El IRA deja las armas, pero no se disuelve
Blair da la bienvenida a "un paso de una magnitud sin precedentes en Irlanda del Norte"
El Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s (IRA) dio ayer un paso "potencialmente hist¨®rico", como lo defini¨® prudentemente la Casa Blanca, al anunciar el abandono de las armas y respaldar el proceso pol¨ªtico como camino para alcanzar su objetivo de la unidad de Irlanda. La declaraci¨®n del Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s, publicada a media ma?ana de ayer y le¨ªda luego ante una c¨¢mara por uno de sus miembros hist¨®ricos, abre las puertas a la definitiva consolidaci¨®n de la paz en el Ulster. Pero las continuas decepciones que han seguido a anteriores declaraciones de los republicanos norirlandeses hicieron que hubiera prudencia y s¨®lo contenida euforia en Belfast, Londres, Dubl¨ªn y Washington.
El anuncio, que rompe casi tres a?os de bloqueo pol¨ªtico del Proceso de Paz, significa el abandono del terrorismo por parte del IRA (Provisional), el grupo que tom¨® las armas hace 36 a?os, despu¨¦s de que el IRA (Oficial), fundado en los a?os 20 del siglo pasado, abrazara a su vez el proceso pol¨ªtico.
El texto del IRA "ordena formalmente el final de la campa?a armada" desde las cuatro de la tarde de ayer (las cinco en la Espa?a peninsular). "Todas las unidades del IRA han recibido la orden de dejar las armas" y sus voluntarios han sido instruidos para luchar por sus objetivos mediante "programas democr¨¢ticos y medios exclusivamente pac¨ªficos". El texto apoya sin ambages la estrategia pol¨ªtica del Sinn Fein, brazo pol¨ªtico de los republicanos, y la aplicaci¨®n de los acuerdos de paz de Viernes Santo de 1998, al tiempo que reitera "la total legitimidad" que hasta ahora ha tenido "la lucha armada", aunque reconoce que "mucha gente ha sufrido en este conflicto". El IRA, precisa, est¨¢ comprometida con los objetivos de "la independencia y la unidad del pueblo de Irlanda".
La declaraci¨®n se esperaba desde que en abril pasado, en v¨ªsperas de las elecciones generales brit¨¢nicas, Gerry Adams, presidente del Sinn Fein, pidiera al IRA que abandonara las armas y abrazara el proceso pol¨ªtico. Su petici¨®n era consecuencia no s¨®lo del bloqueo de la autonom¨ªa de Irlanda del Norte, que est¨¢ suspendida desde septiembre de 2002, sino del creciente aislamiento de los republicanos despu¨¦s de que el IRA llevara a cabo el espectacular robo de un banco en v¨ªsperas de la pasada Navidad y de que varios de sus miembros se vieran implicados en el asesinato de Robert McCartney, lo que provoc¨® un gran movimiento de protesta liderado por las hermanas de este camionero cat¨®lico, simpatizante del Sinn Fein.
El IRA se ha tomado tres meses para contestar, pero lo ha hecho en la forma en que se esperaba: renunciando a la lucha armada aunque sin disolverse y sin pedir perd¨®n por los m¨¢s de 1.800 asesinatos que se le asignan en una guerra sectaria que ha costado m¨¢s de 3.000 vidas. En estos momentos est¨¢ a¨²n en el aire el momento y forma en que se llevar¨¢ a cabo el anunciado desarme y qu¨¦ visibilidad tendr¨¢. El IRA dice en su comunicado que ha "invitado a dos testigos independientes, de las iglesias protestante y cat¨®lica", para que sirvan de testigos. Se unir¨¢n as¨ª a los inspectores internacionales independientes.
Tanto el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, como su hom¨®logo irland¨¦s, Bertie Ahern, expresaron la necesidad de que ese desarme se produzca cuanto antes. En una declaraci¨®n conjunta, ambos Gobiernos subrayan que "si las palabras del IRA van acompa?adas de hechos, estamos ante un acontecimiento hist¨®rico". "La verificaci¨®n de los actos de desarme deben proveer el contexto necesario para permitir que todos los partidos puedan trabajar para conseguir la plena puesta en marcha de las instituciones pol¨ªticas, incluyendo la Asamblea de Irlanda del Norte y su Ejecutivo, en cuanto sea posible".
"Tambi¨¦n esperamos que todos los partidos y l¨ªderes comunitarios utilicen su influencia para forzar el fin de toda actividad paramilitar y criminal lealista, incluyendo el decomiso de todas las armas", a?ade la declaraci¨®n. Y enfatiza que "la normalizaci¨®n de la sociedad requiere que todas las partes de la comunidad apoyen y reciban protecci¨®n de la polic¨ªa". Los principales grupos paramilitares protestantes -la Asociaci¨®n para la Defensa del Ulster (UDA) y la Fuerza de Voluntarios del Ulster (UVF)- descartaron ayer desarmarse de inmediato, informa Efe.
En una breve declaraci¨®n le¨ªda en Downing Street, Blair combin¨® cautela y euforia. Cautela al arrancar con un as¨¦ptico "doy la bienvenida a la declaraci¨®n del IRA", recordar que el desarme a¨²n no se ha producido y admitir que har¨¢ falta tiempo para restablecer la autonom¨ªa. Euforia al definir la declaraci¨®n como "un paso de magnitud sin precedente en la reciente historia de Irlanda del Norte".
La cautela presidi¨® la reacci¨®n de la Casa Blanca, que ha jugado hist¨®ricamente -m¨¢s en tiempos de Bill Clinton que con George W. Bush- un papel decisivo en el impulso del proceso de paz. "Esta declaraci¨®n es muy alentadora y potencialmente hist¨®rica y necesitamos esperar y ver si esas palabras se transforman en hechos", dijo Mitchel Reiss, enviado especial del presidente Bush a Irlanda del Norte.
En Dubl¨ªn, Gerry Adams ret¨® a los unionistas a "no poner excusas para no comprometerse en el proceso pol¨ªtico" y asegur¨® que la declaraci¨®n supone "un reto" al partido del reverendo Ian Paisley, mayoritario entre los protestantes, que se niega a formar Gobierno con el Sinn Fein si el IRA no pone fuera de uso todo su arsenal. "La lucha nacional puede tener diferentes fases. Hay un tiempo para resistir, para levantarse y confrontar al enemigo hasta con armas. En otras palabras, hay un tiempo para la guerra. Hay tambi¨¦n un tiempo para el compromiso, para dejar atr¨¢s la guerra. Hay un tiempo para la justicia, para reconstruir. Ese tiempo es ahora, el de los constructores de la naci¨®n", proclam¨®.
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