En primera l¨ªnea de fuego
Espa?a es objetivo "preferente" de Al Qaeda, seg¨²n todos los informes policiales
Los benditos ataques de Madrid" se han convertido en una referencia y un ejemplo a seguir para los yihadistas de todo el mundo. Con esa frialdad y crueldad se define la matanza del 11-M en miles de p¨¢ginas de los grupos y subgrupos asociados a la inmensa telara?a en que se ha convertido Al Qaeda desde que Mohamed Atta y sus hombres derribaron las Torres Gemelas en Nueva York, en septiembre de 2001. Un monstruo que crece y planta nuevas ra¨ªces en Europa.
"Que Dios sea misericordioso con sus m¨¢rtires y los acoja", escribi¨® sobre los siete suicidas de Legan¨¦s Mustaf¨¢ Setmarian, de 48 a?os, el fundador de las primeras c¨¦lulas islamistas en Espa?a y consejero de Bin Laden, meses antes de su captura y entrega a la CIA en su refugio de Quetta (Pakist¨¢n). Alekema Lamari, Sarhane Abdelmajid, El Tunecino, Jamal Ahmidan, El Chino, y los otros suicidas protagonistas ausentes del juicio del 11-M aparecen en las webs yihadistas como "h¨¦roes" a los que hay que imitar y "vengar". "Nos preocupa la profusi¨®n y el aumento de estas citas en las que se presentan a estos terroristas como ejemplo para los dem¨¢s", se?ala un experto en inteligencia.
Los comunicados de Al Qaeda son el peor de los presagios y en ocasiones han anunciado sus ataques
"Estamos peor que antes. Al Zawahiri nos cita en sus tres ¨²ltimos comunicados", asegura un jefe antiterrorista.
En 'webs' yihadistas se presenta a los suicidas del 11-M como h¨¦roes a los que hay que vengar
"Somos los m¨¢s beligerantes en perseguir a los salafistas, y eso nos sit¨²a en la l¨ªnea roja"
Decenas de islamistas aguardan juicio en prisiones espa?olas por apoyar la 'yihad'
A la recuperaci¨®n de Al Andalus, Bin Laden a?ade ahora las "ciudades ocupadas" de Ceuta y Melilla.
Espa?a es uno de los viveros de suicidas para Irak. M¨¢s de cien voluntarios se han unido a la insurgencia.
"Vigilamos a gente con un perfil, pero no podemos a todos. De paso ponemos una vela a la Virgen"
La coordinaci¨®n a¨²n es insuficiente y falta por informatizar todas las operaciones policiales
?Cu¨¢l es el grado de amenaza en Espa?a cuando se cumple el tercer aniversario del 11-M? ?Estamos mejor o peor que antes de la matanza? ?Hay m¨¢s islamistas dispuestos a emular a los suicidas? Antes del juicio contra los 29 procesados por la matanza de Atocha, el Gobierno recab¨® informes a los servicios de inteligencia y el diagn¨®stico coincide. CNI, polic¨ªa y Guardia Civil aseguran que seguimos siendo un objetivo "preferente". Y en todas las evaluaciones de amenaza aparece un mismo nombre, el del antiguo pediatra Ayman al Zawahiri, de 56 a?os, el dirigente de la Yihad Isl¨¢mica egipcia, una de las 20 personas que se unieron en 1990 a Bin Laden y crearon Al Qaeda, cuando s¨®lo era una red de datos en la que figuraban los nombres de los muyahidin que combatieron con los sovi¨¦ticos en Afganist¨¢n. Seg¨²n las manifestaciones de dirigentes de Al Qaeda interrogados por la CIA, Al Zawahiri es uno de los hombres que ejercen m¨¢s influencia en el pensamiento pol¨ªtico del terrorista saud¨ª.
El principal responsable policial en terrorismo islamista en Espa?a es taxativo y no duda en su respuesta: "En l¨ªneas generales estamos peor. Al Qaeda, a trav¨¦s de Al Zawahiri, ha citado Espa?a como objetivo en sus tres ¨²ltimos comunicados. Y eso es lo peor que nos pod¨ªa ocurrir. No le puedo negar que nos inquieta". Su pron¨®stico se comparte en el ¨¢mbito judicial. "Seguimos amenazados. Espa?a est¨¢ en primera l¨ªnea de fuego. El riesgo no ha disminuido", dice Baltasar Garz¨®n, el juez de la Audiencia Nacional que en los a?os noventa inici¨® la persecuci¨®n de las c¨¦lulas del Grupo Isl¨¢mico Armado (GIA) en el que entonces militaba el argelino y paranoico Lamari, un tipo solitario y virgen que odiaba a las mujeres y que nunca estrech¨® la mano de Mari, su casera en Tudela.
