La f¨¢brica de una mentira

Tras el atentado del 11 de marzo de 2004, que caus¨® 191 muertos y m¨¢s de 1.800 heridos; y, sobre todo, tras la derrota electoral del PP tres d¨ªas despu¨¦s, varios medios de comunicaci¨®n (principalmente El Mundo, la episcopal cadena Cope y Telemadrid) se embarcaron con ayuda de dirigentes populares en la fabricaci¨®n de un gran bulo que sembr¨® de sospechas la investigaci¨®n de la matanza. Esa investigaci¨®n, cuestionada y vapuleada por medios afines o dirigidos por el PP, correspondi¨® a cargos policiales nombrados por el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.

Dichos medios de comunicaci¨®n y quienes los alimentaban de supuestas noticias -polic¨ªas que no hab¨ªan logrado los ascensos deseados, pol¨ªticos del PP que ocuparon cargos en el Ministerio del Interior, delincuentes comunes y terroristas condenados ahora por el atentado- han estado sugiriendo durante tres a?os, sin una sola prueba solvente, que ETA, polic¨ªas y guardias civiles, y hasta servicios de espionaje espa?oles y extranjeros estaban detr¨¢s del atentado.

Los dirigentes del PP se basaron en intoxicaciones para atacar al Gobierno

Un informe sobre presos etarras pedido el 12 de marzo arranc¨® la campa?a

El bulo de la mochila sali¨® de un polic¨ªa cabreado con el trato recibido

El PP dio por buena la mentira de la tarjeta del Grupo Mondrag¨®n

Trashorras acus¨® por el atentado a jueces, polic¨ªas y al aparato del Estado

El hallazgo de ¨¢cido b¨®rico en casa de un islamista, nueva 'conexi¨®n' con ETA

'El Mundo' vincul¨® una trama delictiva com¨²n con las bombas del 11-M

La falsa ocultaci¨®n de un informe. D¨ªaz de Mera denunci¨® en la Cope que el Gobierno ocultaba un informe que se hab¨ªa publicado y estaba en el sumario

"Pistas intencionadas". Astarloa cont¨® en el Congreso que tuvo la impresi¨®n de que alguien hab¨ªa puesto las pistas que apuntaban a los islamistas

Rajoy se apoy¨® en una noticia sin base para plantear que se anulara el sumario

'El Mundo' confundi¨® un temporizador de lavadoras con los de ETA, y no rectific¨®

Los populares mantuvieron su fe en que los terrorismos se mezclan

"La hip¨®tesis de ETA aumenta". El ex presidente sugiri¨®, siguiendo a 'El Mundo', la participaci¨®n de ETA en la matanza.

"?D¨®nde estaba la mochila?" Rajoy crey¨® en la patra?a de la mochila 'manipulada' de Vallecas y cuestion¨® el sumario judicial.

"La tarjeta existe y se ocult¨®". Zaplana minti¨® al afirmar que exist¨ªa una tarjeta del Grupo Mondrag¨®n en la furgoneta Kangoo.

"ETA tambi¨¦n estaba all¨ª, en el 11-M". Ignacio del Burgo sac¨® esta conclusi¨®n tras leer la entrevista de 'El Mundo' a Trashorras

La instrucci¨®n del juez Juan del Olmo desbarat¨® la mayor¨ªa de los bulos. Y el tribunal que juzg¨® el atentado ha terminado de desarticular la trama de intoxicaci¨®n informativa en una sentencia donde desmonta uno a uno los pilares de esa f¨¢brica de desvar¨ªos.

Los dirigentes del PP -Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, Mariano Rajoy, ?ngel Acebes, Eduardo Zaplana, Ignacio Astarloa, Jaime Ignacio del Burgo, Alicia Castro, Agust¨ªn D¨ªaz de Mera y otros- han alimentado, avalado, difundido y convertido los bulos, a los que siempre adjudicaron credibilidad pese a que estaban basados en fuentes an¨®nimas o datos err¨®neos, en su principal arma pol¨ªtica contra el Gobierno en relaci¨®n con los atentados.

Los datos que obran en el sumario del 11-M y en la sentencia del tribunal que juzg¨® el atentado aclaran c¨®mo se fabric¨® la mentira y qui¨¦nes intervinieron en ella.

- La relaci¨®n de ETA con los islamistas. A la desesperada, el entonces secretario de Estado de Seguridad Ignacio Astarloa (hoy diputado del PP) encarg¨® el 12 de marzo de 2004 un informe urgente sobre la relaci¨®n que manten¨ªan en las c¨¢rceles terroristas islamistas y etarras. Tom¨® esa decisi¨®n, seg¨²n cont¨® a EL PA?S, tras leer una informaci¨®n sobre ese posible v¨ªnculo en un peri¨®dico italiano.

