos permiten distribuir informaci¨®n con un coste marginal despreciable. Las cifras marean. Se calcula que en estos sistemas de comunicaci¨®n hay, en este momento, m¨¢s de tres millones de personas compartiendo 500 millones de archivos de manera simult¨¢nea.
Las redes se llaman P2P, acr¨®nimo de peer to peer. Describe el intercambio de archivos entre pares, o iguales, lo cual significa que no hay intermediarios. Fulanito comparte sus archivos con Menganito. Y hay 150 millones de menganitos.
El impacto econ¨®mico de este fen¨®meno es evidente. Especialmente en Espa?a. Seg¨²n un extenso informe del MIT, publicado en 2002, es el octavo pa¨ªs en descargas, con un 2,5% del total mundial. Sin embargo, s¨®lo cuenta con el 1,3% de la poblaci¨®n internauta (el n¨²mero 11 del mundo), lo que significa que los espa?oles que est¨¢n conectados a Internet lo est¨¢n para bajarse archivos: canciones, pel¨ªculas, fotos, p¨®sters, software. Cualquier cosa susceptible de ser digitalizada est¨¢ ya en la Red.
Los sistemas de intercambio est¨¢n consiguiendo, poco a poco, quitarse el estigma que les identifica con la pirater¨ªa. Las ventas del negocio discogr¨¢fico caen cada a?o a un ritmo cercano al 10%, pero ning¨²n tribunal de EE UU ni de la UE ha logrado probar que la culpa sea de la tecnolog¨ªa P2P.
As¨ª que un buen pu?ado de empresas est¨¢ intentando sacarle partido al hecho de que, en este mismo momento, millones de personas que no se conocen sean capaces de abrir sus ordenadores para compartir todos sus archivos con los dem¨¢s. La cuesti¨®n es c¨®mo se puede hacer dinero con ello.
- - La banda ancha. La Red no para de engordar. En 2001, s¨®lo hab¨ªa medio mill¨®n de espa?oles con acceso de banda ancha, seg¨²n datos de la CMT. A d¨ªa de hoy, son m¨¢s de tres millones los que se conectan a la Red a alta velocidad y con una tarifa plana, ya sea por tel¨¦fono (ADSL), cable u otras tecnolog¨ªas. Y una de las causas evidentes es el intercambio de archivos: los internautas que est¨¢n dispuestos a pagar m¨¢s de 30 euros al mes no lo hacen para mandar simples correos electr¨®nicos. No hay datos del tr¨¢fico que suponen el intercambio de archivos en las redes de los operadores. Y si los hay, las compa?¨ªas se han encargado de enterrarlos convenientemente. Es un tema muy delicado; las compa?¨ªas no quieren transmitir la idea de que est¨¢n haciendo dinero con la pirater¨ªa. Tiscali se ha enfrentado esta misma semana a una demanda de la sociedad de autores en B¨¦lgica por no poner "trabas" a la distribuci¨®n gratuita de archivos. Pero nadie niega que, si se incrementa el intercambio de archivos, crece tambi¨¦n la demanda de mayor capacidad en la Red. "Es evidente", explica Jos¨¦ Enr¨ªquez Gabeiras, de Telef¨®nica I+D, "que el tr¨¢fico P2P es un porcentaje apreciable del total [de la red de Telef¨®nica], aunque desconozco el porcentaje preciso".
La banda ancha mover¨¢ este a?o unos 1.500 millones de euros en Espa?a, aunque los operadores aclaran: "Tambi¨¦n supone un problema, ya que el aumento del tr¨¢fico no incrementa los ingresos (hay tarifa plana), pero s¨ª los costes de explotaci¨®n de la red", aclara Enr¨ªquez.
- - El 'software'. Kazaa, eMule, BitTorrent, Blubster (dise?ada por el espa?ol Pablo Soto). Son decenas las p¨¢ginas que ofrecen programas de intercambio. Hacen dinero de la misma manera que la de una emisora de radio o televisi¨®n: con la publicidad que incluyen en las descargas. La mayor parte de ellas ha desarrollado tambi¨¦n opciones en cerrado, libres de anuncios, por las que hay que pagar una cuota de unos 30 d¨®lares. Nadie, ni siquiera los tribunales, ha podido desvelar cu¨¢nto dinero se hace con este negocio. Pero s¨ª est¨¢ claro que es muy complicado y tremendamente competitivo, ya que las embestidas de la industria discogr¨¢fica se suelen traducir en movilizaciones masivas de los internautas de unas redes a otras (v¨¦ase gr¨¢fico de la p¨¢gina 6). El n¨²mero uno, por tanto, nunca tiene el puesto asegurado. Napster fue sustituido por Kazaa, que a su vez fue reemplazado por eMule, y ahora el rey de las descargas es BitTorrent. Y, por muy populares que sean, estas redes no est¨¢n libres de problemas. La falta de seguridad y la instalaci¨®n de virus y programas esp¨ªa en los ordenadores de los usuarios es, probablemente, el m¨¢s preocupante. Y el que ha hundido a Kazaa.
- - La telefon¨ªa. Los creadores de Kazaa parecen haber aprendido del error: si inundas los ordenadores de tus clientes con basura electr¨®nica, se ir¨¢n a cualquier otra parte porque nada les retiene. La idea detr¨¢s de su nuevo negocio es utilizar las redes de intercambio para realizar llamadas telef¨®nicas. La empresa se llama Skype, y ya se lo han descargado 30 millones de personas, que hablan entre ellas de forma completamente gratuita. Si quieren llamar a otro tel¨¦fono -fijo o m¨®vil-, el precio ronda el c¨¦ntimo por minuto.
