El cable se enreda en su fusi¨®n

Auna y Ono han decidido pasar a la acci¨®n. Ambas operadoras de cable quieren protagonizar una fusi¨®n para crear una alternativa a Telef¨®nica a escala nacional, tanto en telefon¨ªa fija, a trav¨¦s del cable, como en la m¨®vil, mediante Amena. El ¨²ltimo intento ha sido la oferta de Auna por Ono, en la que los fondos de inversi¨®n, con el posible respaldo de alg¨²n gran operador europeo, han visto tambi¨¦n negocio.

En esta guerra por crear el segundo operador espa?ol hay, al menos, cuatro protagonistas. Adem¨¢s de las dos empresas objeto de la disputa y los fondos de capital riesgo, est¨¢ tambi¨¦n interesado el Gobierno, que ver¨ªa con buenos ojos una operaci¨®n que abriera m¨¢s el mercado a la competencia. Pese a la liberalizaci¨®n, Telef¨®nica todav¨ªa controla el 80% de la telefon¨ªa fija.

La operaci¨®n servir¨ªa, adem¨¢s, de impulso a un sector, el del cable, muy poco desarrollado en Espa?a y que los t¨¦cnicos consideran la base de la sociedad de la informaci¨®n. El cable espa?ol tiene una penetraci¨®n en el mercado del 11%, muy inferior a la media europea, el 36%.

La guerra no ha hecho m¨¢s que empezar. Ono ha rechazado la oferta presentada por Auna por considerarla insuficiente, hasta el punto de que, en su carta de respuesta, Ono expresa que, de acuerdo a los criterios que se utilizan para valorar la empresa, la propia Ono podr¨ªa adquirir Auna Telecomunicaciones, la divisi¨®n de cable del grupo. Esto se ha interpretado bien como una invitaci¨®n a que Auna venda, bien como un gui?o a una posible fusi¨®n.

El enredo es a¨²n mayor si se tienen en cuenta los intereses de los accionistas de uno y otro grupo. En este sentido, hay que destacar la neutralidad que ha mostrado el grupo Santander, con importantes participaciones tanto en Auna, que adem¨¢s gestiona, como en Ono.

El siguiente episodio de esta batalla pasa porque Auna eleve su oferta por Ono, o bien por que los fondos aumenten la suya por Auna. Los bancos est¨¢n dispuestos a financiar cualquier operaci¨®n.