Los comunicados de Al Qaeda son el peor de los presagios y en ocasiones han anunciado sus ataques. En octubre de 2003, Bin Laden cit¨® a Espa?a como objetivo por el apoyo del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar a la guerra de Irak, y cinco meses despu¨¦s volaron los cuatro trenes de Atocha. Ahora, tres a?os m¨¢s tarde, el nombre de Espa?a vuelve a aparecer en los manifiestos del saud¨ª, de su portavoz Ayman al Zawahiri y de sus seguidores en distintos puntos del planeta. Y surge con tanta profusi¨®n como las citas a "los benditos ataques de Madrid".
El 23 de mayo de 2006, desde un cibercaf¨¦ en Argel, un tipo que firm¨® con el seud¨®nimo de Nadim al Magreb entr¨® en la p¨¢gina Alansar, uno de los foros m¨¢s visitados de Al Qaeda, y escribi¨® un comunicado en ¨¢rabe en el que ped¨ªa "que se declare la guerra al Estado infiel espa?ol y liberar las ciudades ocupadas de Ceuta y Melilla". Su autor propuso crear "un grupo yihadista fuerte que no tenga como objetivo llevar a cabo una o dos operaciones, sino declarar una guerra a muy largo plazo. Espero que esta proposici¨®n sea aceptada por los hermanos muyahidin y aquellos deseosos de llevar a cabo la yihad en los pa¨ªses del norte de ?frica". El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) cree que tras Nadim al Magreb se esconde un grupo terrorista del norte de ?frica que en los ¨²ltimos a?os ha emitido a trav¨¦s de Internet m¨¢s de 400 comunicados.
La recuperaci¨®n de los "santos lugares perdidos" y la instauraci¨®n de un nuevo califato son el objetivo. Y ah¨ª es donde aparece Espa?a junto a Palestina, L¨ªbano, Eritrea, Somalia, Filipinas, Myanmar, Chad y Yemen, entre otros pa¨ªses. El pasado mes de julio, Al Zawahiri lo record¨® en un comunicado en el que habl¨® de una yihad "para liberar Palestina, toda Palestina, y todo territorio que fue musulm¨¢n, desde Al-Andalus hasta Irak".
Seis meses despu¨¦s, el pasado 20 de diciembre, ocurri¨® lo que los responsables de los servicios de inteligencia espa?oles tem¨ªan desde hace a?os. Al Zawahiri, el fiel escudero de Bin Laden, recogi¨® el guante ofrecido meses antes por Nadim al Magreb, el enigm¨¢tico grupo que desde un cibercaf¨¦ en Argel pidi¨® recuperar "las ciudades ocupadas" de Ceuta y Melilla. A trav¨¦s de la televisi¨®n Al Yazira, Al Zawahiri hizo p¨²blico un comunicado en el que cit¨® por vez primera a Ceuta y Melilla. Al d¨ªa siguiente, los analistas del CNI, polic¨ªa y Guardia Civil alertaron al Gobierno. "La reivindicaci¨®n de Ceuta y Melilla por el yihadismo internacional es un problema a?adido para la seguridad de Espa?a", asegura un responsable de la lucha antiterrorista. El egipcio equipar¨® las dos ciudades espa?olas con Chechenia.
La ¨²ltima aparici¨®n del m¨¦dico egipcio se produjo el pasado mes de febrero. Este hombre, que pas¨® de atender a ni?os en su confortable consulta de El Cairo a proclamar "el amor que los musulmanes deben profesar a la muerte", se refiri¨® a los "leones" del Magreb, sus nuevos aliados en ?frica, y suplic¨® a Dios que "os conceda el favor de pisar pronto con vuestros pies puros sobre el usurpado Al-Andalus". Antes de unirse a Bin Laden, al que conoci¨® en Sud¨¢n, Al Zawahiri fue encarcelado y torturado en Egipto por su activismo como responsable de la Yihad Isl¨¢mica Egipcia. Durante la guerra de los talibanes contra los sovi¨¦ticos acudi¨® varias veces con la Media Luna Roja a Peshawar para atender a los combatientes heridos y trabaj¨® en distintos hospitales. Se refugi¨® en Pakist¨¢n en 1985 y ya entonces daba sermones y pl¨¢ticas en algunas mezquitas. En sus discursos aseguraba que el suicidio de los muyahidin era la mejor forma de acercarse a Dios.
