Sindicato, gestor¨ªa, comisar¨ªa, oficina de alquileres...

La primera delegaci¨®n del Sindicato Obrero del Campo (SOC) que se abri¨® en Almer¨ªa fue en noviembre del a?o 2000, tras los sucesos racistas ocurridos en febrero en el municipio almeriense de El Ejido. "Surge despu¨¦s de los disturbios en El Ejido cuando los representantes de los inmigrantes deciden que tiene que haber un sindicato favorable a los trabajadores, que por encima del hecho de ser inmigrantes se consideran jornaleros. Muchos de ellos llevan 15 o 20 a?os en Espa?a", explica Gabriel Ataya, portavoz del sindicato en Almer¨ªa.

El SOC-Almer¨ªa cuenta con m¨¢s de 600 afiliados, y s¨®lo seis son espa?oles. Marruecos, con un 60%, y Senegal, con un 20%, son las nacionalidades predominantes entre sus afiliados, seguida en menor proporci¨®n por rumanos, malienses o guineanos.

La organizaci¨®n tiene como principal objetivo informar al ciudadano extranjero sobre temas relacionados con los procesos de regularizaci¨®n, documentaci¨®n a tramitar, convenio laboral de la agricultura, afiliaci¨®n, cursos, homologaci¨®n de diplomas y t¨ªtulos o acceso a estudios, am¨¦n de tener como m¨¢xima el procurar la integraci¨®n del inmigrante "con la participaci¨®n".

Muchos de los extranjeros que acuden a la sede del sindicato solicitan tambi¨¦n gestiones para conseguir alquileres de vivienda o, sencillamente, trabajo. "Para la vivienda intentamos gestionarlo a trav¨¦s de conocidos. Respecto al trabajo, a veces lo intentamos. Ni COAG, ni ASAJA ni el propio Gobierno nos remite informaci¨®n sobre las ofertas de empleo existentes en el campo almeriense, como s¨ª hacen con otros sindicatos. No nos enteramos de cu¨¢ndo falta mano de obra en Ja¨¦n o Huelva, por poner dos ejemplos", expone el portavoz sindical. Pero si por algo se ha dado a conocer este sindicato en la provincia almeriense durante los ¨²ltimos a?os ha sido por la denuncia constante y sin paliativos que ha venido realizando relacionada con las agresiones, m¨¢s o menos organizadas, a extranjeros por parte de la poblaci¨®n nativa. El ¨²ltimo caso tuvo lugar hace tan s¨®lo 10 d¨ªas, cuando el SOC denunci¨® tres palizas cometidas en diferentes fechas durante 2005 y que a¨²n estaban sin resolver policialmente. "Aqu¨ª hay dos posturas: callar y tener todo lo que quieras o defender a los trabajadores. Y nosotros tenemos las cosas muy claras: los trabajadores son lo primero", enfatiza Ataya.

Tambi¨¦n son muchos los que acuden ¨²nicamente a poner denuncias por despido o por impago de salarios. El abogado que trabaja con la organizaci¨®n, Jos¨¦ Mar¨ªa Daroca, lleva unas 20 denuncias sobre reclamaciones salariales.

Las relaciones que el sindicato mantiene con las diferentes administraciones no exceden m¨¢s all¨¢ de lo "pol¨ªticamente correcto", si bien la organizaci¨®n percibe m¨¢s sensibilidad en ciertos organismos. "El Ayuntamiento de La Mojonera es el que mejor nos trata. Si necesitamos alg¨²n local para alguna reuni¨®n nos lo cede sin problema. En N¨ªjar, hacemos lo mismo y nada", describe el portavoz.

El SOC-Almer¨ªa inaugurar¨¢ el pr¨®ximo 2 de diciembre un nuevo local en el municipio de El Ejido, dentro de sus jornadas anuales en torno a la inmigraci¨®n que este a?o estar¨¢n dedicadas al sindicalismo sin exclusiones.