Rice vuelve a Israel para negociar una tregua

Tendr¨¢ que echar el resto la secretaria de Estado de EE UU, Condoleezza Rice, que aterriz¨® ayer en Tel Aviv por segunda vez en una semana. Se reuni¨® inmediatamente en Jerusal¨¦n con el primer ministro, Ehud Olmert, para forjar un acuerdo entre Israel y L¨ªbano. La meta es que ambos pa¨ªses respalden una resoluci¨®n de Naciones Unidas que permita poner fin al sangriento conflicto y desplegar una fuerza internacional de 15.000 o 20.000 soldados en el sur de L¨ªbano, cuya composici¨®n se discutir¨¢ ma?ana en Nueva York, para impedir los ataques de Hezbol¨¢. El panorama diplom¨¢tico est¨¢ plagado de minas. "La negociaci¨®n ser¨¢ dif¨ªcil. Habr¨¢ que dar y recibir", comento Rice.

La jefa de la diplomacia estadounidense se juega buena parte de su prestigio. El martes pasado declar¨® que s¨®lo volver¨ªa a Oriente Pr¨®ximo en el momento en que se pudiera pactar una "soluci¨®n duradera". Pero la situaci¨®n est¨¢ empantanada y la firmeza de Hezbol¨¢ hace dif¨ªcil ver la salida del t¨²nel. Rice apunt¨® su esperanza en que los requisitos b¨¢sicos del acuerdo puedan estar dise?ados el martes. "Son decisiones duras en circunstancias complicadas, pero asumo que el liderazgo en ambas partes desea llegar al final", subray¨® Rice. Los dirigentes libaneses, y tambi¨¦n los israel¨ªes, van a tener que soportar la presi¨®n de la diplom¨¢tica estadounidense.

En la madrugada del viernes, el Gobierno liban¨¦s acord¨® con Hezbol¨¢ un plan para el alto el fuego. Es s¨®lo un comienzo, porque los detalles anunciados suponen m¨ªnimas concesiones de la guerrilla. La propuesta prev¨¦ la liberaci¨®n de los dos soldados capturados a cambio de los prisioneros libaneses encarcelados en Israel; el retorno de los desplazados a sus lugares de origen; negociaciones entre el Estado hebreo y L¨ªbano sobre las granjas de Chebaa, ocupadas por Israel y reclamadas por L¨ªbano; la entrega de los mapas para desactivar las minas colocadas por el Ej¨¦rcito israel¨ª en territorio del pa¨ªs ¨¢rabe y el despliegue del Ej¨¦rcito liban¨¦s, al tiempo que se refuerza a los cascos azules en la zona. Aunque el acuerdo de Beirut no dice una palabra sobre el desarme de Hezbol¨¢ -exigida por la resoluci¨®n 1559 de la ONU- Rice se?al¨® en el avi¨®n que le conduc¨ªa a Tel Aviv que esta iniciativa contiene "muy buenos elementos".

Para Tel Aviv, sin embargo, semejante propuesta es inaceptable en la gran mayor¨ªa de sus postulados. El Gobierno de Ehud Olmert rechaz¨® tajantemente negociar con Hezbol¨¢. Ceder, aunque s¨®lo fuera en alguno de esos puntos, equivaldr¨ªa a una derrota que no puede permitirse. Con todo, alguna concesi¨®n se empieza a atisbar. Un portavoz del Ministerio de Exteriores citado por Reuters afirm¨® que Israel no exige el desarme de Hezbol¨¢ para poner punto final a la presente crisis y que esa ser¨¢ una misi¨®n de la futura fuerza internacional que se desplegar¨¢ en la zona si se alcanza un acuerdo en Naciones Unidas. Una declaraci¨®n en las ant¨ªpodas de lo expuesto por el Estado Mayor israel¨ª y el Gobierno en los primeros d¨ªas del conflicto armado.

Quien no parece dispuesto a hacer demasiadas concesiones es el l¨ªder de Hezbol¨¢, Has¨¢n Nasral¨¢. Advirti¨® ayer que sus milicianos alcanzar¨¢n en d¨ªas venideros el centro de Israel con cohetes de mayor potencia que los Katiusha. Ya lo consiguieron anteayer. Y las dos ocasiones en que Nasral¨¢ ha lanzado este tipo de amenazas durante el conflicto ha cumplido su palabra. "El ataque del viernes sobre Afula es s¨®lo el principio si no cesa el salvaje bombardeo de nuestro pa¨ªs y nuestra poblaci¨®n", dijo.

El parte de guerra no var¨ªa apenas desde el 12 de julio. La aviaci¨®n israel¨ª bombarde¨® Nabatiye, una ciudad del sur liban¨¦s, y mat¨® a ocho personas, entre ellas una mujer y sus seis hijos. Otras seis personas murieron en una aldea en la misma regi¨®n. Tambi¨¦n fueron heridos dos observadores de la ONU y alcanzados objetivos en la frontera sirio-libanesa, que fue cerrada. Paralelamente en Nablus, al norte de Cisjordania, los soldados israel¨ªes mataron a Hani Awijan, jefe militar de la Yihad Isl¨¢mica.

Los soldados hebreos se retiraron de Bint Yebel, capital de la milicia islamista en la zona fronteriza, despu¨¦s de varios d¨ªas de batalla y de que los portavoces militares anunciaran dos veces que la ciudad hab¨ªa ca¨ªdo. No obstante, el Ej¨¦rcito acumulaba anoche tanques y tropas en Metula, el pueblo de Israel situado m¨¢s al norte.