Una exposici¨®n sintetiza la relaci¨®n creativa entre Oteiza y S¨¢enz de Oiza

Jorge Oteiza y el arquitecto Francisco Javier S¨¢enz de Oiza coincidieron en la reconstrucci¨®n de la bas¨ªlica de Ar¨¢nzazu en los cincuenta, se hicieron amigos e iniciaron una relaci¨®n laboral que culmin¨® con la conversi¨®n en museo de la casa-taller del escultor en Alzuza. Una exposici¨®n recrea ahora en la casa de cultura Okendo de San Sebasti¨¢n esos dos momentos clave de su di¨¢logo art¨ªstico, a trav¨¦s de planos, maquetas, citas y esculturas.

Oiza, Oteiza. L¨ªnea de defensa en Alzuza, coproducida por los colegios de arquitectos catal¨¢n y vasco navarro, es una exposici¨®n sobre la relaci¨®n entre los dos artistas que sit¨²a a Oteiza "en su paisaje geogr¨¢fico e hist¨®rico, actual y m¨ªtico, personal y colectivo" y propone nuevas teor¨ªas sobre algunos de los momentos m¨¢s pol¨¦micos de su trayectoria.

Sus comisarios Josep Quetglas, Guillermo Zuaznabar y Fernando Marz¨¢, sostienen, contra la versi¨®n oficial, que la paralizaci¨®n de la intervenci¨®n del escultor oriotarra en la bas¨ªlica de Ar¨¢nzazu -sus famosos ap¨®stoles- no se debi¨® al veto de las autoridades eclesi¨¢sticas. "Esa interpretaci¨®n no se sostiene, basta pasar a limpio los documentos", dijo ayer Zuaznabar. Hab¨ªa detr¨¢s, a?aden, motivos pol¨ªticos, que cobraron peso cuando se public¨® el texto Memoria y protesta con el que Oteiza acompa?¨® su proyecto Monumento al prisionero pol¨ªtico desconocido. En uno de los paneles de la exposici¨®n, los comisarios apuntan que, en 1954, "s¨®lo las puertas dise?adas por el hijo del comandante y juez instructor se?or don Pedro Chillida Aranburu, tambi¨¦n escultor, se colocan sin novedad".

La muestra, abierta hasta el 5 de marzo, presenta dos esculturas de Jorge Oteiza -Burua (1953), en bronce, y Retrato de un gudari armado llamado Odiseo (1975), en hierro rojo-, adem¨¢s de fotograf¨ªas, croquis, reproducciones de planos o maquetas del proyecto arquitect¨®nico de la bas¨ªlica y escult¨®rico del friso, as¨ª como del proceso de conversi¨®n de la casa-taller de Oteiza en el actual museo. "Hacer una arquitectura para el presente es hacerla para el nunca jam¨¢s, porque el presente no tiene existencia, ni grosor ni duraci¨®n", escribi¨® el arquitecto. Es una de las citas que se recogen en esta muestra con m¨²sica de Mikel Azpiroz y varios audiovisuales.