3.100 millones de traca final

El pasado 6 de julio, con motivo de los cambios de Gobierno, el presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero anunci¨® su prop¨®sito de un ¨²ltimo esfuerzo para relanzar nuevas medidas de contenido social. Desde entonces, la cascada de anuncios de distintos ministerios se ha llevado por delante un buen mordisco del presupuesto: 3.155 millones de euros.

La ¨²ltima guinda la puso ayer Zapatero junto a su nueva ministra de Vivienda, Carme Chac¨®n, al anunciar medidas -ya vigentes en parte- para facilitar el acceso a la vivienda de alquiler a los j¨®venes con ingresos menores a 24.000 euros.

Zapatero situ¨® las reformas sociales como prioridad para la recta final de la legislatura. Los estrategas del Gobierno han dispuesto un paquete de medidas que pretenden tener un impacto social de efecto inmediato. Se trata de dinero efectivo para las familias.

Tres d¨ªas antes de su cambio de Gobierno, Zapatero adelant¨® sus intenciones en el debate sobre el estado de la naci¨®n al comprometerse a pagar 2.500 euros por cada reci¨¦n nacido para fomentar la natalidad.

La tramitaci¨®n de esta medida est¨¢ pendiente de la negociaci¨®n que el Grupo Socialista mantiene con los grupos parlamentarios en el Congreso. La pretensi¨®n inicial del Gobierno era que entrase en vigor, con car¨¢cter retroactivo, desde su anuncio, el pasado tres de julio.

Hace dos semanas, otro de los nuevos ministros se descolg¨® con un nuevo regalo a los contribuyentes. Bernat Soria asegur¨® que el ministerio de Sanidad pondr¨ªa en marcha un plan para prestar asistencia bucodental gratuita a los menores de entre 7 y 15 a?os. La medida est¨¦ pendiente de aprobaci¨®n definitiva en el Consejo Interterritorial de Salud, que agrupa al Gobierno central con los ejecutivos de las comunidades aut¨®nomas.

Tercera medida social

La tercera medida social, precisada ayer, era la m¨¢s anunciada y jaleada por Zapatero. El Gobierno pretende lanzar el mensaje de que est¨¢ dispuesto a comprometer m¨¢s dinero para facilitar el acceso a la vivienda a un sector de la poblaci¨®n, que cifra en un mill¨®n de personas. Con su plan, cuya medida principal de ayuda directa al alquiler est¨¢ vigente desde 2004, pretende fomentar la cultura de alquiler en detrimento de la de propiedad, tan instalada en Espa?a, y alejada de los par¨¢metros de nuestro entorno.

Esta medida, que se tramitar¨¢ mediante un proyecto de ley y ser¨¢ la ¨²ltima de la legislatura ir¨¢ al Consejo de Ministros del pr¨®ximo viernes.

El fomento de la vivienda de alquiler tiene consecuencias econ¨®micas, como destaca la Vicepresidencia econ¨®mica: equilibrio del mercado con la vivienda de propiedad; aumenta la confianza de los propietarios y apoya a la iniciativa empresarial en el sector de la construcci¨®n.

En el terreno social, el Ejecutivo, con el fomento de la vivienda de alquiler, trata de facilitar la emancipaci¨®n y la movilidad juvenil. El Ejecutivo sit¨²a estas medidas sociales dentro de un paquete m¨¢s global dedicado a "la Espa?a joven que trabaja", seg¨²n fuentes gubernamentales, que recoge desde medidas de apoyo a la familia, al acceso a la vivienda y las medidas de fomento del empleo estable, con el aumento de los contratos indefinidos, un 19,34% en lo que va de legislatura.

Con esta bater¨ªa de medidas, el Gobierno pretende centrar el debate pol¨ªtico en las reformas sociales, excesivamente escorado esta legislatura en el debate territorial y el terrorismo. "La aut¨¦ntica identidad de esta legislatura son las reformas sociales", se?alaban dirigentes gubernamentales.

El Ejecutivo cree que, al dar a conocer estas medidas, suscita el debate de toda la pol¨ªtica social que ha marcado la legislatura con normas de mucho calado social como la Ley de Dependencia. Del mismo modo que est¨¢ haciendo con los ¨¦xitos de la pol¨ªtica econ¨®mica.

As¨ª, el pasado mi¨¦rcoles, en la sesi¨®n de control del Congreso, cuando el presidente del PP, Mariano Rajoy, lanz¨®, por vez primera, el debate sobre la econom¨ªa y reproch¨® al presidente del Gobierno que hab¨ªa terminado con la "herencia econ¨®mica de los gobiernos del PP", Zapatero pudo mostrar con cifras macroecon¨®micas, c¨®mo "la herencia hab¨ªa sido superada y mejorada con creces".

Estas medidas sociales, particularmente las vinculadas a la vivienda tienen, tambi¨¦n, una vertiente electoral: estimular el voto joven.

Zapatero est¨¢ cuidando, tambi¨¦n, el frente catal¨¢n tras los problemas que sufre esta comunidad en el funcionamiento de algunos de los principales servicios p¨²blicos. En menos de dos semanas ha tomado dos medidas relevantes. Por un lado, el aumento de un 24% de la inversi¨®n en infraestructuras para Catalu?a -846 millones de euros m¨¢s respecto a lo aprobado-, acordada entre los gobiernos central, con el vicepresidente, Pedro Solbes, a la cabeza, y el auton¨®mico, que se precisar¨¢ en los Presupuestos Generales del Estado para 2008.

Con esta medida, el Gobierno cumple lo acordado en el Estatuto de Catalu?a, aunque con una aplicaci¨®n metodol¨®gica m¨¢s generosa para la Generalitat que la ejecutada el pasado a?o.

La ofensiva del Gobierno central para paliar el d¨¦ficit de infraestructuras de Catalu?a se completar¨¢ con la llegada del AVE a Barcelona, que el Ejecutivo pretende cumplir para el 21 de diciembre, y con el traspaso de los trenes de cercan¨ªas para primeros de enero. Con este paquete de medidas pretende estimular el voto en uno de los graneros socialistas, d¨®nde las encuestas vaticinan una alta abstenci¨®n.