El socio m¨¢s sigiloso de F¨®rum ?frica
El traficante de armas ucranio relacionado con la filat¨¦lica tiene cinco pasaportes, gasta en drogas y prostituci¨®n y ha vivido cinco a?os en Ibiza
Mientras unos 350.000 espa?oles depositaban cada a?o sus ahorros en F¨®rum Filat¨¦lico, el presidente de esta compa?¨ªa y de F¨®rum ?frica, Jes¨²s Fern¨¢ndez Prada, ya fallecido, firmaba un contrato en 2001 por valor de cinco millones de d¨®lares (650 millones de las pesetas de entonces) con quien est¨¢ considerado por la ONU como uno de los mayores traficantes de armas del mundo: el ucranio Leonid Minim, de 59 a?os, residente en Ibiza en la d¨¦cada de los noventa.
El dictador liberiano Charles Taylor (1997-2003), preso en Sierra Leona desde marzo, a disposici¨®n del Tribunal Especial de Naciones Unidas, consegu¨ªa as¨ª fortuna a cambio de expoliar los bosques de su pa¨ªs. Dinero que le serv¨ªa para financiar guerras. El presidente de F¨®rum ?frica consegu¨ªa una madera que despu¨¦s revend¨ªa a empresarios espa?oles. Y el traficante Minim amasaba d¨®lares y diamantes a costa de clientes como Taylor y F¨®rum ?frica.
Minim pas¨® un a?o en prisi¨®n en Italia por sus negocios en Liberia; hoy est¨¢ libre
Aparte de la droga y la prostituci¨®n, Minim se conced¨ªa otros caprichos nada baratos
En su habitaci¨®n ten¨ªa 150.000 d¨®lares, coca¨ªna, diamantes y 1.500 documentos
Leonid Minim ha sido un hombre lo suficientemente h¨¢bil como para vivir cinco a?os en Ibiza sin apenas dejar rastro. Pose¨ªa una compa?¨ªa inmobiliaria, San Francisco Paradise, de la que no consta ni el n¨²mero de tel¨¦fono en el registro mercantil.
La discreci¨®n ha sido una de las principales caracter¨ªsticas de Minim. Muy pronto se dio cuenta de que si quer¨ªa moverse con sigilo por el mundo iba a necesitar varios pasaportes. Se vali¨® de su origen jud¨ªo para viajar en los a?os setenta a Israel. Pero de su paso por all¨ª no queda rastro. "Nunca ha hecho negocios con empresas israel¨ªes que se dedican a la exportaci¨®n de armas", asegura Yossi Melman, especialista en el tema desde hace 20 a?os. "El Ministerio de Defensa", a?ade, "cuenta con un departamento, Sibat, que se encarga de autorizar las ventas. Si un traficante quiere exportar armas israel¨ªes, o que est¨¢n en poder del Ej¨¦rcito pero que ya son obsoletas, necesita obtener la licencia del Sibat. Minim nunca la solicit¨®".
No obstante, Minim consigui¨® el pasaporte israel¨ª. El Estado hebreo, obsesionado con la demograf¨ªa -el ¨ªndice de natalidad de los palestinos es muy superior-, alienta la inmigraci¨®n y allana todas las piedras del camino para que los jud¨ªos se embarquen en la Aliya, el viaje a Israel para fijar la residencia en este pa¨ªs.
Adem¨¢s del pasaporte ucranio y el de Israel, contaba con uno de Alemania, otro boliviano y uno ruso. Levantaba poco polvo por donde pasaba. Era un perfecto desconocido en la mayor parte del mundo. Y pretend¨ªa seguir si¨¦ndolo. Cuando lo detuvieron en 2001 se encontraba en Cinisello Balsamo, un peque?o pueblo al norte de Mil¨¢n, que no suele ser objetivo ni de turistas, ni de mafiosos, ni traficantes de armas. ?se fue el pueblo que eligi¨® Minim para hacerse propietario de un peque?o hotel -el Europa- y vivir a sus anchas en la habitaci¨®n 341 alejado de los focos y los periodistas.
No era amigo de la buena mesa. Se conformaba con platos ucranios hechos con calabaza, zanahoria y patatas. Pero lo que no gastaba en placeres culinarios lo dilapidaba en droga y sexo. A las tres de la madrugada del s¨¢bado 5 de agosto de 2000 la polic¨ªa entr¨® en la habitaci¨®n 341. Sobre ¨¦l pesaba la acusaci¨®n de haber violado el embargo de armas sobre Liberia decretado por la ONU y haber enviado 68 toneladas de armas desde Ucrania.
