La lluvia lleva las cenizas a las playas que ennegreci¨® el 'Prestige'
Las previsiones meteorol¨®gicas se cumplieron ayer en Galicia. La lluvia lleg¨® y acab¨® con los pocos incendios que a¨²n quedaban activos. En algunas zonas abrasadas durante las dos ¨²ltimas semanas todav¨ªa se respira el olor a humo, pero ahora mezclado con el de la humedad provocada por el agua. Pasado el fuego, comienzan las tareas de limpieza. En la playa de Muros (A Coru?a), situada en la Costa da Morte, una de las comarcas gallegas m¨¢s afectadas y ya ennegrecida en 2002 por la cat¨¢strofe del Prestige, dos bomberos limpian los restos de ceniza que caen a la arena a trav¨¦s de un desag¨¹e. Armando Fern¨¢ndez, que ha trabajado en la extinci¨®n de las llamas en Muros, asegura que estas cenizas "pueden afectar al marisco si alcanzan el mar".
La misma opini¨®n tiene Mar¨ªa, una vecina de Mallou, aldea pr¨®xima a Muros, quien asegura que si llueve con fuerza el agua arrastrar¨¢ las cenizas que han quedado en la tierra y acabar¨¢ con bastantes especies mar¨ªtimas. A sus 68 a?os, Mar¨ªa ha visto arder el monte en m¨¢s ocasiones, pero nunca como esta vez. "Si se destruye el paisaje, los turistas dejar¨¢n de venir por aqu¨ª", se lamenta. Tres limpiadoras municipales de la playa de Sardi?eiro, a escasos kil¨®metros de Fisterra, recuerdan el horror vivido el primer d¨ªa de fuego. "Todos luchamos junto a los turistas contra las llamas, hasta que llegaron los bomberos", dice una de ellas. Aseguran que no han encontrado ceniza en la playa, aunque admiten que es posible que acaben llegando al mar si contin¨²a lloviendo en las pr¨®ximas fechas.
"Los incendios seguir¨¢n ocurriendo todos los veranos", afirman dos vecinas de Fisterra. Ellas creen que la principal explicaci¨®n de lo sucedido son los intereses urban¨ªsticos. "En estas zonas construir¨¢n casas, a pesar de que una ley que lo proh¨ªba, porque los ayuntamientos se la saltar¨¢n", se?ala una de las dos. Jos¨¦ Inzo posee varias fincas en Fisterra y tambi¨¦n expresa su tristeza y escepticismo: "Ya no voy a volver a plantar nada en estas tierras, ?para qu¨¦? ?para que las vuelvan a prender?", dice resignado.
Esperando las ayudas
En la Costa da Morte se habla de las posibles indemnizaciones que recibir¨¢n los afectados. Sus habitantes vivieron antes que nadie la cat¨¢strofe del hundimiento del Prestige. Isabel, de Mallou, afirma que cuando se hundi¨® el petrolero algunos se hicieron "millonarios" con las ayudas. En su opini¨®n las indemnizaciones servir¨¢n para que haya m¨¢s incendios, porque a¨²n m¨¢s gente tendr¨¢ inter¨¦s en que vuelvan a arder los montes.
Entre los ¨¢rboles arrasados que rodean Cee sale humo de la tierra, a pesar de la lluvia ca¨ªda durante la ma?ana. Pero ya no son necesarios los bomberos. Esta localidad ha sufrido un incendio devastador. Decenas de personas tuvieron que ser atendidas d¨ªas atr¨¢s con problemas respiratorios causados por el humo. Sus habitantes expresan su alegr¨ªa por la llegada de las lluvias y alguno dice con resignaci¨®n que a¨²n pudo haber sido "peor".
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