Una carrera como las de antes
Rossi atrasa el alir¨®n de Stoner y se impone tras mantener una exquisita batalla con Pedrosa, que plant¨® cara hasta el final
Con el t¨ªtulo mundial de MotoGP pr¨¢cticamente decidido a favor de Casey Stoner, la mejor versi¨®n del motociclismo resurgi¨® ayer en Estoril, donde se disput¨® la carrera m¨¢s trepidante y re?ida de la temporada. No obstante, la excelsa victoria que se llev¨® Valentino Rossi, su cuarta de la temporada y la 200 de un piloto italiano en la categor¨ªa, s¨®lo retrasar¨¢ unos d¨ªas el alir¨®n de Stoner. El motociclista de Ducati viaja disparado a convertirse, por detr¨¢s de Freddie Spencer, en el segundo campe¨®n m¨¢s joven de la historia. Lo puede conseguir el pr¨®ximo domingo, en el trazado de Motegi, la casa de Honda, tres carreras antes del final, siempre que cruce la meta por delante de Rossi o pierda un solo punto con respecto a ¨¦l.
Casi dos a?os se ha demorado el duelo entre el piloto italiano y el espa?ol
Otro gallo cantar¨ªa si la igualdad que ayer plane¨® sobre el trazado portugu¨¦s hubiera aparecido unas cuantas carreras antes. Si Bridgestone, el fabricante japon¨¦s de neum¨¢ticos que calza la Desmosedici GP7 del australiano, no le hubiera dado un bochornoso ba?o a Michelin, el primer fabricante mundial del sector, que equipa las motos de Rossi y Dani Pedrosa. Casi dos a?os se ha demorado el duelo entre el italiano, siete veces campe¨®n del mundo, y el espa?ol, que posee tres coronas entre 125 y 250cc. Si el a?o pasado apenas se midieron en corto durante dos vueltas del Gran Premio de la Rep¨²blica Checa, la pelotera que tuvieron ayer se alarg¨® m¨¢s de media carrera. Y, siempre, con Stoner como el tercero en discordia. Ayer, el l¨ªder, el dominador implacable del campeonato, ganador de ocho carreras, m¨¢s de la mitad de las que se han disputado hasta ahora, fue un compa?ero de viaje, una simple comparsa, un espectador de lujo. Y se lo debi¨® pasar en grande porque la jarana fue de rechupete.
Cuando la carrera hubo recuperado el pulso tras la habitual algarab¨ªa inicial, Stoner se puso a tirar con Pedrosa pegado a su trasero. Si durante el primer tramo del campeonato, la moto de Borgo Panigale era con diferencia la m¨¢s potente de todas, los japoneses de Honda se han apresurado a meterle m¨¢s chicha a su RC212V. La prueba de ello es que Pedrosa le adelant¨® en la recta de meta (vuelta seis). Se situ¨® pegado a ¨¦l, se abri¨® a la derecha, circul¨® unos metros en paralelo, fren¨® un santiam¨¦n m¨¢s tarde y enfil¨® la salida de la primera curva al frente de la carrera. A sus espaldas, como un cicl¨®n, apareci¨® el 46 amarillo que luce en la c¨²pula de la Yamaha de Rossi. Cuando hubo llegado a su altura (vuelta ocho), Il Dottore s¨®lo necesit¨® medio circuito para quitarse de encima a Stoner y fijar su punto de mira en Pedrosa. Ante ese panorama, los precedentes auguraban un adelantamiento violento previo a una endiablada escapada. Y s¨ª, el corredor de Tavullia super¨® al catal¨¢n. Lo hizo como no pod¨ªa ser de otra forma trat¨¢ndose de uno de los mejores frenadores de la historia: al llegar a final de recta y con su Yamaha cruzada en el asfalto. Pero Pedrosa, subido al fin a una moto potente y calzada con unos neum¨¢ticos eficaces, apret¨® los dientes, se cobij¨® lo m¨¢s que pudo debajo de su c¨²pula, y se enganch¨® detr¨¢s de la Yamaha. No s¨®lo lo consigui¨®, sino que le devolvi¨® la ofensa (vuelta 17), calcando la maniobra de su oponente. Y as¨ª circularon hasta que faltaban cinco vueltas para el final.
Tras un error por banda que dej¨® las cosas tal y como estaban, el motorista de Yamaha trat¨® de superar a Pedrosa por velocidad punta. Pero el motor de v¨¢lvulas neum¨¢ticas que ahora incorpora la Yamaha a¨²n no es tan r¨¢pido, as¨ª que Rossi se dispuso a buscar una alternativa para atrapar la victoria. La soluci¨®n se la ofreci¨® el catal¨¢n, en el pen¨²ltimo giro, cuando su Honda le solt¨® un tremendo zarandeo que le hizo perder el estribo izquierdo. El susto propici¨® un despiste, que degener¨® en un problema gordo cuando Rossi meti¨® en el hueco el neum¨¢tico delantero de su moto. En esa maniobra se decidi¨® el triunfo, incierto hasta el final. Para suerte de los aficionados, no fue hasta poco antes de la bandera de cuadros. Como en las carreras de antes.
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