Los funcionarios de prisiones trabajaron a toda prisa el s¨¢bado 13 de marzo, pero s¨®lo encontraron seis comunicaciones entre etarras e islamistas, ninguno de ellos vinculado con los atentados del 11-M.

Tras perder las elecciones generales y cuando las primeras partes del sumario, adelantadas por EL PA?S, demostraron que desde el 11 de marzo por la tarde todas las l¨ªneas de investigaci¨®n descartaban a ETA, el PP blanque¨® en el diario El Mundo el informe de las c¨¢rceles y puso en marcha la f¨¢brica de la intoxicaci¨®n en torno al atentado.

El Mundo titulaba en su primera p¨¢gina el 1 de junio de 2004: Un l¨ªder islamista propuso a ETA tras el 11-S realizar atentados conjuntos. La informaci¨®n falseaba los hechos al se?alar que el Gobierno dispon¨ªa de informaci¨®n confidencial -que Astarloa hab¨ªa pedido expresamente- desde el 12 de marzo -el informe se entreg¨® el 13-. Y que esa informaci¨®n se?alaba el inter¨¦s de ETA en colaborar con los islamistas -aunque ninguno de los etarras cuyas comunicaciones se interceptaron confirmaba ese inter¨¦s-.

Los dirigentes del PP, que conoc¨ªan ese informe desde el 13 de marzo, jalearon la informaci¨®n de El Mundo -a partir de aqu¨ª lo har¨ªan siempre igual- para exigir que se investigara a conciencia el v¨ªnculo entre los islamistas y ETA.

La investigaci¨®n posterior sobre esas relaciones determin¨® que no exist¨ªa nexo operativo entre ETA y los terroristas islamistas y mucho menos un plan para colaborar en atentados. Durante la etapa de Gobierno del PP, las comunicaciones grabadas de islamistas en las c¨¢rceles no se investigaban por la falta de traductores ¨¢rabes. La mayor¨ªa de las veces se destru¨ªan. Eduardo Zaplana insisti¨®: "No le quepa la m¨¢s m¨ªnima duda de que al final el terrorismo islamista y el de ETA estar¨¢n relacionados en alg¨²n punto". Y Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar remach¨® unos meses despu¨¦s: "La hip¨®tesis de ETA ya est¨¢ en el Parlamento y aumenta con el paso del tiempo. Todos los grupos terroristas tienen relaci¨®n entre s¨ª".

- Un n¨²mero de contacto de ETA que no fue tal. El Mundo se embarc¨® en septiembre de 2004 en una nueva teor¨ªa para meter a ETA en la trama del 11-M. En esta ocasi¨®n utiliz¨® una comunicaci¨®n en la c¨¢rcel entre Antonio Toro Castro -delincuente habitual- y Emilio Su¨¢rez Trashorras -ex minero que facilit¨® la dinamita a los terroristas islamistas y que ha sido condenado por ello a 34.715 a?os de c¨¢rcel-. Toro le pas¨® a Trashorras desde la c¨¢rcel un n¨²mero de contacto con ETA, titul¨® el peri¨®dico al que alimentaba el Partido Popular.

Ese n¨²mero de tel¨¦fono, seg¨²n explicaba la informaci¨®n -basada en declaraciones del delincuente Raf¨¢ Zouhier, tambi¨¦n condenado ahora por los atentados-, se lo hab¨ªan facilitado a Antonio Toro otros presos etarras a los que ofreci¨® venderles explosivos.

Todo falso. La investigaci¨®n determin¨® que el tel¨¦fono no correspond¨ªa a un tal Sabino (supuesto etarra) sino a una se?ora (sin relaci¨®n con el terrorismo) y que Toro no ofreci¨® explosivos a los etarras en la c¨¢rcel.

El PP se indign¨® y pidi¨® explicaciones cuando se filtraron conversaciones de etarras en las c¨¢rceles donde desment¨ªan cualquier relaci¨®n con presos comunes que ofrecieran explosivos en las prisiones. Y compr¨® la nueva intoxicaci¨®n de El Mundo. Zaplana lo expres¨® as¨ª: "Hay cosas que huelen mal alrededor del atentado y la posterior investigaci¨®n del 11-M [...] Sabemos que en la c¨¢rcel hubo presos que se pasaron papeles con tel¨¦fonos y algunos eran islamistas y otros etarras. Si luego esos tel¨¦fonos se usaron o no... Eso es lo que hay que investigar". Jaime Ignacio del Burgo puso la guinda: "Gracias a la investigaci¨®n period¨ªstica sabemos que los etarras y los islamistas no son como el agua y el aceite, que nunca se mezclan. ?stos s¨ª se mezclan".