Los yihadistas parecen obsesionados con Espa?a no s¨®lo por recuperar Al-Andalus y Ceuta y Melilla, sino porque este pa¨ªs se ha convertido en un escenario beligerante para su causa. Las operaciones policiales y la actividad judicial contra las c¨¦lulas salafistas son, probablemente, las m¨¢s intensas de Europa.
El juez Garz¨®n lo explica as¨ª: "Espa?a es de los pa¨ªses en primera l¨ªnea de fuego, junto a Francia. Somos los m¨¢s beligerantes en la persecuci¨®n a los militantes del Grupo Salafista para la Predicaci¨®n y el Combate (GSPC), nuevo aliado de Al Qaeda en ?frica, y eso nos sit¨²a en primera l¨ªnea de fuego, en la l¨ªnea roja. La beligerancia siempre supone un riesgo".
El GSPC, al que Bin Laden financia desde hace a?os, es el grupo terrorista argelino que m¨¢s veces cita en sus comunicados "los benditos ataques de Madrid", "aunque sin reivindicarlos nunca", puntualiza un analista de inteligencia. A sus filas se est¨¢n uniendo no s¨®lo argelinos, sino marroqu¨ªes, libios, mauritanos y malienses. De su militancia se nutre buena parte de los suicidas de la insurgencia iraqu¨ª. "Despu¨¦s de Argelia y Marruecos somos los primeros de su lista. No olvide que aqu¨ª y en Francia tenemos la mayor colonia argelina", augura un especialista de la polic¨ªa.
La estad¨ªstica demuestra la beligerancia espa?ola. Desde 2001 se ha detenido a m¨¢s de 300 personas, y las condenas se suceden. Adem¨¢s de los miembros de la c¨¦lula de Imad Eddin Barakat, Abu Dahdah, han sido condenados los salafistas del denominado comando Dixan, tambi¨¦n un paquistan¨ª y un espa?ol que financiaron el ataque de Al Qaeda contra una sinagoga en T¨²nez el 11 de abril de 2002, y Ahmed Ibrahim, un argelino de 60 a?os que difund¨ªa fetuas violentas a trav¨¦s de Internet desde su casa en Palma de Mallorca.
Decenas de islamistas esperan en las c¨¢rceles pr¨®ximos juicios por financiaci¨®n de la yihad, reclutamiento y adoctrinamiento. Y el juicio del 11-M supone otro foco de atenci¨®n, aunque su repercusi¨®n internacional est¨¢ siendo menor de la esperada. Un informe de la Guardia Civil remitido al Gobierno llega a esa conclusi¨®n. "A la propaganda neosalafista no le interesa difundir la imagen de 29 procesados", explica un jefe policial.
No obstante, la ¨²ltima evaluaci¨®n de amenaza remitida al Gobierno por la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n de la polic¨ªa asegura que el riesgo es mayor durante la celebraci¨®n del juicio por los recientes comunicados de Al Zawahiri, por la expansi¨®n del GSPC al Sahel, la franja des¨¦rtica que va desde Mauritania hasta N¨ªger, donde ha instalado campos de adiestramiento, y por la presencia de las tropas espa?olas en Afganist¨¢n y L¨ªbano, entre otras razones. "La amenaza se extiende tambi¨¦n a nuestros turistas en diversos pa¨ªses ¨¢rabes y a los intereses espa?oles en el extranjero", a?ade el responsable policial de la lucha antiterrorista.
Para la UCE 2 de la Guardia Civil, el grupo dedicado a perseguir el terrorismo internacional, el nivel de amenaza no ha bajado. "Sigue siendo alto, tanto como para seguir estando preocupados. El problema no es que se nos escape una c¨¦lula determinada que planifique y organice un ataque, sino que gente individual decida un atentado suicida. Hoy, a trav¨¦s de Internet, es muy f¨¢cil confeccionar una bomba. Eso s¨ª que es incontrolable. Contra ese segundo supuesto no podemos hacer nada. Vigilamos a gente con un perfil determinado, pero no podemos vigilar a todos. De paso ponemos una vela a la Virgen". "Trabajamos en prevenci¨®n y en conseguir la mayor informaci¨®n posible", se?ala el jefe policial.