Lo encontraron rodeado de dos (algunas fuentes hablan de cuatro) prostitutas desnudas. Los agentes tuvieron que buscar poco para encontrar 150.000 d¨®lares, 58 gramos de coca¨ªna y diamantes por valor de medio mill¨®n de d¨®lares y 1.500 documentos relativos a negocios de diamantes, madera, petr¨®leo, obras de arte...
Entre los miles de papeles la polic¨ªa italiana encontr¨® uno con fecha del 24 de diciembre de 1999 en el que se pod¨ªa seguir la oscura senda que uni¨® al dictador de Liberia, Charles Taylor, y a los responsables de la empresa espa?ola F¨®rum Filat¨¦lico. Un mes antes de que la polic¨ªa entrara en el hotel Europa, Miguel ?ngel Soto, de Greenpeace, ya hab¨ªa alertado en Espa?a sobre los v¨ªnculos de F¨®rum ?frica con Leonid Minim.
"En el mismo periodo 2000- 2003 en el que se acumulaban las evidencias de la implicaci¨®n de la industria forestal liberiana con el tr¨¢fico de armas, los empresarios espa?oles de la madera incrementaron a?o a a?o sus compras de esta mercanc¨ªa te?ida de sangre", recuerda Soto.
Aparte de la droga y la prostituci¨®n, Minim se conced¨ªa otros caprichos nada baratos. Sus viajes desde Ibiza a Ucrania o Sierra Leona a menudo los emprend¨ªa en un avi¨®n privado de marca BAC-111 valorado en dos millones de d¨®lares. El aparato hab¨ªa pertenecido antes al equipo de la NBA Seattle Supersonics. Cuando Minim cedi¨® el aparato a Charles Taylor en 1998 para que lo usara como avi¨®n presidencial, a¨²n llevaba pintada la insignia del equipo en la cola, seg¨²n public¨® la revista The Washington Monthly en 2001. Esa misma aeronave, seg¨²n los informes de la ONU, parti¨® cargada de armas el 8 de marzo de 1999 desde Ibiza a la ciudad de Robertsfield, en Liberia.
Minim se encontraba por aquella ¨¦poca en pleno esplendor de su carrera. Atr¨¢s quedaron los primeros a?os de la d¨¦cada de los noventa cuando, aprovechando la ca¨ªda de los reg¨ªmenes comunistas, comenz¨® a exportar petr¨®leo de la Uni¨®n Sovi¨¦tica. Despu¨¦s, en 1993, se instal¨® en Italia y abri¨® oficinas dedicadas a la compraventa de madera en Suiza, Liberia e Israel. En 1998, cuando se afinc¨® en Ibiza, ya era uno de los mayores traficantes de armas en el mundo.
A Monrovia, capital de Liberia, llegaba acompa?ado de tres escoltas y sol¨ªa contratar los servicios de prostitutas locales. Las personas que lo conocieron desde sus primeros viajes a ese pa¨ªs africano notaron en ¨¦l un declive ps¨ªquico a causa de la coca, seg¨²n informaciones recabadas por el diputado canadiense John Manley en julio de 2001. Un testigo que tuvo cierto trato con Minim declar¨® a Manley que el traficante se hab¨ªa vuelto "incoherente y est¨²pido" a causa de la droga.
Por m¨¢s empe?o que pusiera en moverse con discreci¨®n, tras conocer a tanta gente en tantos pa¨ªses, alguna vez alguien podr¨ªa jugarle una mala pasada. Y ocurri¨® en Italia. Una prostituta a la que Leonid no hab¨ªa pagado lo delat¨®. Y as¨ª pudo entrar la polic¨ªa en la habitaci¨®n 341.
Los actuales empleados del hotel Europa aseguran que no saben nada de Minim. "Este hotel cambi¨® de due?o hace a?os. No sabemos nada de ¨¦l", aseguran.
La polic¨ªa espa?ola tampoco sabe nada de ¨¦l. El 17 de septiembre de 2002 el Tribunal Supremo italiano declar¨® que no pod¨ªa actuar contra Leonid Minim -"aun cuando el tr¨¢fico de armas haya violado el embargo establecido en virtud de una resoluci¨®n de las Naciones Unidas"- porque no amenazaba "la seguridad interna" de Italia. Minim pas¨® s¨®lo un a?o en la c¨¢rcel. Y ahora es un hombre libre.
Con informaci¨®n de Juan Miguel Mu?oz, desde Jerusal¨¦n.
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