De parto en la garita de la frontera

Baldomero y Sigfrido llevaban una tranquila noche de guardia en el puesto de Benz¨², entre Ceuta y Marruecos, cuando una mujer cruzaba la frontera para dar a luz en el hospital de Ingesa de la ciudad espa?ola. Rahma E. H., de 37 a?os, solicitaba asistencia m¨¦dica al mismo tiempo que ense?aba su pasaporte a los dos agentes casi a las diez y media de la noche del pasado s¨¢bado. Estaba de parto y a ocho kil¨®metros del centro sanitario m¨¢s pr¨®ximo.

Con la mujer sobre el anorak verde de servicio, los agentes asistieron al nacimiento de un var¨®n

"Nos comunicamos por radio y pedimos una ambulancia urgente", explica uno de los agentes. Pero el cr¨ªo se present¨® antes de tiempo y los dos guardias debieron ejercer de improvisados matrones en mitad de una noche de temporal de Levante, y que se sufre con intensidad en la bah¨ªa norte de Ceuta, donde se encuentra este puesto fronterizo, por el que s¨®lo transitan los vecinos de la barriada de Benz¨² y del pueblo marroqu¨ª de Beliones por razones de ¨ªndole social y familiar.

Mientras esperaban la llegada de la ambulancia, los agentes comprobaron que la parturienta estaba ya dando a luz y que el ni?o asomaba la cabeza. La acomodaron, como pudieron, en el interior de la garita fronteriza, la tumbaron en el suelo, "sobre el anorak verde de servicio", asistiendo ambos at¨®nitos al nacimiento de un var¨®n, que lleg¨® al mundo apenas diez minutos despu¨¦s de que su madre se presentara en la frontera.

Un comadr¨®n del hospital explicaba por tel¨¦fono a los agentes c¨®mo deb¨ªan atar el cord¨®n umbilical y qu¨¦ hacer mientras llegaba la ambulancia con la asistencia sanitaria.

El reci¨¦n nacido, que est¨¢ en una incubadora por su bajo peso, fue cubierto con el velo que llevaba la madre sobre su cabeza tras ser limpiado con pa?uelos y toallitas higi¨¦nicas. A las once de la noche, una ambulancia del 061 recog¨ªa a la madre y al beb¨¦ para llevarlos al hospital. Ambos se encontraban en perfecto estado de salud.

"Esto no es muy habitual", explica por su parte un portavoz de la Comandancia de la Guardia Civil ceut¨ª, Alfonso Cruzado. No es lo habitual, pero lo cierto es que cada semana son decenas las mujeres marroqu¨ªes que prefieren parir en Ceuta antes que hacerlo en su propio pa¨ªs.

En la ciudad aut¨®noma tienen garantizada la asistencia m¨¦dica y cama durante al menos dos d¨ªas para la mujer y el beb¨¦, sin tener que pagar, algo que en Marruecos ser¨ªa impensable.

Seg¨²n las estad¨ªsticas, en la ¨²ltima semana de marzo, de 30 partos asistidos en el hospital de Ceuta, 22 eran de marroqu¨ªes que, como Rahma, cruzaron la frontera para tener a su hijo. Fuentes del Ingesa destacaban ayer la situaci¨®n en la que generalmente llegan estas embarazadas, "ya que muchas de ellas ni siquiera pasan controles m¨¦dicos del embarazo ni llevan las cuentas de las semanas de gestaci¨®n, y menos a¨²n una cartilla de control".

A esta dificultad se a?ade otra, que es la de la barrera del idioma. Precisamente por ello, varios comadrones del hospital civil de Ceuta y del Punta Europa de Algeciras han elaborado un pictograma, una tabla con dibujos y palabras en franc¨¦s, ¨¢rabe, espa?ol e ingl¨¦s, para comunicarse con estas mujeres y conseguir una informaci¨®n b¨¢sica para el momento del parto.

Esta iniciativa ha logrado una menci¨®n especial en el II Congreso de la Asociaci¨®n Andaluza de Matronas, que se ha comprometido a financiar el pictograma para utilizarlo en otros hospitales.