La gran juerga de Ronnie y Motta
Los dos brasile?os fueron las estrellas del festivo regreso de Valencia, repleto de bromas, c¨¢nticos, cerveza y cava
No hab¨ªa pitado Undiano Mallenco el final del partido cuando Ronaldinho decidi¨® que la fiesta pod¨ªa empezar. Saltaba el gaucho golpeando con rabia el aire con el pu?o cerrado mientras Rijkaard y el resto de los inquilinos del banquillo se enlazaban hombro con hombro, rodeados por cientos de periodistas. Sopl¨® su silbato el trencilla y la felicidad se desparram¨® sobre el c¨¦sped de un campo que ya forma parte de la historia del barcelonismo. Faltaban once minutos para la medianoche; Ronaldinho se abrazaba a Motta, Oleguer a Puyol, Xavi encontr¨® una senyera estelada y ya no se separ¨® de ella, y Laporta los miraba emocionado desde el palco. 2184 dias de penurias hab¨ªan llegado a su fin y el Bar?a era campe¨®n de Liga.
Si alguien necesitara un d¨ªa explicarle a un marciano qu¨¦ es la felicidad, bastar¨ªa que Ludovic Giuly le dejara el v¨ªdeo que grab¨® con su c¨¢mara en el vestuario visitante del Ciutat de Valencia y viera en acci¨®n a dos tipos vestidos con una camiseta color chino, uno con el 3 a las espalda, el otro con el 10. Incluso Eto'o, especialmente activo en el incicio de la celebraci¨®n al duchar a cuantos vestidos con traje y corbata entraron en el vestuario, tuvo tiempo para cambiar su ropa de partido por la de viaje. Ellos, Motta y Ronaldinho, no. Cuando Carlos Naval grit¨® "nos vamos", no se hab¨ªan quitado ni las botas. Y as¨ª se fueron al aeropuerto, donde les esperaba un enorme airbus 340, avi¨®n usado normalmente para vuelos largos.
Ocuparon directivos y sus acompa?antes los asientos de primera clase del avi¨®n. En la zona siguiente, sentados los entrenadores en primera fila, el clan brasile?o -escoltado por un activo Vald¨¦s- lideraba la celebraci¨®n. Motta, que no pudo contener las l¨¢grimas al abrazarse en el campo a Paco Seirul.lo, preparador f¨ªsico del equipo, y Ronaldinho, que ya llevaba una corbata -"robada a no s¨¦ quien"- anudada en su cabeza junto a una bandera azulgrana, cantaban a quienes entraron en el avi¨®n: "Pasa, pasa pasa, pasa para atr¨¢s, pasa, pasa, pasa y no vuelvas m¨¢s". Incierto el origen de la canci¨®n, hay quien asegura que va dedicada a los equipos que el Bar?a ha dejado a su espalda y, especialmente, al Real Madrid.
"Madrid, cabr¨®n, saluda al campe¨®n", se escuch¨® con fuerza dentro del vestuario y t¨ªmidamente, iniciado por Eto'o y Ronaldinho, durante el vuelo. El alir¨®n se cant¨® con letras bien dispares sobrevolando el litoral mediterr¨¢neo de Valencia a Barcelona. Entre los directivos, lider¨® el hit-parade el tradicional "visca el Bar?a y visca Catalunya"; Vald¨¦s, Xavi y Gerard se acordaron de Oleguer -"solidario, reparte tu salario" y "Oleguer, alcalde de Sabadell" le cantaron- mientras vestido a¨²n de futbolista, pero ya sin botas de tacos, Ronaldinho, junto a Motta y con la ayuda de Vald¨¦s, intentaron afeitar el bigote de Chema Corbella, el utillero. Tampoco faltaron mofas a Ten Cate, el ayudante de Rijkaard. Ambos brindaron con cerveza mientras el cava se desparramaba a su alrededor: "Es una g¨¹erra, esto es una g¨¹erra", se mofaron a costa de su castellano y de una de sus m¨¢s c¨¦lebres frases.
Del Prat al Camp Nou sigui¨® la fiesta en un autob¨²s descubierto, camino que Rijkaard prefiri¨® realizar en la parte baja, solo y a oscuras. A las 05.30 h., ya en el Estadi, Ronaldinho que segu¨ªa vestido de futbolista, se abraz¨® a Laporta, el presidente, antes de pasar por la ducha. Al presidente se le vio especialmente emocionado tras abrazarse a Albert Perrin, viejo compa?ero en la lucha por cambiar el Bar?a, en una noche que no tuvo final y en la que Txiki Begiristain, aclamado por los aficionados, vivi¨® como aturdido por la alegr¨ªa.
La llegada de la expedici¨®n azulgrana a su regreso de Valencia signific¨® una explosi¨®n multitudinaria de j¨²bilo. La algarab¨ªa y los v¨ªtores a los nuevos campeones de Liga se prolongaron a lo largo de toda la noche y en toda la ciudad. Pero hubo dos epicentros, la tradicional concentraci¨®n en la fuente de Canaletas, en la Rambla, que se efect¨²a despu¨¦s de cada triunfo significativo del club azulgrana, y el aeropuerto de El Prat. En Canaletas se congregaron alrededor de 40.000 aficionados, seg¨²n inform¨® la Guardia Urbana. En Canaletas, la aglomeraci¨®n de gente fue tal que la Guardia Urbana cort¨® el tr¨¢nsito rodado en algunas de las calles adyacentes por las que circulaban miles de veh¨ªculos tocando las bocinas y repletos de seguidores ansiosos de llegar al centro.
La madrugada se sald¨® con cuatro j¨®venes detenidos, ocho heridos, tres de ellos por arma blanca, y doce contenedores quemados. Cuatro j¨®venes, uno de ellos menor de edad, fueron detenidos por da?os y atentado a la autoridad, mientras que tres personas que festejaban el triunfo liguero en V¨ªa Laietana resultaron heridas por arma blanca en una reyerta, seg¨²n inform¨® la Jefatura Superior de Polic¨ªa.
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