Las multinacionales negocian con Gaddafi
Repsol, Cepsa, Iberdrola y Gas Natural, Abengoa y Soluziona, entre otras, exploran inversiones en energ¨ªa y agua
Espa?a no quiere llegar tarde a Libia. Una semana antes, incluso, de que los ministros de Exteriores de la UE acordaran, el pasado d¨ªa 11, derogar las restricciones econ¨®micas impuestas al r¨¦gimen del coronel Muammar el Gaddafi, una delegaci¨®n integrada por 11 de las principales multinacionales espa?olas visitaba el pa¨ªs magreb¨ª para abrir nuevas v¨ªas de cooperaci¨®n.
El Gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero negocia un acuerdo para convertir en inversiones 15,4 millones de la deuda hist¨®rica del pa¨ªs magreb¨ª
Esta delegaci¨®n, organizada por la CEOE y encabezada por el secretario de Estado de Turismo y Comercio, Pedro Mej¨ªa, abr¨ªa negociaciones directas con el Gobierno de Tr¨ªpoli para formalizar proyectos de inversi¨®n en los sectores de petr¨®leo y gas, electricidad e infraestructuras para el abastecimiento de agua.
El levantamiento de las sanciones econ¨®micas de EE UU a Libia por el caso Lockerbie el pasado 13 de septiembre y el posterior acuerdo de la UE "han puesto de moda entre los inversores occidentales a este pa¨ªs, todav¨ªa virgen y que est¨¢ dando pasos muy importantes para reintegrase en la comunidad internacional", asegura Fernando Salazar, director del Gabinete del secretario de Estado, quien resalta el "alto nivel" de los contactos mantenidos por la delegaci¨®n espa?ola, recibida, incluso, por el primer ministro, Shuki Ghanem.
Organizada por la CEOE, la misi¨®n empresarial integraba a altos ejecutivos de Abengoa, Cepsa, Endesa, Gas Natural, Iberdrola, Isolux Wat, OHL, Repsol YPF, Sacyr Vallehermoso y Soluziona, especialmente interesadas en contribuir a lo que el presidente del Consejo de Promoci¨®n Exterior de la patronal espa?ola, Jos¨¦ Garc¨ªa Morales, defin¨ªa como "un nuevo planteamiento en las relaciones econ¨®micas entre Espa?a y Libia" y que, "m¨¢s all¨¢ de la petroqu¨ªmica y el gas, abren un mundo todav¨ªa por descubrir en los campos de la electricidad y las desalinizadoras".
Proyectos
En este ¨²ltimo, el consorcio espa?ol formado por Sacyr Vallehermoso, Abengoa y Cobra est¨¢ negociando con las autoridades libias la adjudicaci¨®n de un importante contrato para la construcci¨®n de plantas desalinizadoras y sistemas de reutilizaci¨®n y tratamiento de aguas residuales para aliviar las necesidades en el consumo humano y en la agricultura. Los informes avanzados por la Oficina Comercial de Espa?a en Tr¨ªpoli apuntan que el Gobierno del coronel Gaddafi prev¨¦ construir hasta el a?o 2010 once plantas de desalaci¨®n con un presupuesto de mil millones de d¨®lares, con una capacidad instalada de 700.000 metros c¨²bicos al d¨ªa.
Por lo que respecta a la electricidad, las inversiones programadas alcanzan 6.000 millones de d¨®lares hasta 2010 y otros 4.000 millones adicionales entre 2010 y 2020, aumentando la capacidad instalada de generaci¨®n en 98.000 megavativos. Las aspiraciones de Endesa e Iberdrola, que mantienen ya negociaciones avanzadas con la compa?¨ªa estatal GECOL (General Electricity Company of Libia) se centran en la construcci¨®n de l¨ªneas de transmisi¨®n y subestaciones el¨¦ctricas.
M¨¢s maduros est¨¢n los proyectos en el sector petrolero. Repsol YPF produce ya actualmente en Libia 200.000 barriles diarios en el campo gigante de El Sharara, y opera tambi¨¦n en otros campos de la cuenca de Murzuq, liderando un consorcio en el que se integran tambi¨¦n la francesa Total, la austriaca OMV y Saga Petroleum, de Noruega. Repsol tiene tambi¨¦n firmados dos contratos de exploraci¨®n con la tambi¨¦n estatal National Oil Company (NOC), y es en esta ¨¢rea de la exploraci¨®n donde se est¨¢n intensificando las negociones para nuevos proyectos.
La exploraci¨®n es tambi¨¦n el foco de inter¨¦s de Gas Natural, sin excluir las posibilidades de participar en proyectos de posibles gasoductos, siguiendo la l¨ªnea marcada por Italia, que tiene un gasoducto directo desde Libia hasta Sicilia.
Con una de las rentas per c¨¢pita m¨¢s altas de ?frica y una producci¨®n de petr¨®leo de 1,5 millones de barriles/d¨ªa, superior a la de Argelia y bastante mayor que la Egipto, Libia importa la mayor parte de sus necesidades de alimentaci¨®n, bienes de consumo, materias primas no energ¨¦ticas, bienes de equipo y material de transporte, las posibilidades de negocio para las empresas espa?olas afectan a casi todos los sectores de actividad, aunque los responsables econ¨®micos del pa¨ªs se mostraron especialmente interesados en el turismo. Libia tiene en marcha un "ambicioso plan de desarrollo tur¨ªstico", afirma Jos¨¦ Garc¨ªa Morales, quien considera que el pa¨ªs magreb¨ª puede comvertirse en "uno de los destinos m¨¢s importantes de sol y playa en el Mediterr¨¢neo, por sus magn¨ªficas playas y su cercan¨ªa a los mercados emisores europeos".