Baltasar Garz¨®n, que en diciembre orden¨® la detenci¨®n de varios j¨®venes ceut¨ªes que planificaban atentados en esa ciudad, explica la situaci¨®n actual as¨ª: "Despu¨¦s de todas las detenciones que se han llevado a cabo, podr¨ªamos decir que las c¨¦lulas est¨¢n en fase de reclutamiento, adoctrinamiento y proselitismo. Est¨¢n en una fase de desarrollo incipiente. No hay una concreci¨®n en objetivos determinados y espec¨ªficos".
Al Zawahiri y tipos como Mohamed Atef, otro de los muyahidin egipcios que m¨¢s han influido en Bin Laden hasta que muri¨® en los bombardeos de Kabul en 2001, llevan 20 a?os induciendo al suicidio a miles de yihadistas en todo el planeta. "El amor a morir aniquilar¨¢ el imperio maligno de Am¨¦rica", declar¨® el doctor hace a?os. Un "martirio" que seg¨²n ellos conduce a Dios. Una doctrina que ha encontrado en Espa?a un excelente vivero.
Abdesalam Hssisni, de 73 a?os, antiguo patr¨®n de pesca retirado en Sant Boi de Llobregat, localidad pr¨®xima a Barcelona, y Ahmed Afallah, de 50, alba?il en Legan¨¦s (Madrid), no se conocen, pero ambos est¨¢n unidos por la misma tragedia. Sus hijos, seguidores de la doctrina salafista del pediatra, se han suicidado en Irak. Los dos padres recibieron una llamada de despedida. Un tr¨¢mite por el que pasan todos los suicidas: "Padre, estoy en Irak, perd¨®name". Afallah era uno de los presuntos autores del 11-M. "Me tortura pensar a cu¨¢nta gente ha podido matar mi propio hijo. ?Sabe usted si podr¨¦ recuperar sus restos?", pregunta Ahmed, un hombre que nunca imagin¨® que esto podr¨ªa pasarle a su familia.
Los servicios de inteligencia no saben cu¨¢ntos tipos como el argelino Belgacem Bellim, de 31 a?os, que trabajaba en una carnicer¨ªa en Vilanova i la Geltr¨² antes de lanzarse en 2003 al volante de un cami¨®n bomba contra la base italiana de Nasiriya y asesinar a 28 personas, han muerto en Irak. Las estimaciones m¨¢s prudentes hablan de un centenar de personas, entre los que han logrado unirse a la insurgencia y los yihadistas frustrados que han regresado a Espa?a. El argelino Mbar El Jaafari, profesor de taekwondo vinculado al GSPC y detenido recientemente, envi¨® desde Reus (Tarragona) a 30 muyahidin a Irak y al Sahel. Se sospecha que Daoud Ouhnane, uno de los huidos y presuntos autores materiales del 11-M, ha tomado "el camino hacia Dios" del que habla Al Zawahiri.
Algunos veteranos de Irak ya han regresado a Espa?a y lo han hecho formados como terroristas. Seg¨²n los informes de Europol y de los servicios de inteligencia europeos, los que han vuelto representan el mayor peligro para este continente que ya ha sufrido dos ataques en Madrid y Londres . "Vienen con ¨®rdenes de atacar aqu¨ª y no podemos detenerlos porque en ocasiones la informaci¨®n es de inteligencia y no tiene valor judicial", se queja un responsable policial.
La falta de medios antes del 11-M se ha corregido, pero la coordinaci¨®n, entonces inexistente, es todav¨ªa deficiente, pese a la creaci¨®n del Centro Nacional de Coordinaci¨®n Antiterrorista. "Funciona bien, pero todav¨ªa falta por informatizar los datos de todas las operaciones policiales", reconoce un mando.
Seg¨²n Garz¨®n, "queda mucho camino por recorrer y es b¨¢sico para combatir a estos grupos". El juez destaca la importancia de la "microfinanciaci¨®n" en las redes espa?olas de Al Qaeda y asegura que no hay coordinaci¨®n suficiente entre la polic¨ªa judicial y las auton¨®micas. "La delincuencia com¨²n y el crimen organizado forman parte de estas redes y ah¨ª hay mucho que hacer". El jefe policial de la lucha contra el terrorismo islamista a?ade: "La coordinaci¨®n tiene que pasar por nuestras propias unidades, desde las m¨¢s bajas a las m¨¢s altas, para que no haya fugas de informaci¨®n".
El 11-M fue un claro ejemplo de fallos encadenados, falta de previsi¨®n y coordinaci¨®n. Un c¨²mulo de errores que condujeron a lo que Al Zahawiri y sus ac¨®litos llaman ahora "los benditos ataques de Madrid".
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