Skype es el negocio m¨¢s serio que se ha puesto en marcha en el P2P hasta el d¨ªa de hoy. Detr¨¢s de ¨¦l est¨¢n grandes fondos de capital riesgo de Silicon Valley, encabezados por el de Tim Draper. Skype acaba de comenzar a andar, y tiene problemas: utiliza un est¨¢ndar propietario, incompatible con el de sus competidores, y a¨²n es algo inc¨®modo de usar, porque se necesitan auriculares con micr¨®fono, por lo que es imposible moverse de la mesa del ordenador. Pero lo que indica la idea es que, si tiene ¨¦xito, es el fin de la telefon¨ªa tradicional: ya no se cobrar¨¢ por distancia ni por tiempo. "Sab¨ªa que todo hab¨ªa acabado cuando me descargu¨¦ Skype", ha dicho Michael Powell, presidente de la Comisi¨®n Federal de Comunicaciones (FCC) estadounidense.
- - El 'hardware'. Todo este negocio es f¨¢cil de resumir: los internautas utilizan la banda ancha para intercambiar archivos y, finalmente, consumir m¨¢s m¨²sica o pel¨ªculas. Pero deben hacerlo en alg¨²n sitio. Es el negocio de los fabricantes de ordenadores, reproductores de m¨²sica digital o sistemas de cine en casa. Este a?o se vender¨¢n unos 10 millones de reproductores de m¨²sica digital y las ventas de televisores planos crecieron el pasado un 1.200%. Y en 2007, seg¨²n HP, el ocio digital mover¨¢ unos 360.000 millones de d¨®lares.
- Los derechos de autor. Si no puedes con la tecnolog¨ªa, ¨²nete a ella. Las compa?¨ªas tradicionales de software, con Microsoft a la cabeza, est¨¢n vendiendo a las compa?¨ªas de contenidos una tecnolog¨ªa llamada DRM (derechos de gesti¨®n digital) para proteger sus obras. Es un negocio muy importante. "Hasta que Apple no demostr¨® que su sistema de protecci¨®n era irrompible, las discogr¨¢ficas no le dieron autorizaci¨®n para su tienda iTunes", explica Josep Valor, profesor en el IESE. "Pero hay un problema. Romper esa protecci¨®n es un deporte en algunas universidades. Y siempre hay m¨¢s gente pensando fuera de las empresas que dentro".
- La inform¨¢tica distribuida. Es el mejor ejemplo del uso de las redes P2P para ahorrar costes. La mayor parte de la gente s¨®lo utiliza el 60% de la capacidad de su ordenador, as¨ª que, ?por qu¨¦ no ceder ese poder de computaci¨®n que sobra a un tercero conectado por la Red? Es muy com¨²n en el mundo universitario y en empresas financieras, es decir, en lugares donde se necesita mucha capacidad de proceso, pero donde comprar un superordenador resultar¨ªa muy caro. IBM, HP, Oracle y la espa?ola Grid Systems pelean en este negocio, que consiste en unir ordenadores para crear un enorme disco duro virtual.
- - La transformaci¨®n.
Las redes de intercambio est¨¢n saliendo de la marginaci¨®n para transformar los viejos negocios. "Las redes P2P no s¨®lo no constituyen una amenaza, sino que representan una de las aplicaciones m¨¢s utilizadas. Los modelos de negocio tendr¨¢n que adaptarse a esa realidad", dice Jos¨¦ Cerezo, de la Fundaci¨®n Auna. ?Conclusi¨®n? Las operadoras dejar¨¢n de facturar por la distancia de la llamada. Las discogr¨¢ficas dejar¨¢n de vender "pedazos de pl¨¢stico", como explica Valor. Y va m¨¢s all¨¢ del mundo digital. En EE UU hay ciudadanos que utilizan la red de Peerflix para informarse de los DVD que tienen los dem¨¢s y cambi¨¢rselos, o para romper el discurso dominante antes de las elecciones del martes y compartir con otros internautas informaci¨®n necesaria para votar (p2p-politics.org).
Y es tan s¨®lo el principio.
La lista 'Forbes' del P2P
Los analistas y expertos de este sector suelen decir que no se gana dinero con el dise?o de programas de intercambio de archivos. Pero Shawn Fanning, el creador de Napster, era millonario a los 19 a?os.
Despu¨¦s de ¨¦l han surgido tantos programas que es imposible saber cu¨¢nto dinero han ganado sus creadores. Y, adem¨¢s, han tenido tantos problemas en los tribunales que buena parte de su fortuna la han gastado en abogados. Sin embargo, la revista de referencia del P2P, Slyck, public¨® hace un a?o un art¨ªculo donde repasaba las principales redes de intercambio, calculaba el dinero que hab¨ªan ganado sus creadores y llegaba a una conclusi¨®n: la mayor parte de ellos es millonaria.
Los suecos Niklas Zennstrom y Janus Friis, creadores de Kazaa, ganaban hace un a?o m¨¢s de 70 millones de d¨®lares anuales, seg¨²n las estimaciones de Slyck. Elan Oren, de iMesh, sumaba 100 millones desde 1999. El espa?ol Pablo Soto, Wayne Rosso o Mark Gorton tambi¨¦n est¨¢n en esta peculiar lista Forbes del P2P. Claro, que la revista pon¨ªa un punto de iron¨ªa: Hillary Rosen, la directora de la asocaci¨®n de discogr¨¢ficas de EE UU, gana un mill¨®n de d¨®lares al a?o.
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