"Ayudar a otro ser humano te lleva a la plenitud"
Consuelo Crespo Bofill es la presidenta de Unicef en Espa?a desde 2005; trabaj¨® desde los 16 a?os en tareas de voluntariado. Durante a?os ha estado unida a Unicef en Euskadi. Cuando la eligieron presidenta nacional se plante¨® "intensificar la cooperaci¨®n al desarrollo, la labor de sensibilizaci¨®n de la sociedad espa?ola para multiplicar sus compromisos" con la lucha a favor de los derechos de la infancia. Est¨¢ convencida de que esa actitud ha de convertirse "en una norma ¨¦tica, en un h¨¢bito". Para ella, la importancia de Unicef se resume en esta frase: "La historia de Unicef est¨¢ llena de humanidad".
Naci¨® en Barcelona, quiso estudiar Ciencias Biol¨®gicas, pero la tarea del voluntariado le impidi¨® terminar la carrera; y a los 21 a?os se cas¨® y se fue a vivir a Bilbao. All¨ª sigui¨® con sus tareas del voluntariado, se integr¨® en Unicef, y ahora habla de lo que hace como el resultado de un compromiso social, de una vocaci¨®n.
El beneficio de la campa?a se destinar¨¢ a proyectos de agua y educaci¨®n
Desde que tiene uso de raz¨®n, su vida como voluntaria est¨¢ marcada por una pregunta: "?Por qu¨¦ los que nacen en un lugar y tienen un determinado origen tienen unas oportunidades de las que carecen otros?" Para que esa pregunta no sea una herida perenne trabaja en Unicef. Para ella, esta organizaci¨®n, que comenz¨® a trabajar a pleno pulm¨®n en Espa?a a partir de 1961, "mantiene una visi¨®n global de los derechos humanos, trata a las personas por s¨ª mismas, no por su origen ni por su raza, y se ocupa de los ni?os como sujetos de derecho y no como objetos de protecci¨®n".
La respuesta espa?ola a las necesidades de la infancia en todo el mundo es satisfactoria, dice Consuelo Crespo, "pero generalmente viene estimulada por situaciones que tienen una gran repercusi¨®n medi¨¢tica; y debemos mejorar, tambi¨¦n nosotros, para que la generosidad y la solidaridad est¨¦ fundamentada en una reflexi¨®n profunda y en un an¨¢lisis de las situaciones, para que ese gesto solidario sea voluntario, habitual, no s¨®lo dependiente de un hecho medi¨¢tico que nos impacte".
Unicef trabaja, dice Consuelo Crespo, "para convencer a la gente de que es necesaria una educaci¨®n para el desarrollo, una sensibilizaci¨®n que corresponde a la sociedad..." El premio a la Concordia que acaba de recibir Unicef de manos de Don Felipe es un est¨ªmulo en este camino; "hechos as¨ª nos abren puertas, nos ayudan a divulgar estos principios, y adem¨¢s establecen un reconocimiento a personas que durante sesenta a?os, y en la sombra, y a veces perseguidos por la incomprensi¨®n, han sido capaces de trazar este camino para dar voz a los que no la tienen: mujeres, pa¨ªses empobrecidos, seres humanos que ven violados sus derechos... Toda esa gente est¨¢ en la mente de Unicef".
La organizaci¨®n recibe con gratitud todas las iniciativas "que ayudan a tener herramientas con las que hacer nuestro trabajo y lanzar el mensaje de apoyo a la infancia, para contar cu¨¢l es la situaci¨®n de la infancia y explicar c¨®mo deb¨ªa ser".
El beneficio de la campa?a solidaria que EL PA?S pone en marcha hoy ir¨¢ destinado a Unicef, que va a dedicarlo a sus proyectos de agua, saneamiento y educaci¨®n. "Son proyectos que permiten", dice Consuelo Crespo, "un desarrollo humano sostenible; ese es nuestro objetivo, conseguir un desarrollo humano sostenible, e iniciativas como esta nos dan herramientas para acercarnos a ¨¦l".
Unicef ha conseguido poner los derechos de la infancia en muchas agendas, dice Consuelo Crespo, "y eso es gracias a que establecemos muchas alianzas con todos los sectores de la sociedad". Una iniciativa como esta que EL PA?S pone en marcha se inscribe, seg¨²n ella, en apoyos que los medios de comunicaci¨®n ofrecen a esta entidad para que haga llegar su mensaje de solidaridad a toda la ciudadan¨ªa.
?Tiene ella alg¨²n recuerdo personal que traslade la emoci¨®n de ayudar? "Ayudar a otro ser humano te lleva a la plenitud; es la capacidad mayor que tenemos, te hace sentir muy persona. Y a m¨ª en concreto me emocion¨® mucho ver a unos adolescentes ayudando a otros a salir adelante, unos ni?os de la calle en Per¨²... Esos adolescentes que les ayudaban tambi¨¦n hab¨ªan sido ni?os de la calle".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.