El gran defensor de Guant¨¢namo

La guerra contra el terrorismo es "una nueva clase de guerra" y los prisioneros deben ser tratados tambi¨¦n de forma diferente. As¨ª justificaba Alberto Gonzales sus pol¨¦micas ideas sobre las t¨¦cnicas que se deb¨ªan emplear para interrogar a los detenidos en Afganist¨¢n e Irak. El fiscal general de Estados Unidos ha sido objeto de pol¨¦mica por cuestionar la validez de la Convenci¨®n de Ginebra y por ser uno de los grandes defensores, junto al vicepresidente Dick Cheney, del centro de detenci¨®n de Guant¨¢namo.

?stas son las principales medidas controvertidas de Gonzales:

- Tribunales militares. Dos meses despu¨¦s de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, Gonzales escribi¨® una orden en la que se autorizaba a los detenidos en la guerra contra el terrorismo a ser juzgados por tribunales militares, no civiles. En junio pasado, el Tribunal Supremo concluy¨® que esos tribunales no estaban autorizados por el Congreso ni eran necesarios desde el punto de vista militar y bloque¨® los procesos.

- Convenci¨®n de Ginebra. La batalla sobre la idoneidad de Gonzales para ocupar el cargo de fiscal general gir¨® en torno a un informe de enero de 2002, en el que afirmaba que algunas partes de la Convenci¨®n de Ginebra, firmada en 1949 para fijar unas reglas sobre el tratamiento de los prisioneros de guerra, se hab¨ªan quedado "obsoletas" sobre las t¨¦cnicas en interrogatorios y eran limitadas. Este informe sali¨® a la luz poco despu¨¦s del esc¨¢ndalo de Abu Ghraib, la prisi¨®n iraqu¨ª gestionada por el Ej¨¦rcito estadounidense en la que se tortur¨® a prisioneros. Gonzales respondi¨® que segu¨ªa manteniendo lo dicho sobre la Convenci¨®n de Ginebra, pero tambi¨¦n quiso dejar claro que no defend¨ªa la tortura.

- Torturas. Gonzales tambi¨¦n provoc¨® una gran indignaci¨®n con un informe de agosto de 2002, en el que afirmaba que s¨®lo los m¨¢s severos tipos de tortura no estaban permitidos por los acuerdos internacionales firmados por EE UU. Este informe fue retirado y modificado tras las protestas de organizaciones de derechos humanos. Gonzales tambi¨¦n recibi¨® cr¨ªticas por el programa antiterrorista que la Casa Blanca puso en marcha tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. ?ste reforz¨® el control policial, pero algunas de sus disposiciones fueron muy cuestionadas por amenazar la privacidad y los derechos fundamentales.

- Fiscales despedidos. M¨¢s recientemente, se ha visto envuelto en un esc¨¢ndalo pol¨ªtico por el despido de ocho fiscales federales que, seg¨²n el Partido Dem¨®crata, se debi¨® a una decisi¨®n pol¨ªtica. Gonzales sostiene que los fiscales fueron despedidos por motivos profesionales.