Un grupo de hoteleros espa?oles est¨¢ negociando ya la construcci¨®n de un complejo hotelero en las cercan¨ªas de la capital, Tr¨ªpoli, y el secretario de Estado de Turismo y Comercio avanz¨® durante esta reciente visita las conversaciones para la firma de un Convenio de Cooperaci¨®n Tur¨ªstica en los pr¨®ximos meses.
Sobre la deuda
A nivel pol¨ªtico, las conversaciones mantenidas por Pedro Mej¨ªa con el Gobierno libio se centraron fundamentalmente en solucionar el problema de la deuda hist¨®rica de Libia, derivada del incumplimiento de los acuerdos bilaterales de 1975, y en la firma de un Acuerdo para la Promoci¨®n y Protecci¨®n Rec¨ªproca de Inversiones (APPRI) que garantice la seguridad de las empresas espa?olas.
En el caso del APPRI, las negociaciones podr¨ªan cerrarse en s¨®lo unas semanas, mientras que en el caso de la deuda, que fuentes de la Administraci¨®n espa?ola estiman en 15,4 millones de euros, la propuesta espa?ola es convertirla en inversiones espa?olas en el pa¨ªs, adoptando un mecanismo similar al que se ha formalizado ya con otros pa¨ªses y que ha sido especialmente exitoso con Marruecos.
El Gobierno libio est¨¢ considerando la propuesta y, en cualquier caso, las empresas tienen claro que, como apunta el presidente del Consejo de Promoci¨®n Exterior de CEOE, "el problema de la deuda no debe perjudicar los intereses empresariales espa?oles en Libia". Si esto es as¨ª, "y pensamos que hay buena predisposici¨®n por ambas partes, estamos convencidos de que Libia nos va a dar muchas satisfacciones desde el punto de vista de la exportaci¨®n".
En la actualidad, a pesar de que la Uni¨®n Europea es el primer socio comercial de Libia, especialmente por la presencia italiana, Espa?a es s¨®lo el und¨¦cimo suministrador de este pa¨ªs para el que, por el contrario, Espa?a es su segundo cliente mundial debido a la compra de petr¨®leo que representa el 97% de todas nuestras compras. En 2003, las importaciones espa?olas de Libia se elevaron a 1,808 millones de euros, frente a unas exportaciones de s¨®lo 125 millones de euros, entre las que destacan productos como harina, trigo, veh¨ªculos autom¨®viles y aceites. La tasa de cobertura de apenas el 7% es una de las m¨¢s pobres de toda nuestra balanza comercial.
Unas relaciones conflictivas
Las negociaciones del secretario de Estado de Turismo y Comercio para impulsar la firma de un Acuerdo para la Promoci¨®n y Protecci¨®n Rec¨ªproca de Inversiones y solucionar el contencioso de la deuda, ponen fin a un periodo de 20 a?os de relaciones comerciales "muy conflictivas" entre Espa?a y Libia, consecuencia de los incumplimientos del acuerdo comercial entre Hispanoil y la compa?¨ªa libia BREGA.
Este acuerdo, firmado en octubre de 1975 para la compra de petr¨®leo en r¨¦gimen de cuota, se acompa?aba de un Convenio de Cr¨¦dito Rec¨ªproco por el que el banco magreb¨ª Libyan Arab Foreign Bank conced¨ªa al Instituto de Cr¨¦dito Oficial (ICO) un cr¨¦dito por importe equivalente al 35% del importe del crudo retirado.
Aunque ambos acuerdos fueron renovados en 1981 y 1982, los impagos permanentes por parte de Libia y las condiciones impuestas por el r¨¦gimen de Tr¨ªpoli para la renegociaci¨®n de la cuota, consideradas "inaceptables" por las autoridades espa?olas, obligaron a la denuncia y liquidaci¨®n del Convenido de Cr¨¦dito Rec¨ªproco, dejando as¨ª las relaciones comerciales bilaterales sin ning¨²n soporte jur¨ªdico ni institucional.
El deterioro de las relaciones comerciales, avivado por los impagos de Libia a empresas comerciales y de obras p¨²blicas espa?olas, influy¨® muy negativamente en las cifras de intercambios comerciales, especialmente en las exportaciones espa?olas, que se redujeron dr¨¢sticamente, hasta alcanzar cifras meramente testimoniales.
Los esfuerzos negociadores de los distintos gobiernos espa?oles para solucionar el contencioso fueron intensos y constantes hasta conseguir, en octubre de 1994, un compromiso de las autoridades libias para liquidar su deuda con las constructoras espa?olas en el plazo de tres meses, adem¨¢s de impulsar sus importaciones desde Espa?a para llegar a un m¨ªnimo de 300 millones de d¨®lares al a?o.
El primero de los compromisos sigue sin cumplirse hasta la fecha, mientras que el incremento de las exportaciones espa?olas se mantiene en niveles muy por debajo de las cifras acordadas.
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