El poder hispano en Washington

La primera minor¨ªa en Estados Unidos, la hispana, tiene un peso cada vez mayor en la sociedad estadounidense, porque es la que m¨¢s crece demogr¨¢ficamente y porque, poco a poco, va aumentando su poder pol¨ªtico y econ¨®mico.

La mejor prueba de que el poder latino da pasos serios en el importante escaparate de la visibilidad pol¨ªtica ha sido el nombramiento del primer hispano responsable de la cartera de Justicia, Alberto Gonzales, y la entrada en el Senado, en las elecciones del pasado 2 de noviembre, de dos hispanos, uno de cada partido: Mel Mart¨ªnez, republicano de Florida, y Ken Salazar, dem¨®crata de Colorado. S¨®lo ha habido tres senadores hispanos en la historia de Estados Unidos, pero ninguno en los ¨²ltimos 30 a?os. Y hab¨ªa ministros latinos en Gobiernos anteriores -con Clinton estuvieron Bill Richardson, Henry Cisneros o Federico Pe?a, y con Bush, el propio Mel Mart¨ªnez-, pero ninguno en una posici¨®n tan relevante como Justicia. En la C¨¢mara de Representantes se ha pasado de 25 congresistas hispanos a 29.

La representaci¨®n pol¨ªtica, sin embargo, va muy por detr¨¢s de la demogr¨¢fica. Los hispanos son m¨¢s de 40 millones de personas, el 14% de la poblaci¨®n de EE UU. Aunque en las elecciones de este a?o ha habido un enorme salto adelante en participaci¨®n -de los seis millones que votaron en el a?o 2000 se ha pasado a m¨¢s de nueve millones-, el porcentaje es a¨²n bajo.

Como el potencial de crecimiento es grande, los partidos entienden que cada vez importa m¨¢s. Y no es un electorado cautivo: a pesar de tener una orientaci¨®n tradicionalmente dem¨®crata, los hispanos han votado este a?o a los republicanos como nunca lo hab¨ªan hecho antes. Seg¨²n sondeos hechos a la salida de los colegios electorales, el 44% de hispanos han votado por Bush, que consigui¨® un 34% hace cuatro a?os.

En Estados con resultados ajustados, como Nuevo M¨¦xico, con un 42% de poblaci¨®n hispana, es un voto decisivo. No hay un factor ¨²nico que explique la p¨¦rdida de fuerza de los dem¨®cratas, pero la religi¨®n -las iglesias evang¨¦licas han aumentado notablemente su presencia entre los hispanos- y los asuntos morales y culturales, como la oposici¨®n al aborto y a los matrimonios gays, han jugado un papel muy importante.

Econ¨®micamente, la tendencia es similar. Aunque el ingreso medio familiar en Estados Unidos es de 58.000 d¨®lares anuales, frente a los 44.000 d¨®lares de las familias latinas, la masa de ingresos personales de los hispanos ser¨¢ de 670.000 millones de d¨®lares en el a?o 2010, un incremento del 45% con respecto a las cifras actuales, seg¨²n la organizaci¨®n Conference Board.