- Un temporizador "como los que utiliza ETA" en el local de un imputado del 11-M.

El 27 de junio de 2006, El Mundo compr¨® mercanc¨ªa averiada de alg¨²n polic¨ªa que se pas¨® de listo: La polic¨ªa hall¨® un temporizador como los que utiliza ETA en el local de un imputado del 11-M. El error era may¨²sculo, aunque el peri¨®dico no rectific¨®. El temporizador terror¨ªfico era para lavadoras, nunca ETA us¨® uno igual. El islamista imputado reparaba electrodom¨¦sticos. El bulo lleg¨® vivo al juicio, donde las evidencias lo aplastaron.

- La furgoneta vac¨ªa de Alcal¨¢. Una frase sacada de contexto sirvi¨® a El Mundo, y al PP, para lanzar una nueva mentira y airear sospechas sobre la implicaci¨®n de aparatos del Estado en el crimen del 11-M. La furgoneta en la que se desplazaron los terroristas hasta Alcal¨¢ de Henares -y donde se encontraron restos de la dinamita utilizada para las bombas y algunos detonadores similares a los de los artefactos explosivos- llevaba en su zona de carga hasta 61 objetos pertenecientes al propietario del veh¨ªculo robado. La declaraci¨®n de un polic¨ªa -"La furgoneta estaba pr¨¢cticamente vac¨ªa"- sirvi¨® a El Mundo para hacer un reportaje fotogr¨¢fico como si se tratara de un juego.

Despu¨¦s, empezaron a sugerir que alguien hab¨ªa rellenado la furgoneta en el traslado de la misma desde Alcal¨¢ hasta el complejo policial de Canillas (en Madrid). Pero todo su esfuerzo fue desbaratado por las declaraciones ante el tribunal del 11-M de seis funcionarios policiales.

Ignacio Astarloa compart¨ªa esta tesis y declar¨® en la comisi¨®n de investigaci¨®n del 11-M: "Tuve la impresi¨®n de que las pistas que apuntaban al islamismo eran intencionadas. Yo entonces estaba muy confuso. Pens¨¦ que me llevaban a un sitio al que me quer¨ªan llevar".

- La mochila con patas. En diferentes momentos de la fabricaci¨®n del gran bulo, El Mundo y el PP se aferraron a la teor¨ªa de que la mochila con la bomba desactivada en Vallecas que condujo hasta los islamistas que perpetraron el atentado era una prueba falsa. Para acreditar su denuncia se basaron en las declaraciones de un polic¨ªa cabreado por no haber conseguido una distinci¨®n tras su trabajo en la jornada del 11-M. ?ste pon¨ªa en duda que esa mochila hubiera estado en la estaci¨®n de El Pozo y que, posteriormente, se hubiera custodiado adecuadamente.

El polic¨ªa en cuesti¨®n estaba durmiendo en su casa cuando la mochila fue encontrada en la comisar¨ªa de Vallecas junto a otras pertenencias que hab¨ªan sido recogidas en la estaci¨®n de El Pozo. El tribunal del 11-M, con el testimonio de numerosos polic¨ªas que intervinieron aquel d¨ªa en la recogida y traslado de los objetivos, ha considerado que la mochila con la bomba que se desactiv¨® en Vallecas estaba en la estaci¨®n de El Pozo y era una de las 13 que los islamistas colocaron en los trenes.

Rajoy asumi¨® ¨ªntegramente la patra?a de El Mundo: "?D¨®nde estaba la mochila? ?Qui¨¦n la puso all¨ª? [...] Esto es enormemente grave. La obligaci¨®n de la polic¨ªa es explicarlo. Si no estaba ?qui¨¦n la puso all¨ª? Requiere una aclaraci¨®n. Es que, si esto se confirma, podr¨ªa anular la investigaci¨®n y podr¨ªa anular el sumario", dijo. Nada de eso ocurri¨®.

- Entrevista al autor por cooperaci¨®n del 11-M. Emilio Su¨¢rez Trashorras es un delincuente habitual, condenado ahora como autor por cooperaci¨®n de los atentados, al que El Mundo entrevist¨® en la c¨¢rcel y public¨® sus confesiones por cap¨ªtulos los d¨ªas 3 y 4 de septiembre de 2006. Las fotos que ilustraban la entrevista presentaban al colaborador de los terroristas as¨ª: "Trashorras posa delante de la casa familiar en la localidad asturiana de Cogollos, donde naci¨® su padre y donde, cuando era ni?o, ayud¨® siempre a la abuela en las faenas del campo".

