Un millar de incendios calcina en nueve d¨ªas parte de Pontevedra y del sur de A Coru?a

S¨®lo cuatro a?os despu¨¦s del Prestige, Galicia se enfrenta a otra cat¨¢strofe ambiental con consecuencias sociales y econ¨®micas a¨²n dif¨ªciles de evaluar. Desde el pasado d¨ªa 4, m¨¢s de un millar de incendios han llevado la devastaci¨®n a toda la provincia de Pontevedra y al sur de A Coru?a, las zonas donde se concentra la mitad de la poblaci¨®n y una parte considerable de la actividad productiva de la comunidad. La Xunta de Galicia dice no estar en disposici¨®n de evaluar la magnitud del ¨¢rea calcinada, aunque reconoce que son "varias decenas de miles de hect¨¢reas".

Ayer se registr¨® la cuarta v¨ªctima mortal de la ola de incendios que arrasa parte de Galicia. Se trata de G. V. P., de 70 a?os y vecino de A Ca?iza (Pontevedra), que falleci¨® ayer en un hospital de Vigo a consecuencia de las quemaduras de tercer grado que sufri¨® el martes en uno de los incendios que azotan Galicia.

"Esto no se hab¨ªa visto nunca". La frase se ha o¨ªdo cientos de veces, repetida por los miembros de las cuadrillas de extinci¨®n de incendios, por los aterrorizados ancianos de las zonas rurales o por los habitantes de las ciudades y las villas de la costa que viven bajo un aire espectral de humo y cenizas.

"Ha habido a?os con m¨¢s superficie quemada, pero lo que no se hab¨ªa producido nunca es tal concentraci¨®n de incendios en tan pocos d¨ªas y tan pr¨®ximos a las zonas urbanas", explica el soci¨®logo de la Universidad de A Coru?a Ant¨®n ?lvarez Sousa.

La descomunal oleada de fuegos comenz¨® con una tragedia: la muerte de dos mujeres atrapadas por las llamas en su coche, en una carretera de Cerdedo (Pontevedra), el viernes d¨ªa 4. Ocho d¨ªas despu¨¦s, ramificaciones de ese incendio -que tambi¨¦n mat¨® a un hombre-, siguen activas como un testimonio de la magnitud del desastre.

Desde Cerdedo, las llamas se extendieron m¨¢s de 30 kil¨®metros en varias ramificaciones hacia el sur, hasta alcanzar las puertas de la ciudad de Pontevedra. El fuego ha matado reses, destruido petroglifos prehist¨®ricos, hecho escapar a cientos de turistas de las R¨ªas Baixas y hasta prendi¨® en una isla, la de Arousa.

Destrozos enormes

En A Coru?a, el fuego se ha concentrado en el sur, centro y en las cercan¨ªas de Santiago. Los destrozos son enormes en la pen¨ªnsula de Barbanza y la ribera norte de la r¨ªa de Arousa, una zona densamente poblada en la que el fuego ha calcinado bosques, vides y cultivos y se devastado la masa forestal de un municipio entero, el de Rianxo. La Costa da Morte, epicentro de la marea negra de 2002, tard¨® en ser alcanzada, pero tambi¨¦n arde desde hace tres d¨ªas. Santiago, donde el fuego lleg¨® al l¨ªmite del casco urbano, segu¨ªa ayer como hace una semana, con las sirenas de los bomberos pululando a cada rato.

La Xunta alega que la proliferaci¨®n de fuegos no le permite por ahora calcular con exactitud las cifras del desastre. El PP asegura que son 50.000 las hect¨¢reas de monte en cenizas. "Nadie lo puede saber, aunque sumar¨¢n varias decenas de miles", asegura el consejero de Medio Rural, Alfredo Su¨¢rez Canal.

Ya hay sectores econ¨®micos directamente afectados, como el tur¨ªstico o el del transporte y las comunicaciones. Los cortes de carretera han sido constantes, y la autopista de conexi¨®n interna de la comunidad -en la que se han sucedido momentos de p¨¢nico- lleva cuatro d¨ªas libre de peaje. Con jornadas de hasta 150 incendios, los servicios de la Xunta se colapsaron y miles de personas han tenido que salir ellos mismos a defender sus casas. Ahora. en Galicia est¨¢n concentrados la mitad de los medios antiincendios de la Administraci¨®n central y el Ej¨¦rcito ha desplegado 1.200 soldados, a los que se suman contingentes de otras comunidades, de seis pa¨ªses y cientos de voluntarios de casi toda Espa?a. Seg¨²n el presidente de la Xunta de Galicia, el socialista Emilio P¨¦rez Touri?o, ahora mismo hay desplegado en esta Comunidad, combatiendo los distintos incendios, un ej¨¦rcito de 15.000 personas.