Una entrevista bondadosa para Trashorras, que un a?o antes hab¨ªa declarado a sus padres durante un encuentro en la c¨¢rcel: "Mientras El Mundo pague, yo les cuento hasta la Guerra Civil". Su comentario ten¨ªa que ver con la entrevista de El Mundo a otro delincuente, ex compa?ero de delitos de Trashorras, que acusaba al ex minero de traficar con explosivos.

Trashorras se explay¨® en El Mundo: "Soy una v¨ªctima de un golpe de Estado encubierto tras un grupo de musulmanes. Todo est¨¢ controlado por los Cuerpos de Seguridad. Existen complicidades que el juez no est¨¢ dispuesto a descubrir".

El peri¨®dico que daba p¨¢bulo a las fabulaciones de uno de los principales culpables del 11-M no ofreci¨® posibilidad de defensa a los acusados por Trashorras: polic¨ªas, jueces y fiscales.

El PP crey¨® a Trashorras, que implicaba a ETA en su testimonio. Del Burgo concluy¨®: "Pues bien, ahora resulta que ETA tambi¨¦n estaba all¨ª, en el 11-M".

- El PP denuncia sin pruebas la manipulaci¨®n de informes. El eurodiputado Agust¨ªn D¨ªaz de Mera, ex director general de la Polic¨ªa, eligi¨® el jueves 14 de septiembre de 2006 para un nuevo infundio que alimentara la teor¨ªa sobre ETA. Se fue a la cadena de radio de la Iglesia a contar su mentira en un d¨ªa donde la tertulia estaba integrada, entre otros, por el director de El Mundo. Este peri¨®dico titul¨®: Diaz de Mera acusa a Rubalcaba de ocultar un informe sobre ETA y el 11-M. El bulo no pod¨ªa ser mayor. El informe supuestamente ocultado estaba en el sumario judicial desde hac¨ªa meses, hab¨ªa sido publicado por algunos medios y no implicaba a ETA en el 11-M.

D¨ªaz de Mera fue puliendo su mentira y acab¨® asegurando que un cargo policial le hab¨ªa contado que ese informe se hab¨ªa manipulado para evitar investigar la relaci¨®n de ETA y los islamistas. Cuando tuvo que explic¨¢rselo al tribunal del 11-M, D¨ªaz de Mera se neg¨® a dar nombres. Prefiri¨® que le imputasen por desobediencia antes que contar detalles que podr¨ªan ser claves para la investigaci¨®n del peor atentado de la historia de Espa?a. Cuando D¨ªaz de Mera cay¨® en la cuenta de su conducta intolerable, revel¨® el nombre de su fuente de informaci¨®n, pero no recobr¨® la credibilidad: el agente delatado declar¨® al juez que todo era una invenci¨®n de D¨ªaz de Mera.

- El matacucarachas que vincula a ETA con el 11-M. Polic¨ªas cabreados contaron una historia imposible y El Mundo la difundi¨® para intentar, por en¨¦sima vez, meter a ETA dentro del 11-M: Interior falsific¨® un documento para ocultar al juez lazos entre el 11-M y ETA. Los lazos a los que se refer¨ªa El Mundo eran un matacucarachas (¨¢cido b¨®rico) encontrado en el piso de un islamista, Hassan el Haski.

Uno de los peritos autores del informe descubri¨® que esa misma sustancia se hab¨ªa encontrado a?os antes en un piso franco de ETA y se atrevi¨® a escribir: "Lo poco frecuente de esta sustancia en actos terroristas nos lleva a la posibilidad de que los autores de estos hechos est¨¦n relacionados entre s¨ª, hayan tenido una misma formaci¨®n o sean los mismos". Ante tama?a elucubraci¨®n sin fundamento cient¨ªfico alguno, los superiores del perito modificaron el informe para retirar las alusiones a ETA. Por ese motivo, los mandos est¨¢n ahora imputados en un sumario abierto en Plaza de Castilla. De la vinculaci¨®n entre ETA y el 11-M, ni rastro.

- Una trama de explosivos sin relaci¨®n con el 11-M: "Ma?ana va en primera, a to' trapo y metiendo mucho ruido". El Mundo utiliz¨® una trama, en la que estaban implicados algunos polic¨ªas y varios delincuentes comunes, para vincular el hallazgo de Goma 2 ECO en un parque de Legan¨¦s con el 11-M. Aunque el delito investigado, ocurrido en el verano de 2006, no ten¨ªa nada que ver con el atentado de los trenes, El Mundo llenaba de sugerencias a favor de la conspiraci¨®n su informaci¨®n del 30 de noviembre de 2006: "Entre los presuntos implicados figura un agente que estaba en la comisar¨ªa de Puente de Vallecas la noche en la que apareci¨® la mochila sobre la que se sustenta la versi¨®n oficial del 11-M. Las pesquisas tienen su origen en la fallida entrega en agosto de cinco kilos de Goma 2 conectados a detonadores en un parque de Legan¨¦s pr¨®ximo al piso donde murieron los islamistas".

Para fabricar el nuevo bulo, El Mundo se aprovech¨® de informaciones facilitadas por otros agentes que estaban al tanto de la investigaci¨®n. Los polic¨ªas hablaban con los periodistas de El Mundo y se animaban entre s¨ª vaticinando que la informaci¨®n iba a meter mucho ruido y montar mucho l¨ªo:

Periodista. "La vamos a liar. Ma?ana vamos a hacer mucho ruido".

Polic¨ªa. "?Va ma?ana en primera?"

Periodista. "S¨ª. Y a to' trapo. Metiendo mucho ruido.

El juez Del Olmo acab¨® encarcelando a los agentes que filtraban la informaci¨®n a El Mundo por revelaci¨®n de secreto.

El PP sali¨® en defensa del montaje de El Mundo y arremeti¨® contra el juez Del Olmo: "Es absolutamente inaceptable e intolerable. Supone un retroceso y una involuci¨®n democr¨¢tica", declar¨® ?ngel Acebes.

- La falsa tarjeta del Grupo Mondrag¨®n. Una de las mentiras m¨¢s gruesas en torno al atentado del 11-M se public¨® en El Mundo el 3 de mayo de 2006 bajo el t¨ªtulo: La furgoneta del 11-M ten¨ªa una tarjeta del Grupo Mondrag¨®n en el salpicadero. Por si no hab¨ªa quedado clara la intenci¨®n del titular, el peri¨®dico lo explicaba en sumarios: "Alrededor de 40 agentes escucharon esa informaci¨®n que apuntaba a ETA". La informaci¨®n se extend¨ªa en detalles: "Los primeros polic¨ªas que llegaron hasta la furgoneta Renault Kangoo, la que se encontraba en la ma?ana del 11-M junto a la estaci¨®n de tren de Alcal¨¢ de Henares, observaron algo en su interior que les llam¨® la atenci¨®n (...) Al polic¨ªa del coche K la tarjeta le pareci¨® un hallazgo importante. Sab¨ªa que la rapidez en la identificaci¨®n pod¨ªa ser crucial. En la tarjeta pod¨ªa leerse con claridad las palabras Grupo Mondrag¨®n. Ten¨ªa un n¨²mero de tel¨¦fono fijo cuyo prefijo tambi¨¦n llevaba al norte. Aproximadamente 40 polic¨ªas escucharon aquella ma?ana c¨®mo se daban los datos de la ¨²nica pista encontrada en el interior de la furgoneta. Sin embargo, la informaci¨®n de esa tarjeta no volvi¨® a mencionarla ninguno de los inspectores de la Brigada de Informaci¨®n ni de la Polic¨ªa Cient¨ªfica que acudieron al lugar... El ministro del Interior en aquel momento, ?ngel Acebes, nunca fue informado del hallazgo de esa tarjeta".

Una historia redonda para involucrar a ETA: "Es evidente que el Grupo Mondrag¨®n y ETA son absolutamente diferentes. Pero, hecha esta aclaraci¨®n, hay que dejar adem¨¢s bien claro que, para los polic¨ªas que hab¨ªan trabajado en la lucha contra ETA, gentes cercanas a empresas del grupo Mondrag¨®n estaban situadas en el entorno del mundo abertzale [...] Lo que realmente tiene trascendencia es que alguien ocult¨® a la opini¨®n p¨²blica y al Gobierno ese dato".

La verdad era distinta. Dentro de la furgoneta s¨®lo hab¨ªa una cinta casete de la Orquesta Mondrag¨®n. La ¨²nica tarjeta encontrada era de Gr¨¢ficas Bilba¨ªnas, empresa madrile?a. El Mundo nunca rectific¨® esta informaci¨®n. Y el Partido Popular se sum¨® con pasi¨®n al bulo. Eduardo Zaplana, uno de los principales divulgadores de las mentiras publicadas por El Mundo, declar¨® en Antena 3 el 4 de mayo de 2006: "La tarjeta existe con toda seguridad. Y ese dato se ocult¨® y no se hizo p¨²blico".